Llegó el momento de corregir al destino. Monto en el ascensor del tiempo y encuentro tres tikets, los justos para llevar a cabo mi plan. En el primer viaje destruyo la daga que posteriormente mataría a mi marido, en el segundo viaje robo un huevo de dinosaurio para demostrar mi hazaña y en el tercero vuelvo a casa, pero me doy cuenta que no he conseguido mi objetivo, y ahora vago por el mundo como un fantasma.

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Malas decisiones
AcakA veces pensamos que podemos arreglar los males que hemos sufrido pero hay soluciones que no son las correctas