Los pasos resonaron en todo el lugar, él solo miraba al frente, viendo como la puerta se hacía cada vez más grande, esa puerta que daría paso hacia su padre y padre de todos.
Los guardias que estaban custodiando a cada lado de la puerta lo miraron, pero no lo detuvieron, no tendría caso. Solo abrieron la pesada puerta para dejarlo pasar.
─Mi querido hijo, ¿Qué haces aquí? ─
Un hombre de apariencia de la tercera edad, con barba pronunciada y llena de canas, al igual que su cabellera, estaba sentado en una silla de color dorado.
─Padre, hoy vengo a hacer una petición ─ él se arrodillo frente a su padre.
El hombre solo sonrió de lado y se levantó de su silla, bajo las escaleras y se acercó a su hijo, el más querido.
─ ¿Qué es esa petición? Dime, y si está en mis manos, con mucho gusto lo haré ─
Él levanto la cabeza, el hombre le tendió una mano y él lo tomo sin pesarlo, se levantó estando frente a frente del hombre.
─Padre, quiero pedirte que me dejes bajar al mundo de los humanos, no puedo seguir mirando como ella sufre cada vez que reencarna, ¿Qué pecado ha cometido para merecer eso? ─ sus ojos brillaban con el intenso sentimiento de dolor en su corazon.
─Hijo mío, no puedo cumplir esa petición, sabes muy bien que no está permitido interferir en las vidas de sus protegidos, sufrirías tan solo pisar el mundo humano ─
─ ¿Cómo hacerme llamar ángel guardián si dejo que mi protegida viva con dolor siempre? Padre, ambos sabemos que en esta vida, su alma no podrá aguantar más, las heridas han dejado cicatrices permanentes. Tal vez no vuelva a reencarnar ─
El hombre calló, miro al angustiado ángel, él también sufriría si uno más de sus hijos sufría, no podía dejar que ese bello ángel bajara al mundo humano.
─Es imposible que vayas al mundo humano ─
─Padre, para usted nada es imposible, por favor, permítame estar a su lado, permítame... deje que le dé una vida feliz, ya sea la última vez, y a cambio, si así lo desea, no volveré a verlo nunca más ─ la convicción que mostraba el bello ángel, hacia tambalear la firme decisión del hombre.
─Dime, ¿te has enamorado de tu protegida? No sería la primera vez que ha pasado ─
─El amor se puede definir de muchas formas, pero sí, padre, amo a mi protegida ─ sonrió él.
─Jungkook, ¿Sabes porque te he puesto ese nombre? ─ él negó. ─ Es porque eres como la primavera, lleno de luz, de calidez, amo a todos mis hijos, pero tú eres diferente y ellos lo saben... vivir en el mundo humano es muy difícil, ¿podrías soportarlo? Estarías solo, yo no podría ayudarte en ningún momento, tendrás que trabajar para conseguir tu propia comida, el aire de ellos podría enfermarte, pues está lleno de maldad, el aire aquí es puro, aquí no llega la maldad, sabes muy bien que el infierno también se encuentra en la tierra ─
─Entonces padre, déjeme llevar un poco de este cielo hasta ella, usted ama a los humanos, por eso nosotros nacimos, para cuidar de ellos, de protegerlos de diferentes accidentes hasta que llegue su hora acordada de estar a su lado de nuevo, déjeme amarla como usted nos ama a todos ─
El hombre lo miró, sentimientos de amor por su hijo, de dolor por dejarla ir y de orgullo por lo que estaba por hacer, pasaron por el rostro de él.
─Te daré el permiso, pero eso conlleva un gran sacrificio, lo sabes ─
─Aceptare lo que tengas para mi sin rechistar ─
Él solo asintió , empezó a decirle lo que pasaría una vez hubiera pisado la tierra. Y sin importar, el bello ángel solo asentía, pues había conseguido poder estar al lado de su protegida.
(...)
─ ¿Te ha dejado partir?─ preguntó uno de los ángeles.
─Lo ha hecho ─ respondió él.
─Pero Jungkook, he escuchado que el mundo de los humanos es demasiado difícil ─
─Seokjin, créeme, en realidad no me importa mucho si es difícil, yo tendré la oportunidad de poder salvar a mi humana de la oscuridad, de la desesperación ─
─Pero no tendrás el poder de ver la maldad, tampoco podrás volar por los cielos como solemos hacerlo ─ volvió a decir el ángel Seokjin preocupado, tal y como ya lo había hecho anteriormente cuando escuchó por primera vez el deseo de su hermano.
─La maldad no la podre ver, pero si la podre sentir, el volar por los cielos no lo es todo, el amor que siento por mi protegida es mayor que la alegría que siento por volar ─ sonrió él.
─Sufrirás, y no quiero que sufras Jungkook, pero puedo entender lo que sientes, tal vez yo haría lo mismo ─ el otro ángel que estaba con ellos dio su opinión.
─Mi querido Hoseok, se que me entiendes más que nadie, y como tal, prometo hacer algo para ayudarte ─
─Gracias ─ la sonrisa del ángel Hoseok se hizo presente.
─Bueno, es hora de que me despida de ustedes, nuestro padre me ha dado solo unas horas para despedirme de ustedes, pronto me enviara a la tierra y me convertirá en humano ─
Ambos ángeles masculinos lo miraron con tristeza, pero sabiendo que él no daría su brazo a torcer. Había tomado su decisión, y él ya tenía casi un pie en la tierra.
─Cuídate mucho, no sé si volverás a vernos, pero nosotros trataremos de cuidar de ti ─
─Un ángel no puede tener a otro ángel guardia para su cuidado ─ sonrió él.
─Eso no importa ─
Ambos chicos sonrieron y él también, los abrazó a ambos y después los soltó para dar un par de pasos hacia atrás.
─Los quiero mucho, por favor, cuiden de padre ─
En respuesta solo sonrieron, Seokjin y Hoseok vieron partir a su hermano rumbo a la tierra. Claro que lo seguirían viendo, pero él ya no podría verlos a ellos, eso era parte de ser humano.
Jungkook se encontró con su padre, quien lo despidió con unas sonrisa triste, él chasqueo los dedos y Jungkook cayó al suelo perdiendo la conciencia.
Al despertar, él recordaría todo, pero no tendría el poder de un ángel normal. Él lo sabía, pero estaba dispuesto a todo por su humana.
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・。Angels 。・ ━ ⸙ ℐeon ℐungkook
FanfictionHubo una vez en el cielo un lindo y terco ángel guardián. Pidió permiso a su padre, Dios, para descender a la tierra, donde su protegida estaba. Cansado de verla sufrir en cada vida que pasaba, decidió salvarlo. "No temas, pues siempre estaré a tu l...