2017: Republica Dominicana II

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Muchos pensaban que no me afectaba y acepto que en un momento empecé yo misma a creerlo. Pero ¡Dios, no era sencillo! era tan difícil.

Pocos días después mi padre se fué a Los Estados Unidos, ahí las cosas empeoraron aún más.

Mi madre aún no conseguía un empleo, tuvo que buscar la manera para sacar a sus tres hijos adelante, miles de veces me pregunté ¿Por que Dios ha permitido que pasemos por esta situación tan desastrosa? Tan unidos que siempre fuimos, éramos una familia completa y a pesar de los conflictos éramos felices.

Fuimos felices.

Muchas veces pensé que mi madre no se merecía lo que estaba ocurriendo, no podía comprender como era que a las personas buenas le ocurrieran cosas tan desastrosas, situaciones que hacían qué personas en su sano juicio y millones de cosas que aportar al mundo, millones de objetivos que cumplir tomaran la decisión de rendirse o sentirse menos por un error.

Empecé poco a poco y sin darme cuenta a perder peso, estaba muy delgada yo me sentía muy delgada. Y era horrible escuchar chistes acerca de mi delgadez repentina, no me gustaba la persona que estaba viendo, veía a una persona totalmente diferente a mi, una persona triste.

Me estaba convirtiendo en una persona triste.

En esos días traté de hacer algo que me distrajera un poco más, así que traté de seguir escribiendo el libro "Violada por mi vecino" estaba haciendo la tercera parte del libro cuando de un día a otro volví a ingresar a la aplicación y mi libro aparecía como eliminado, fue como si alguien lo hubiera borrado de mi cuenta.

Eso me lastimó mucho. Tenía un año y medio construyendo el trama de la historia y Pff simplemente desapareció.

Tal vez así se sentían mis padres, después de mucho tiempo invirtiendo en algo para que luego al final no sirva de nada. Entonces ¿el esfuerzo no sirve?

Nunca le dije nada a mi madre porque honestamente ella no lo entendería, nunca le llamó la atención leer. ¿A quien se lo diría? ¿a mi hermana? ella siempre usaba el móvil y tampoco era admiradora de la lectura, ¿a mi hermanito? el no entendía sobre estas cosas. Debía decirle ¿a mi padre? Él sólo llamaba por 10 minutos y era algunos días para preguntar sobre nosotros y de cualquier forma el tampoco lo entendería.

Odiaba que las personas trataran de decirme como debería sentirme "Tú debes estar agradecida porque las cosas pasan por algo" o "Cada golpe nos hace más fuertes".

No. Yo me sentía enojada con todo el mundo, era como si el mundo entero no entendiera y por más que trataran nunca lo harían.

Yo tenía que velar por mi madre, nunca permitiría que nadie le faltara el respeto a ella. Entonces ahí fue que intervine en la pelea que tuvieron con mi tía y mi abuela.

Jamás dejaría que alguien quisiera lastimar a mi madre y mucho menos sabiendo que ella era la única que daba todo por nosotros sus hijos y yo la iba a defender de quien sea y como fuera necesario.

Nunca tendré una manera para pagarle a mi madre por todo, su fuerza, su valentía, el coraje para sacarnos adelante después de tantas escupidas que nos dió la vida.

Sin mirar atrás Donde viven las historias. Descúbrelo ahora