capítulo 11

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Se cuanto quieres a tu familia y que estén bien, en cuanto estos dos se larguen y la casa haya desaparecido, todo volverá a la normalidad ya verás.

Cuando el sheriff colgó la llamada, el hombre que estaba al otro lado y que había participado de la muerte de la familia, igual que el resto del pueblo, puso los explosivos en los puntos marcados y se escondió detrás de la casa, por suerte los explosivos ya no llevaban cables así que no los verían, Dean y Sam llegaron a la casa y entraron como la noche anterior solo que esta vez por la puerta ya que no habían tablas en medio, cosa que les pareció algo extraña pero no le dieron importancia, recorrieron todas las habitaciones esperando encontrar por lo menos los huesos de las víctimas, cuando de pronto vieron el fantasma de la hija mayor que les miró y les habló.

.- que buscáis aquí! Reíros también de nosotros!

.- no, para nada buscamos vuestros huesos para daros santa sepultura y que podáis descansar en paz.

- la chica empezó a reírse fuerte y con sonido triste a la vez.

.- nuestros huesos? Por favor.

.- si, si se encuentran se pueden dar sepultura y mi hermano Dean me ayudará.

.- pues os vais a quedar con las ganas eternas.

.- por que? Ellos ya los quemaron?

Dímelo por señasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora