Viviendo con mi mejor amiga || Adaptación Caché

Capitulo 6

Poche condujo muy tranquila, pusimos la radio, esta vez trataba de no moverme mucho para no despeinarme, pero seguía cantando como una loca.

-¿cantaste en el auto de ella? – dijo sin quitar la vista de la carretera

-no

-porque sabes que pareces loca – me sonrió

-no – me cruce de brazos

Me tomo la barbilla haciendo que la mirara

-una loca muy atractiva

Me volví a sonrojar

-bueno y dime, ¿a dónde me llevas? – dije tratando de volver a mi color normal

-es un restaurante

-oh, pensaba que íbamos a reparar carros Poche

Se rio

-Calle, es una sorpresa

-Amo las sorpresa

-lo se

Llegamos hasta el restaurante, no lo podía creer que Poche me trajo aquí, ¡no!

-¡no!, ¡por Dios!, ¿es enserio? – grite emocionada

-muy enserio Calle

-si es una broma, es de muy, muy mal gusto Poche

-para nada

-¡OH POR DIOS!, ¡ME TRAJISTE AL RESTAURANTE MASA!*

*Masa, otro restaurante japonés, el dueño, el chef Masa quien crea sus menús con los ingredientes más finos de la temporada haciéndolos sumamente apetitosos. Para cenar en este restaurante es necesario apartar uno de los 26 lugares disponibles con 3 semanas mínimo en adelantado, pero los verdaderos amantes del sushi sabrán que la espera valdrá totalmente la pena para degustar una de las cenas más deliciosas que probarán en sus vidas.

-¿Cómo lo hiciste? – la volteé a ver incrédula

-anda, vamos, no hay que desperdiciar el tiempo. – me tomo de la mano y salimos al restaurante.

Nos sentaron en una mesa, yo seguía sin creerlo.

-gracias Poche

-eso no se agradece, además tenías que pasar el mal trago de la cita con esta idiota.

-gracias

Pedimos nuestra comida.

-oh por dios, esto esta exquisito

-lo se

-¿ya habías venido?

-no, es mi primera vez

Después de deleitarnos con la comida y el vino, pedimos la cuenta.

-bueno, mitad y mitad - le dije a Poche

-ni lo creas Calle.

-Poche, ¿ya viste la cuenta?

-yo te traje a cenar, me corresponde pagar, además si pagas no te volveré hacer de comer o a traerte.

-solo porque me encanta tu comida, y que me traigas a cenar.

Condujimos hasta la casa.

-¿cómo le hiciste para comprar un vestido de mi talla?- dije mirándola

-Calle, te conozco mejor que tú.

Eso era cierto, conocíamos mejor a la otra que a nosotras mismas