Soy T/n Brown, tengo 19 años y soy de T/p. Hace 5 años me mudé con mis padres y mis hermanas a Corea del sur a buscar una nueva vida. Todo era tranquilo y bonito, eramos una familia muy unida y no teníamos problemas con nadie, teníamos una vida normal.
Mi padre le debía dinero a un mafioso, "Kai", el más grande mafioso de toda Corea. Mi padre tenía un negocio, con ese era el que nos mantenía, pero pasamos por un situación muy difícil, por eso es que mi padre le pidió prestado dinero a Kai, con la condición de que él le devolvería el último centavo cuando ganara algo del negocio, pero no fue así, la situación se complicó y el mafioso ya empezaba a cobrar su deuda. Mi padre no tenía dinero para pagarle así que le pidió un plazo para poder pagarle lo que le debía.
...Entra dos hombres vestidos de negro y armados al negocio
—Buenos días señor Brown -dijo uno de los hombres-
—Vienen a cobrar el dinero -respondió mi padre nervioso-
—Sí, así es señor Brown, recuerde que ya se le venció el plazo y mi jefe espera que usted le pague lo que le debe.- ¿Tiene el dinero señor Brown?
—Perdónenme señores pero no tengo el dinero todavía, porque no le piden a su jefe que me de otro plazo.
—Eso no le va agradar a mi jefe, señor Brown mi jefe ya no le va dar más tiempo, así que, nos tiene que dar ese dinero o sufrirá las consecuencias -amenazo el hombre-
—Por favor se los suplico, yo les prometo que yo le pago cuando tenga el dinero, solo den me más tiempo.
—Lo siento señor Brown, pero tenemos órdenes y me veré obligado a cumplirlas.
—Por favor se los ruego, no me hagan daño. Yo les prometo que le pagare a su jefe, solo que necesito más tiempo para conseguir el dinero.
—Mi jefe le ha dado demasiado tiempo señor Brown y quiere que hoy mismo le devuelvan su dinero.
—Pero, es que hoy no se puede, no tengo el dinero aún.
—Que lastima señor Brown, ya sabe lo que le pasa a las personas que no le cumplen a mi jefe como usted.
—No por favor -Dice mi padre asustado.
—Déjeme demostrarle -El hombre saca un arma de su bolsillo y apunta hacia mi padre.
Yo estaba en la oficina de mi padre escuchando la conversación, al oír eso me alarme, no podía permitir que mataran a mi padre así que salí de la oficina y grite:
—¡Alto! Por favor no lo maten, les prometo que mi papa les devolverá el último centavo, solo den le tiempo.
—Lo siento señorita, pero tenemos órdenes y tenemos que cumplirlas.
—Mire yo sé que tienen que cumplirlas, pero... ¿podemos hacer un trato? -les prometo que mañana a primera hora les devolveremos a su jefe el último centavo a cambio de que no maten a mi papa, ¿qué les parece el trato? -Los dos hombres se quedan mirando por unos segundos.
—Está bien, aceptamos el trato, pero mañana mismo devuelven ese dinero.
—De verdad ¡gracias!, le prometo que mañana se los devolveremos.
—Más le vale o me veré obligado a quitarle la vida a su padre.
—No se preocupe, cumpliré con mi palabra.
Los dos hombre salen de la tienda, mi padre y yo soltamos un suspiro de alivio.
—T/n como se te ocurre decir que mañana le devolveremos el dinero si aún no lo tengo, ¿acaso éstas loca? -pregunta mi padre enojado- ¿De donde sacaremos el dinero?
—Ay papa ya relájate si -respondo con cierta ironía- ¿recuerdas que tengo los ahorros de la universidad?
—Si ¿que hay con ellos?-pregunto mi padre con cierta extrañeza-
—Quiero que tomes ese dinero y con eso le pagas la deuda a ese mafioso
—¡¿QUE?! ¿perdiste la cabeza? , como se te ocurre decirme ese ahorro es para tu universidad, no quiero que te quedes sin ser una profesional por culpa de mi deuda, eso jamas lo permitiría.
—Pero papa...
—No puedo aceptarlo T/n
— Entonces quieres que esos hombres te maten y dejes a tu familia sola
—No, claro que no T/n, jamas los dejaría a ustedes
—Entonces, ¿Porque no aceptas ese dinero y te deshace de esa deuda de una buena vez?
—Sabes que quiero lo mejor para ti y tu mereces estudiar, tener una buena carrera y una mejor vida.
—Si yo sé, pero eso a mi no me importa en este momento, lo que me interesa ahora es salvar tu vida, además ya después veremos como podré entrar la universidad
—Pero...
—Por favor papá no quiero que te maten y me dejes sola por favor - le suplique-
—Bueno, esta bien, pero no le digas nada de esto a tu madre y a tus hermanas, no quiero involucrarlas en esto- pidió mi padre-
—Esta bien papá, de mi boca no va a salir ni una palabra
Mi padre asintió y me abrazó
—Te quiero mucho hija - comentó dándome un beso en la mejilla-
—Yo también papá
***
Hola que tal a todos, bienvenido a este libro, la verdad estoy muy feliz de unirme a esto de la escritura, espero que les guste mucho, nos vemos hasta la próxima
Bye😘
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Agente Park Jimin
RomancePark Jimin es el típico hombre mujeriego y alcohólico, un agente secreto con una vida depresiva, pero todo esto cambiara cuando Jimin conozca T/n, una joven que acaba de perder a su padre y está secuestrada por los asesinos. Jimin tendrá la misión d...