Capitulo 30

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La siguiente semana fue parecida.

En las mañanas Poché me dejaba algo con una nota, iba al trabajo, en las tardes salía con Pau o con Laura. Y en las noches veía televisión.

Sí, una vida de anti-social.

Mi teléfono vibro

"Hola"

"Hola- era Laura- Oye me acaban de decir sobre una fiesta este fin"

"¿Mañana?"

"Sí"

"¿Va a ser formal?"

"Sí, y mucho, así que cómprate algo bonito"

"¿En dónde va hacer?

"Tranquila, yo te paso a recoger a las ocho, adiós"

Creo que mis amigas tenían la costumbre de hacer que vaya a algún lado sin mi permiso y antes de que pudiera negarme me colgaban. ¿Qué le puedo hacer?

Me subí a mi auto y me fui al centro comercial para comprar algo bonito.

Pase toda la tarde buscando vestidos, pero no encontré nada. Regrese a mi casa derrotada.

Vi el carro de Poché estacionado frente a ella.

-Hola- me saludo abriendo la puerta de mi coche.

-Hola - salí del coche.

-¿Cómo estás?

-Amm, ¿bien?, y... ¿tú?

Se rasco la cabeza con una sonrisa

-¿Bien?

-Ah- le di una sonrisa - ¿tu... quieres...mmmm pasar?

-Sí.

Me ayudo con las bolsas.

-Ya fvuelvo, iré a cambiarme, mmmm. Tú te puedes sentar si quieres - dije subiendo las escaleras.

-Gracias

Entre a mi cuarto y me quite la ropa del trabajo, me puse un short de algodón y una camisa, me puse unos tenis y baje.

-¿Qué haces Poché?

Estaba en la concina

-Haciendo espagueti

-No tenías porque

-Yo quise, ahora solo siéntate.- dijo sonriéndome

Sin pelear me senté en el desayunador.

-¿y qué has hecho? - dijo ella cocinando

¿Qué le iba decir?, ahh ya se, llorar porque terminamos, pensar en que hice mal, en que te sigo amando, que quiero estar contigo.

-No mucho, ¿y tú?

-Igual.

En el aire se respiraba incomodidad.

-Así que, ya te integraste más en la empresa- dije

-Sí, creo que me hacía falta.

Después Poché termino de hacer la cena, la invite y empezamos a platicar. Pero con  más incomodidad.

-¿Y qué piensas hacer mañana? - me dijo

-Laura me invito a una fiesta

-¿Y piensas ir?

-Sí, solo que no encontré vestido.

Terminamos de cenar. Me levante y le recogí el plato a Poché

-No, déjame yo lo hago - dijo ella

-Por favor, tu cocinaste, yo lavo.

-No - cuando intente tomar el plato me eche encima la salsa

-¡diablos! - dije

-oh, mierda, déjame ayudarte

-no, me voy a cambiar

Subí a mi habitación.

Me quite la camisa y el short

-Calle - Poché paso a mi habitación

Me tape

-Poché

-oh, perdón. Ya me voy - pero se tropezó con mi camisa y cayó encima de mí.

Nos quedamos viendo a los ojos, su mirada bajo a mis labios, al igual que mis ojos se desviaron a sus labios.

Sin darnos cuenta se juntaron, fue un beso lleno de amor, lujuria y necesidad.

Entrelace mis manos en su cuello, y mis piernas alrededor de su cadera.

Poché se quitó la camisa encima de la cabeza, yo iba desabotonando su pantalón.

De un momento al otro estábamos desnudas las dos.

-Calle - dijo Poché , estaba pidiendo permiso

Le di un beso en señal de aprobación.

Entro en mí. Solté un gemido al igual que ella.

Rasguñe su espalda con las yemas de mis dedos.

Entraba en mi cada vez más adentro, y con más firmeza.

El sol de la mañana me despertó.

Mire a mi lado y se encontraba Poché con un brazo encima de mi cintura, estaba boca abajo.

Me sentía feliz de tenerla a mi lado. Acaricie su pelo.

-Buenos días - dije sonriendo

Abrió esos preciosos ojos verdes, que se iluminaron al verme

-Buenos días - se paró y me dio un beso - tenemos que hablar

-Poché , no hay nada de qué hablar. Lo siento mucho - dije abrazándola - me porte mal contigo

-Ey, no, no, no, yo fui la imbécil. Por favor perdóname - dijo hincándose.

Le sonreí

-por supuesto que te perdono tonta - le di un beso.

-ahora, empaquemos, que estos días han sido un infierno para mí al no tenerte a mi lado, y no soportare más.

Le plante un beso.

Después de empacar todo fuimos a mi casa y lo pusimos de nuevo todo en su lugar. Me di una ducha y me cambie para ir al trabajo.

-Eres una maldita sucia - dijo Pau riéndose - sexo de reconciliación, el mejor

-Sin duda lo es

-¡Asquerosa! - dijo lanzándome un cojín.

-¿Qué? - dije lo más inocente que puede.

-Bueno, después de esta platica tan linda y pulcra, me voy - dio Pau saliendo de la oficina.

Me senté en mi silla a preparar los papeles. Sonó mi teléfono.

"Hola"- era Poché

"Hola, ¿ya tienes vestido?"

"No, he estado trabajando todo el día"

Viviendo con mi mejor amiga || Adaptación Caché Donde viven las historias. Descúbrelo ahora