she's a rebel - prólogo

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Alba estaba desesperada.

Se había pasado casi tres semanas en un hospital, aburrida en una cama que se le hacía cada noche más incomoda y comiendo básicamente lechuga, sin poder moverse demasiado. Todavía le dolía la espalda sólo de pensar en todo el tiempo que había pasado tumbada tras su operación de urgencia.

Se le había complicado la pielonefritis y aunque había intentado resistir lo máximo posible sin ir al hospital, su riñón había acabado claudicando, y su compañera de piso, Julia, la había llevado a Urgencias casi contra su voluntad mientras se moría de dolor.

Si algo odiaba Alba Reche eran los hospitales, y más después de haber pasado encerrada en varios parte de su niñez. Con apenas once años habían encontrado problemas en su riñón izquierdo, y el pronóstico médico, que había identificado lo que le pasaba como Síndrome Nefrótico, había llevado a su extirpación. Había pasado una época complicada en el hospital hasta que lograron dar con la solución, pero su salud mejoró notablemente en cuanto su riñón restante comenzó a funcionar como debía gracias al tratamiento.

Así que era comprensible que volver a pasar por una infección en su único riñón sano no le pareciera plato de buen gusto, y menos aún pasarse semanas en un hospital.

Cuando pudo al fin tumbarse de nuevo en su cama, al volver al piso, casi quiso llorar, al comprobar que las sábanas eran mucho más suaves de lo que las recordaba y el colchón no destrozaría su espalda.

Volver a casa era un alivio, y tanto María, su otra compañera, como Julia la tenían entre paños, preparando cualquier comida y realizando todas las tareas de la casa mientras ella terminaba su recuperación.

Sin embargo, el lunes de su vuelta a clase fue muchísimo más agridulce.

Sonia, su profesora de Proyectos Artísticos II, la esperaba con los brazos abiertos y una lista de trabajos cuya entrega Alba debía efectuar en el plazo de un mes, a pesar de que apenas quedaban dos semanas de curso, pero la rubia no pudo quejarse, ya que habían ampliado el plazo para ella y pudo realizar a tiempo todos sus exámenes de las otras asignaturas.

En la lista figuraban varias esculturas, que había solventado en los primeros días, pero entonces el "Desnudo" que debía realizar se convirtió en motivo de preocupación.

No tenía modelo, ya que sus compañeros habían utilizado a una que proporcionaba la universidad durante dos semanas para hacer sus cuadros, y además tenía muy poco margen de tiempo.

Fue como un cachorrito desesperado a pedirle ayuda a Sonia.

Y su profesora le dió la tarjeta de Eilan Bay. Al parecer había sido modelo para algunas clases y Sonia sabía de buena tinta que aceptaría posar para Alba con tal de tener un poco más de dinero extra para sus gastos, ya que era estudiante.

Así fue como Alba llamó, con toda la vergüenza del mundo, a aquel teléfono escrito en tinta roja.

- Eilan Bay, tiene nombre de modelo... - Pensó para sí misma, mientras cogía una libreta y un lápiz para poder garabatear durante la llamada.

- Aquí Eilan. ¿En qué puedo ayudarte?

La voz a través del teléfono sorprendió a Alba. Era dulce y afeminada, como un perfume de Agatha Ruiz de la Prada. No sabía exactamente qué esperar de aquella mujer.

- Hola, soy Alba... Alba Reche.- Habló tímidamente, carraspeando antes de completar su nombre con su apellido artístico. - Soy alumna de Sonia Vázquez.

- Ah, Sonia. Es una buena amiga. ¿Necesitas una modelo? - Preguntó la voz, con un deje de diversión. - Normalmente los alumnos de Sonia llaman para eso, por si te preguntas si leo mentes o algo parecido.

Oírla bromear disipó un poco sus nervios.

- ¡Si! Justo eso. Tengo que hacer un retrato. Un... Bueno, es un desnudo. ¿Haces desnudos? - Dijo lo más rápido posible, sin esperar la carcajada que se escuchó al otro lado de la línea.

- Alba Reche, me encanta como te tiembla la voz de los nervios. Claro que hago desnudos, no te preocupes. Tu solo dime hora y dirección y estaré allí. - Le aseguró Eilan, y Alba simplemente pudo sonreír.

- Claro, apunta.

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EMPEZAMOS NUEVA HISTORIA CORTA (don't worry que no voy a dejar Ataraxia, simplemente estoy haciendo cosas nuevas porque estoy un pelín atascada con la otra historia).

Esta mini historieta es gracias a una idea original de HeartNic, dadle las gracias y leed sus historias porque son alucinantes.

Si queréis, dejadme por aquí alguna petición para que haga una historia corta y la suba a "the one with the two girls in love".

El nombre de cada capítulo será la canción que esté escuchando al acabar de escribirlo (thanks Spotify).

REPRODUCID NANA TRISTE Y PREPARAOS PORQUE SE VIENE OTRAS ALAS.

Como siempre, en Twitter me tenéis en @vilpagwriter.

¡Un abrazo!

french girls // albaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora