Vongola Family ~Love in the mafia~

1

VONGOLA FAMILY ~LOVE IN THE MAFIA~ <3

Mi nombre real no tiene mucha importancia, sin embargo, me siento en la obligación de contarle un poco de mi antes de comenzar con el enredo. Como dije, mi nombre no es importante así que no lo pregunten, solo puedo decirles que era una joven y nada atractiva ingeniera, graduada de una de las mejores universidades en la carrera de TI, amaba mi trabajo en una consultoría, si bien era pesado, jamás me queje, ganaba lo suficiente para sobrevivir y vivir de mi vicio.

Nunca fui una joven a la que la sociedad consideraba "normal", fui de lo mas extraña, desde no utilizar vestidos todos los días, odiar el maquillaje, tener escasos cinco pares de zapatos; dos de ellos eran zapatos deportivos, y, sobre todo, elegir una carrera donde el sexo femenino escasea, los mejores años de mi vida, la universidad; aunque eso ya no viene al tema. Entre uno de mis curiosos gustos estaba el jugar juegos otome, esas malditas cosas adictivas, los tenía instalados en el teléfono, en pc, en consola, era una adicta a ellos, de todos los idiomas y países.

Un vicio como este, sale caro, la exportación de juegos de un país a otro es costoso, por eso no me molesto estudiar algo en lo que, seguramente me pagarían bien, aunque me lleve una friega en cada proyecto, en especial con aquellos que poseían contratos con incentivo o cumplimientos de objetivos, ganaba más.

Extrañare esa vida, sin duda alguna. Pero tampoco puedo decir que no me guste la nueva vida que acaba de comenzar. Regresando al punto. Una noche, estaba dando por terminado un día productivo de trabajo, aun me quedaban varios procesos que revisar de cierto proyecto, pero quería jugar a cierto juego japonés que recién volvía a jugar, me faltaban dos rutas para terminarlo, así que estaba desesperada; con el objetivo de jugar una hora al llegar a casa y dormir el tiempo que me quedara de regreso a la oficina, Sali de las instalaciones de mi trabajo y mientras cruzaba una avenida mientras el semáforo daba paso a los peatones fue que ocurrió... Un accidente, un tráiler iba a gran velocidad, no alcanzo a verme, si les soy sincera, ni siquiera sentí dolor, pero fue así como morí.

Aunque morí en mi mundo, por alguna extraña razón cuando desperté, me encontraba en un cuarto blanco, mi cabeza dolía a horrores, mire a mi alrededor y solo pude ver a una mujer de castaños cabellos durmiendo al lado de la cama, su cuerpo era cubierto por una sabana, unos metros atrás, en un pequeño sofá, se encontraba un hombre también durmiendo. Por alguna razón, ambos se me hicieron familiares. Me removí un poco para intentar levantarme, lo que llamo la atención de la mujer y despertó.

—¿Estas bien? — me pregunto con voz angustiada. —¡Querido! ¡Despierta! ¡Llama a una enfermera o al doctor! ¡Nuestra hija despertó!

Ante esas palabras el hombre que yacía en el sofá despertó. Me miro asombrado mientras lagrimas salían de sus ojos color chocolate. —¡Gracias al cielo! ¡No tardare querida, no dejes que la niña se mueva mucho! — dijo y salió del cuarto.

Yo mire a la mujer, ella también parecía contener las lágrimas, de pronto me abrazo y un sentimiento de calidez me invadió.

—¡Estoy tan feliz de que no te haya ocurrido nada! — murmuro en voz baja. — Lamentamos mucho lo que paso mi vida, te prometo, que una vez que salgas del hospital, nos mudaremos a un lugar donde no vuelva a ocurrir nada malo y te prestaremos mayor atención.

Esas palabras por alguna razón me hicieron que lagrimas salieran de mis ojos, por instinto correspondí al abrazo, y vaya sorpresa me lleve al ver unas manos pequeñas. Solté un ligero grito.

—¿Qué sucede Haru? — pregunto la mujer preocupada.

—¡Espejo! — murmure. La mujer un tanto indecisa me presto el espejo de mano, asustada lo abrí poco a poco, cuando mi reflejo se vio en él lancé un grito de sorpresa. Segundos después la puerta fue abierta y por ella entraron el hombre anterior junto a una mujer vestida de blanco y otro hombre que vestía bata.

—¡Muy bien! — hablo el hombre de la bata —¡Vamos a revisarte! Seguramente estas confundida y es algo normal, así que vamos a comenzar con cosas básicas — explico mientras revisaba mi cuerpo, después comenzó a hacerme preguntas cotidianas, como que colores veía, como se llamaban ciertos objetos, hasta que llego a una pregunta crucial. —¿Y bien pequeña? ¿Sabes cómo te llamas?

Hice una pose como si estuviera pensando y negué. —No recuerdo quien soy — conteste, obviamente es mentira, recuerdo mi vida anterior pero no tengo nada de recuerdos de esta

—¿Qué es lo que tiene doctor? — pregunto angustiado el hombre.

—Parece que tiene amnesia, mañana le haremos estudios para conocer si es solo por el golpe o se volverá algo permanente, por el momento no la obliguen a recordar nada, podría ser perjudicial para ella, así mismo, escribiré esto en su historial médico.

—¡Ya veo! Gracias Doctor — mencionaron ambos adultos al despedir a los especialistas.

—Sera mejor que duermas de nuevo hija — hablo el hombre. Asentí por impulso y me volví a acurrucar en la cama.

Tape mi cabeza con la sabana y espere a que el lugar quedara en total silencio, al hacerlo lleve mis manos a mi cabeza e hice intentos de jalar mis cabellos, había renacido, y no solo eso. Renací en el ultimo juego otome que estaba jugando, y para hacerlo peor renací como Miura Haru, un personaje secundario.

------------------------------

Feliz cumpleaños Faby, intentare no tardar tanto en actualizar esto, pero tu sabes cuan ocupada estoy.

Para los demás, espero no me linchen por esta cosa hermosa jaja y le den amor para que actualice mas rápido Bye