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Doy los últimos toques a mi maquillaje y me aseguro de que la ropa sea la adecuada y en verdad combine antes de salir: un crop top azul con muy poco escote, un pantalón con rasgado acompañando de un cinturón negro; mi el reloj en la muñeca marca las ocho en punto y de inmediato escucho el claxon de un auto afuera de mi casa. Recogo las llaves y bajo con cuidado las escaleras, los tacones pueden ser muy peligrosos si tienes que usarlos en pisos de cerámica, específicamente si son escaleras.

Al salir de casa me encuentro con Taeil sonriendo desde la ventana del conductor y a Hyerin con mala cara en los asientos traseros.

- ¡Minah! - exclama con asombro el castaño mientras agita su mano a manera de saludo.

- Taeil. - sonrio mientras me acerco con pasos lentos al auto y doy una mirada burlona a Hyerin. Por lo visto a alguien no la dejaron llevarse el auto sola.

El mayor de los Moon me indica que tome asiento junto a su hermana, en cuanto entro al auto se dibuja una sonrisa juguetona en los labios de la también castaña.

- ¿Tienes novio Minah? - pregunta Taeil sin discreción mientras mira por el retrovisor y sonríe de manera coqueta.

Siento mis mejillas sonrojarse cuando choco con su mirada por el espejo. ¿En verdad me está preguntando eso? Es obvio que si pero me refiero al echo de que el hermano de mi amiga que es también un chico extremadamente guapo me pregunte eso sin preocupación alguna.

- ¡Ya! - exclama la chica a mi lado mientras fulmina a su hermano con la mirada. - Con mis amigas no Moon Taeil - mueve el dedo por su cuello en forma de la típica señal amenazante. - ¿Entendido?

El resto del recorrido en el auto fueron un par de miradas cruzadas con Taeil, Hyerin que no dejaba de hablar sobre todas las personas de las cuales ella sabía que estaban invitadas a la enorme fiesta del americano y su amigo el canadiense.

- ¿No es sorprendente que nos hayan invitado a nosotras? - pregunta con emoción llevándose a las manos al pecho y suspirando.

La verdad si pero a la vez no, digo, su hermano es un amigo muy cercano a esos dos por lo cual puede ser una razón muuuuy obvia como para que invitaran a la hermanita menor de uno de sus mejores amigos.

- ¿Viste como te miro Johnny ese día? - cuestiona con emoción tomándome del brazo y sacudiendo de el. - Creo que le agradaste.

La miro con una mueca de '' en serio supones eso? '' mientras intento que me suelte, pero ella parece estar en su burbuja de ilusión y fantasía por que sus ojitos marrones brillan de manera tierna. Yo se que en el fondo tiene una bonita niña tierna e inocente, muy en el fondo en el mejor caso.

El auto comienza a sacudirse de manera constante, ambas nos alarmamos y levantamos la cabeza para ver en que lugar estamos. El camino de adoquines que llevan hasta una gran casa de color crema cuyas ventanas destellan con luces de distintos colores y la música a un volumen aún bajo si tomamos en cuenta el tipo de fiesta que va a ser. Por lo visto somos de los primeros en llegar ya que una puerta que lleva al garaje se abre dejando a la vista cinco coches más.

- Esto es increíble. - los ojos de Hyerin no saben a que lugar minar de las maravillosas cosas que podías encontrar sólo en esa parte.

- Y eso que no haz visto el resto de la casa. - se burla Taeil.

Me parece que la castaña no puede contener su emoción por ver el resto de la casa y la verdad yo tampoco, el garaje es del tamaño del salón principal de mi casa.
Como dos pollitos comenzamos a seguir a Taeil mientras intentamos observar a detalle el lugar, cosa que es imposible porque es demasiado grande.

[ Ooh la la ] | Yuta |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora