Capitulo 9: Una Confesión Inesperada

11 2 1
                                    


Narra Tim

Apenas había salido el sol, refregue mis ojos con mis manos, las cuales al verla dejaban ver mi pálida piel.

Esto de estarse muriendo literalmente apesta, tal vez lo bueno de todo esto es que incluso aunque coma no engordo. Jaja, soy un idiota.

Soy el único estúpido que se le ocurre pensar en cosas buenas del cancér.

A veces creo que es un castigo por no haber luchado por mi amor verdadero, simplemente la deje en manos de una maldita mierda falsa como Fredderick. Demonios, Tim. Un idiota grandioso.

Si fuera sincero por una vez en la vida conmigo mismo, no estaría pasando por esto.

Me levante con dificultad de la cama y me dirigi al baño, me puse bajo la ducha y deje correr el agua frio por mi cuerpo desnudo. Dejandome llevar por mis recuerdos.

Flashback

Este día sería diferente, era un día especial. Sarah y yo tendriamos nuestra primer cita oficial como pareja, fue inesperado que ella aceptará salir conmigo, usualmente solo bromeo con ella de invitarla a salir, desde que el idiota de Fredderick se puso de novio con esa puta barata, Sarah ha empezado dejar de juntarse tanto con él... lo cuál me daría una oportunidad con ella. Pero estoy consciente de que ella jamás se fijaria en un idiota como su mejor amigo.

Ibamos caminando compartiendo un auricular, teniamos el mismo gusto musical, por lo cual nos gustaba escuchar música juntos, siempre lo haciamos en nuestro departamento. Uno ponia música mientras el otro limpiaba. Nos turnabamos, y aunque Sarah halla intentado no querer limpiar con la excusa de que su orgullo se "dañaria".

Termino haciendome caso y puse una de nuestras canciones favoritas.

En fin, escuchabamos una canción que háblaba sobre una mal romance. Para ser exactos, Bad Romance de Lady Gaga. Amaba esa canción, describia nuestra relación a la perfección, también por el hecho de que su melodia es pegajosa.

Sin darme cuenta, Sarah en trelazos nuestros dedos mientras tarareaba la canción. Estaba distraída, mirando hacia el piso con un leve sonrojo.

— ¿Sucede algo? — hablo ella sacandome de mis pensamientos.

—N-nada. Es...—me sonroje un poco y continue. —Es raro que me tomes de la mano, digo. Creí que... los amigos... t-t-tu sabes.

Maldeci en mi interior, me puse nervioso y timido. Genial.

—Eres tan lindo cuando tartamudeas y te pones rojo— dijo ella riendo por mi reacción. — Y respondiendo a tu comentario... no es raro. Me gusta la calidez de tu mano... —eso último lo susurro, aunque luego miro a otro lado frunciendo el ceño, para luego soltar mi mano.

Su orgullo volvió a tomar posesión de ella. Odio cuando es orgullosa, siempre poniendo su ego antes que el resto. No quiero meterme pero, no quiero que ella se de cuenta que perdio a todos los que queria por ser orgullosa.

— ¡Oye! Yo... no dije que me soltaras...—volvi a entrelazar sus dedos. Ella no me miro pero correspondio el gesto.

Fuimos al parque de diversiones y nos subimos a su atracción favorita, la rueda de la fortuna. Estabamos en silencio viendo el hermoso paisaje cuando de repente ella hablo.

—Lo siento.

— ¿Por qué te disculpas?

— Por ser una idiota a veces, quiero estar contigo y ser una mejor persona para ti... es solo que...— ella bajo la mirada y sonrió burlondosé de ella misma. — No te merezco, eres tan bueno y lindo conmigo, eres atractivo, de buen corazón y bondadoso. Eres la persona más noble que he conocido y yo soy una basura...

—Eso no es cierto y lo sabes. —tome sus hombros con de licadeza y con una de mis manos levante su barbilla para que me viera. —No me importa si no eres perfecta para los demás, porque siempre serás perfecta para mi... ¿Sabes por qué, Sarah?

—No lo sé.

—Porque eres tu misma, no finges ser alguien para agradar a los demás, eres tu misma y eso hace que te ame con locura. Si no fueras tú misma, no creo que fueras perfecta si finges.

Ella me abrazo con fuerza, ocultando su cabeza en mi pecho, pude sentir lágrimas salir de sus ojos.

—Me gustas, Tim. Me gustas demasiado y tengo miedo de perderte. No quiero que Fredderick nos separe ni ningún otro.

Juntamos nuestras frentes y sonreimos. Para finalmente juntar nuestros labios.

Fin del Flashback.

Luego de eso, fuimos novios por ocho meses hasta que un día Fredderick se llevo a Sarah con él para alejarla de mi para siempre.

Poco tiempo después me enteré de que ellos se casaron. Mi corazón quedó hecho trizas.

Nunca volvi a ser el mismo, nunca pude entender el por qué Sarah se iría con alguien tan despreciable como Fredderick.

Ella dejo de amarlo, pero ahora que perdió sus recuerdos, vive en una mentira creada por él. La maneja a su voluntad y se aprovecha de que yo soy un cobarde de mierda.

Juro que un día hare que esa venda se caiga de tus hermosos ojos, Sarah. Lo juro por nosotros.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 05, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dejame Con Mi OrgulloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora