El Amor Duele

uno

Era principio de un nuevo año escolar, Severus entró al pasillo principal para encontrarse con el muy dichoso sombrero escogedor.

"Nuevo año. Nueva vida" dijo el sombrero al ver a Severus entrar.

"¿A qué te refieres?" pregunto extrañado el hechizero.

"¡Me refiero a que podemos empezar de nuevo! Una nueva vida juntos sin obstaculos, solos" Respondió el objeto.

Severus lo miró, disgustado. No sintiendo lo que su cara emitía. "Lo nuestro no funcionará, objeto inservible. Nos amamos ya hace más de quince años, cuando yo apenas era un adolescente. ¡Ya superalo!" casi gritó el brujo.

El sombrero miró tristemente al suelo, cuando sintió una gota húmeda caer por su tela (si es que eso es posible). Severus rapidamente se arrepintió de lo que le había hecho a la persona- digo, objeto/sombrero que más amaba en el mundo y fue corriendo hacia el. El agarró firmemente al sombrero entre sus brazos cuando de la nada Dumbledore entró. Su cara aparentaba estar sorprendido y desepcionado, pero de la nada se convirtió en una sonrisa pícara.

"¿Puedo unirme?" dijo el viejo en la bata.

Al sombrero no parecía molestarle, "mientras más mejor" es lo que se dice por el barrio. ¿Pero a Severus? Esto enloquecia al pobre profesor. El hecho de que tuviera que compartir a su amado sombrero con otra persona no le gustaba en lo absoluto. El era suyo, el tenía que comprenderlo. El iba a enseñarle que sus ojos solo podían estar posados en el.

Pasaron unas semanas de este extraño poliamor. Donde mientras nadie los veía, hacían lo que podían. Pero Severus tenía un plan, que conllevaba muerte. La muerte de una persona la cual merecía morir, la persona que robó la atención que su amado le daba a el, la persona la cual confiaba en Snape, la persona en la cual Snape no confiaba en lo absoluto después de ese día. Si, damas y señores, Severus Snape iba a matar a Doby. AHRE.
Toma 2.
Sí, el iba a matar a Dumbledore.

Lo pensó por mucho tiempo, si valía la pena o no. Al final, se decidió que no. AHRE.
Toma 3.
El decidió que la mejor idea sería envenenar a la cabeza de Hogwarts y así fue.

Era hora de la cena, raramente, Severus había pedido voluntariamente servir el vino a todos. El le dió una copa especial a Dumbledore, lo cual el explicó que era porque el lo inspiraba mucho blah blah.

Al final de la cena, Dumbledore finalmente decidió tomar su copa de vino. Entera. Se paralizó por unos segundos y, de la nada,calló al piso. Todos corrieron a ver que pasaba, nadie entendía. Claro, nadie a exepción de Snape el cual fingía de una manera brillante preocupación.

Esa misma noche, Severus salió de su cuarto en busca de su amado. Cuando lo encontró, lo primero que hizó el sombrero fue preguntar "Fuiste tú, ¿verdad?"

"Tan feliz estás de verme, cariño" dijo el pelinegro sarcasticamente "No, no fui yo"

El sombrero lo miró inseguro. Severus se acercó para besarlo, pero el sombrero retrocedió.

"Lo siento Severus, yo- No puedo"

Con esas palabras, Severus corrió hacia un balcón y, con lágrimas en sus ojos, dijo:

"Goodbye my love"