♦*NIÑO*♦

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PV TAO:

Tal vez me mostraba como uno pero no lo era, me fastidiaba que siempre escuchaba cada vez ese terminó hasta mi mejor amigo lo decía.
No entendía el motivo de hacerme enojar, intentaba de no tomarlo tan a pecho así que simplemente ignoraba.

Me iba reunir con un grupo de amigos, iría a la casa de uno de lo nombrado anteriormente para disfrutar un día de películas. Obviamente no sería terror, le tenía pánico. ¡Lo detestaba! Sabía que esas cosas podrían ocurrir en cualquier momento.

Suspiro hondo para seguir arreglando mi cabello para verme en el espejo aquel traje bastante detallado, expresando mi forma profesional de verme elegante.

No había pasado mucho tiempo cuando llegué aquel lugar destinado, me di obligado tocar la puerta por unos segundos hasta escuchar una afirmación atrás de la puerta.
Observé cómo mi amigo, Don orejas como le solía decir me saludaba mostrando sus hoyuelos.

- ¡Llegaste! Pensé que te esconderias

- Y sigue con esas cosas...

- Aish, no te enojes niño panda. Entra.

Abrió más la puerta dándome espacio de hundirme en ese ambiente agradable, un par de cabezas se voces me indicaban que ya habían llegado todos.
Caminé en dirección hacia los ecos para encontrar esos pendejos que consideraba amistades aunque, había un rostro nuevo.

- ¡Taozi! Llegaste tarde ¿No encontrabas algo Gucci?

- Tu mismo lo dijiste Baek, no puedo vestirme con cualquier prenda

Este hizo puchero sentándose más cerca de Xiumin, el cual me miraba entre risas por dejar a la diva en su lugar.

- Bueno. Lo importante que llegaste así que estamos todos

Esa cara nueva seguía mirándome fijamente, tenía un cabello marrón claro como el chocolate y unos ojos intensos.
Facetas finas pero con tensión serio y frío, me llamaba la atención esa forma de expresar. Tan varonil y sumo a la cantidad cuando habló.

- ¿Que vamos a ver?

Muerdo mi labio inferior suspirando suave, aunque no serviría de mucho. Aquel chico no dejaba de verme, cada movimiento que hacía me colocaba nervioso

- ¡Ohh! Es cierto... No conoces a Yifan.

Parpadeo varias veces, así que ese es su nombre eso significa que es...

- Si. Es chinito come arroz como tú

Se escuchó las risas por el comentario del niño dinosaurio, Chen como siempre con sus malos chistes

- Es un placer, Tao.

- Igualmente, Yifan

Sonreí abiertamente mostrando mi lado carismático para sentarme a un extremo del sofá para notar como sacaban las películas y empezaba el momento de cine doméstico

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Me hicieron llegar a un acuerdo en ver una maldita película de terror.
Yo no quería pero como eran 10 votos contra uno, si porque Baekhyun quería ver Victoria secret.

Cuando la película dio a reproducir, me acerqué más al mayor de mi lado.
Este miró sobre su hombro para burlarse de mi

- No ha pasado nada y ya pareces un niño asustadizo

Esa frase

Lo miré mal arqueando una ceja, me alejé rápidamente para caminar hacia la cocina. Apenas me conocía y salía con esa clasificación.
No me gustan no se significa que sea un niño, prefiero mil veces ver películas de acción y aventura, como las de Los hombres de negro o Una pareja explosiva
Que ver cosas que te hagan gritar del Maldito susto que te dan.

Me servi un vaso de agua para ver la hora, era de muy noche aún así. Seguirán viendo esa película que no quería

Me alejé con cuidado sin que los demás se dieran cuenta para salir del lugar, acomodé mi suéter para empezar la caminata hacia mi hogar. No quedaba tan lejos, eran como 10 minutos. En eso escuché la puerta abrirse, unos pasos acercarse

- Si Yeol, lo siento pero debo irme

- Puedo acompañarte si deseas

Me detuve ante aquella voz tan gruesa, más que el propio orejón. Volteo hacia la persona dueño de esa melodía, este me miró algo apenado mientras caminaba hacia mi

- No hace falta. Si debo soportar que te burles de mi durante el camino

- No lo haré. Y por eso ... Lo siento, no quería hacerte sentir mal

- No me gusta ese término. Solo que, todos piensan que soy un niño

Agacho la mirada Suspirando hondo estando cansado de escuchar eso siempre cuando se refieren a mi.
Sentí como un peso llegaba a mi hombro, levanté la cabeza notando como el mayor me sonreía de forma cálida

Apreté mis labios con fuerzas para aceptar ante su invitación, le seguí el paso dándole explicación de donde quedaba mi vivienda

Durante esa trayectoria, me hacía reír con esos extraños temas, sonreí tierno arqueando una ceja

- Así que, Si Hitler no haya muerto
Estaría por allí mandando un país para acabar con todos. Vaya que villano... Le quedaría bien estar en DC o Marvel

- Pues... Como el doctor Mostaza, Por el gas que hicieron contra los británicos

Solté una carcajada mirándolo divertido golpeando leve su hombro como forma juguetona, no me había dado cuenta en que momento llegamos a mi entrada.
Sonreí leve para meter mis manos en mis bolsillos buscando las llaves para abrir la puerta

- Gracias por acompañarme

- No hay de que... Tenía que hacerlo o sino, me perseguirá en mis sueños más oscuros

- Uy si, soy un fantasma

- Bueno, con esas ojeras tal vez...

- Aish, ¡Tonto!

Le saco la lengua como un pequeño infantil para lamer mis labios, empujo la puerta para entrar pero me detengo.
Ya era muy tarde como para que Yifan se fuera de esa forma, por algo, me preocupaba

- ¿Quieres pasar?

Este se quedó pensativo por unos segundos para aceptar lentamente caminando atrás de mi, cerré la puerta para entender la luz mostrando mi sala acogedora.

Escuché unos ladridos para cargar aquella bola de pelos blanca que me lamía el rostro, miré al mayor que me veía atento. Me acerco mostrando a mi mascota

- Ella es Candy...

- Hola pequeña.. es linda

- Lo sé. Es mi consentida

- Como tú...

- Yo no soy consentido - hice puchero mirándolo sonrojado

- No me refería a eso...

Me sonrojo de más cuando supe a que se debía, dejo a Candy que fuera hacia el sofá para mirar al mayor estando algo en shock

- Eres muy lindo Tao... Me gustaría, invitarte a salir

- ¿Eso es una cita, Señor Dragón?

- Lo es, Señor panda.

- Aish... ¿Y qué pasa si digo que no?

- Bueno... Algo que las películas de terror solucionarán

Parpadeo varias veces notando su cercanía, sonreí nervioso para rodear su cuello para acercarlo hacia mis labios los cuales no dudó en corresponder.
Acariciando sus mechones siguiendo aquel beso que se volvió como una película, pero esta vez, sería una de romance.

TAORIS (SHORT FANFICS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora