Capitulo siete: tiempo a solas

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Narra Aiko:

—¿porque tenemos que separarnos?— cuestionó Karin bufando —¡se supone que tú tendrías que llevarnos directamente hacia el Bijuu!

— ¿es así de molesta siempre?— cuestione ignorándola mirando a Suijetsu

— es un dolor de cabeza, créeme— rodo los ojos el chico

—¡¿porque no te callas maldito canalla?!— le gritó con odio la pelirroja

— eres tan escandalosa— bufé— y para responderte la pregunta, supongo que está dentro de una barrera, no puedo localizarlo, así que tendremos que buscar información

— inútil— sonrió con suficiencia la pelirroja

— repite eso y habrá un integrante menos en Taka— sonreí irónica mientras ella retrocedía— pasaran dos días antes de que podamos encontrar el lugar correcto donde tengan información.

—¿qué haremos entonces?— cuestionó Suijetsu relajado

— Suijetsu irá solo, Karin Y Jugo irán juntos — ordenó Sasuke— tú vienes conmigo. Nos reuniremos en dos días en este mismo lugar

Con un último suspiro seguí a Sasuke, escuchando a lo lejos a Karin disgustada

(...)

— parece que no saben nada — bufo Sasuke

La primera y segunda aldea había sido un completo fiasco, nadie conocía al Hachibii, ahora nos encontrábamos en un restaurante, faltaban tan solo unas cuantas horas para que anocheciera

—¿qué desean?— pregunto una mesera

Era bonita y no dejaba de mirar interesada a Sasuke, ¿todas las chicas eran así? Era tan repugnante ver como babeaban por el

Yo me apresuré en dar la orden siendo seguida por Sasuke, quien me sorprendió por su pedido

— creí que querrías dangos— susurré

Estaba demasiado acostumbrada a ir de un lado para el otro con Itachi que ya hasta extrañaba sus gustos

— no me gustan los dulces— respondió seco

Bueno, al menos me respondió, últimamente estaba más comunicativo

—¿entonces que es lo que te gusta?— murmuré divertida— ya sabes, para saber que regalarte el día de tus cumpleaños

Una ligera sonrisa divertida apareció en sus labios, un extraño calor se apoderó de mi cuerpo

— tomates— respondió ahora más serio

¿Tomates? ¿Está hablando enserio? Ambos hermanos eran Tan distintos

— totalmente inesperado— murmuré burlona, tomando del té caliente que había traído la mesera— eres lo opuesto a él

Sasuke bajo la mirada y decidió permanecer en silencio, olvidaba que el efecto Itachi aún estaba en el aire

(...)

Habíamos decidido quedarnos a dormir en la aldea, necesitábamos recobrar fuerzas y descansar para mañana

La habitación tenía dos camas, así que antes que de Sasuke pudiese reclamar la suya corrí hacia la que estaba al lado de la ventana, abriéndola en el proceso disfrutando de La brillantez de las estrellas

— a mi hermana le encantaba verlas— susurre al sentir su mirada clavada en mi espalda— aveces creo que lo esta haciendo en este mismo instante, compartimos algo a distancia

—¿como era?— susurró Sasuke sentándose en la cama, provocando un pequeño sonido metálico

Mi mano reposo en la ventana de vidrio, sentía los ojos llorosos

— tierna, fuerte, y estaba muy orgullosa de su hermana mayor. Quería ser como yo— sonreí con tristeza— supongo que ahora no

Me giré hacia Sasuke con una nostalgia infinita

— te dije que Itachi y yo éramos muy parecidos— baje la mirada al no poder aguantar sus ojos azabaches — lo di todo por ella, mi seguridad, mi imagen y orgullo, lo deseché todo por su bien. Y supongo que aún me odio y al igual que tú estara planeando un modo de matarme

Sasuke se levantó de golpe de la cama, y me miró con una seriedad extraña, filtrando uno que otro sentimiento, cerró los puños con fuerza y me encaro

— dile la verdad— manifestó con paciencia apretando los labios en el proceso

— lo haré— asentí — viendo como has sufrido por la muerte de tu hermano, no dejaré que ella lo sufra, hay mejores formas de lograrlo

— si él lo hubiese hecho tal vez...— susurró

Con un suspiro cansado camine hacia el, abrazándolo con fuerza, ambos extrañábamos a Itachi, era un dolor constante en el pecho que nos carcomía por dentro, pero sabía que Sasuke sufría más, en ese sentimiento de dolor y pérdida también se mezclaba la culpabilidad

—¿tienes algún sueño Sasuke?— susurre en su oreja — uno que no tenga que ver con destruir

Él mantuvo sus manos a los costados sin devolverme el abrazo, él era tan poco expresivo que no me sorprendió

— restablecer mi clan — dijo firme en un susurro

— es bueno saber que tienes otros objetivos además de atacar la aldea— me separé mirándole a los ojos— escúchame bien Sasuke, a pesar de todo lo que hemos pasado, yo estaré contigo, sin importar cual sea la situación velaré por ti

Se mantuvo impasible mirándome firmemente el rostro intentando descubrir la trampa que lo envolvería, pero no la hallo, estaba siendo totalmente sincera

Sus manos frías se posaron en mis mejillas, ocasionándome un leve escalofrío

—Sasuke — susurre sintiendo las mejillas sonrojadas, teniendo su rostro tan cerca

Mire con detenimiento aquellos orbes negros, sorprendiéndome por la intensidad en que me miraba, esa intensifad que me atrapaba y no me dejaba ir, me absorbía por completo

Su tacto frío tomó mis mejillas con firmeza, sin duda alguna depositó sus labios sobre los míos, lentamente con miedo al rechazo

Entreabrí los labios con sorpresa, no esperaba este tipo de cariño proviniendo de Sasuke, estaba mal, gritaba mi subconsciente, pero el latido de mi corazón fue lo único que pude escuchar. Cerré los ojos y correspondí el beso con fiereza, desesperada por tenerlo cerca, intentando apagar aquel fuego que se apoderaba de mi cada vez que estaba cerca, esa necesidad incierta de estar a su lado, cuando fui a konoha y le conocí por primera vez al principio solo sentía curiosidad, el tiempo pasó y un extraño cariño se apoderó de mi acompañado de un cosquilleo constante en mi corazón cada vez que le veía, y ahora... ahora que éramos mayores, que la influencia de Itachi estaba lejos y podía cumplir con mi voluntad... cuando podría dejar de lado los deseos del difunto y pensar en mis oscuros deseos que incluso apenas estaba descubriendo, aquel fuego abrazador se había apoderado de mi, esa necesidad incomprensible de estar a su lado y protegerle... de no alejarme de él, todo explotó en aquel tacto, el cosquilleo se intensificó y el calor estuvo a punto de sofocarme
Fue entonces cuando nos separamos, sabía que estaba sonrojada, pero el sentimiento no se iba, estaba presente incluso con más fuerza, sentía un iman atrayente que me indicaba a besarle de nuevo, a no dejarle ir nunca

Allí, bajo la luz de la luna, mientras nuestras sombras volvían a unirse lo entendí

Yo... estaba enamorada de Sasuke Uchiha y eso me aterraba

EL LEGADO DE ITACHI- SHIPPUDENWhere stories live. Discover now