Segunda Oportunidad

Capitulo 1: Adiós...

Hoy tenía que ser el día más feliz de mi vida pero se convirtió en la peor de mis pesadillas.

-Vámonos Leo el no va a llegar- me abraso por la espalda -Sácame de aquí Holly- mi mirada estaba perdida en el va y ven de las olas -te prometo que ese imbécil se va ah arrepentir por esto- me guío hasta su coche

En ese momento mientras era azotada por la brisa marina de Belleair Beach, empecé a recordar todo lo que había vivido con Alex y me empecé a preguntar, ¿En donde perdimos el rumbo? ¿Que hice mal para que me dejara plantada el día de nuestra boda?.

Mientras estaba enfrascada en mis pensamientos, muy a lo lejos oí el ringtone de mi móvil sonar. Mi corazón se detuvo y un pensamiento llego a mi mente, ¿será Alex disculpándose o diciendo que no tardaba en llegar?, solo había una manera de averiguarlo y era tomando la llamada, Holly contesto y en seguida le arrebate el móvil para contestar con desespero.

-Alex ¿eres tú?. mordí mi labio con fiereza esperando que fuera su voz masculina la que contestará del otro lado de la linea -Me comunico con la señorita Susan García -soy yo.. -Hablo desde el hospital general de Tampa, lamento informarle que la señora Victoria García fue encontrada herida de gravedad en el hotel...... -holly llévame a hospital general de tampa y rápido. Quite el estúpido velo de mi cabeza -josh acerca el auto rápido, tranquila Leo. Holly tomo mi mano con fuerza demostrándome que ella sería mi apollo y fuerza como siempre -y quítate esto cariño. Jalo el cierre de mi vestido y ese sencillo pero hermoso vestido que mi madre me había comprado cayó en el suelo dejándome en ropa interior, Holly guiño un ojo y sonrió radiante para mí -te vez hermosa, pero no puedes llegar así al hospital. Abrió el maletero de su coche y en el había una pequeña maleta con ropa que Holly siempre llevaba con sigo, la abrió y me dió unos jeans y una camiseta mia -ponte esto y vamos al hospital, sabía que algún día ocuparía estos trapos. sonrió burlona -te espero adentro Leo

Después de ponerme mi ropa y soltarme el cabello, corrí hacia el auto de Holly y Josh su chofer empezó a conducir hacia el hospital, en el transcurso al hospital no podía dejar de pensar en todo el tiempo que había estado parada bajo el sol esperando a que llegara Alex para casarse con Migo, la mejor decisión que pudimos haber tomado fue que solo nos casaríamos en una pequeña ceremonia a la orilla de la playa, solamente íbamos a estar presentes Holly, Greg el mejor amigo de Álex, el Juez y nosotros pero Greg y Alex nunca llegaron y el juez al igual que yo nos cansamos de esperar, le agradecía tanto a Dios no haber Sido humillada enfrente de familiares y amigos de Álex, todavía no comprendía el por qué no llego a nuestra boda pero ya no importaba, por qué ahora mi madre el ser que me dió la vida y quién más me ah amado me necesitaba.

-leo ya llegamos- Holly llamó mi atención para que bajara del auto

Baje casi corriendo en cuanto escuché la voz de Holly, estaba tan metida en mis pensamientos que ni siquiera me di cuenta cuando llegamos al hospital, entre corriendo a urgencia y pregunte por mi madre pero dijeron que se encontraba en la camilla 17, le agradecí a la enfermera y camine con rapidez hacia la camilla, al llegar ahí me encontré con mi madre dormida, su rostro se veía hinchado y lleno de moretones, alguien la había maltratado y lastimado, se me partió el corazón de ver a mi madre en esas condiciones, a penas me acerque unos pasos cuando ella abrió sus ojos.

-Lenore. Dijo casi como un suspiro -mamá tranquila no te esfuerces, tienes que recuperarte pronto si. Mis ojos se empezaron a llenar de lágrimas al ver a mi madre negar con la cabeza -yo se que no me queda mucho tiempo. Dijo con dificultad -Necesito que hagas algo Lenore. Sus ojos pestañeavan con pesades -lo que quieras mamá pero por favor ya no te esfuerces. Una lágrima traicionera abandono mi ojo derecho -Tienes que ser fuerte. Sus hermosos ojos se llenaron de lágrimas y comenzó a llorar -Tienes que irte a Los Ángeles ahí te espera un futuro brillante, como tu sonrisa, tienes que prometerme que vaz a ser una mujer exitosa, una mujer muy diferente a tu madre. me acerqué a su lado para tomar su mano y sentarme a su lado -voy a ser exitosa mamá y tu vaz a estar ahí para verme. -Lo siento hija mía, pero yo no te puedo prometer permanecer a tu lado más tiempo, Te amo como nunca ame a nadie, iré con Tigo pero en tu corazón, espero no vernos pronto mi niña TE AM...oo...

Los ojos de mi madre se cerraron mientras una lágrima rodaba por su ya fría mejilla, mi madre había muerto, pude gritar y aferrarme a su cuerpo pero eso no la traería de vuelta, los doctores llegaron y me pidieron salir y yo ahun en shook salí de ahí para dirigirme a la sala de espera de urgencias en donde Holly me esperaba, cuando Holly me vio supo que algo había pasado, se acercó a mí y me abraso sin saber nada solo me consoló, yo acepté su abrasó y su consuelo y fue ahí en el pecho de Holly donde mis ojos ya no pudieron más y soltaron todas las lágrimas retenidas, llore, grite y me aferre a ella, mientras Holly como pudo me llevo a su coche para que tuviera privacidad mientras los doctores salían a decirme que era lo que procedía.

Hoy 17 de mayo del 2017 un día perfecto, soleado y con clima perfecto para una pequeña boda a la orilla de la playa, se convirtió en un día gris lleno de lágrimas y desconcierto un día el cual nunca olvidaría y a la vez deseaba olvidar.

Deseaba regresar en el tiempo a 2 años atrás y advertirle a mi yo del pasado que no aceptará ser la tutora de Alexander Park, que no aceptará la beca de la universidad y aceptará trabajar para sacar mamá de ese trabajo denigrante, pero no podía, ya no podía traer de vuelta mi vida, hoy solo me quedaban los recuerdos de lo que no debió pasar.