Yuujirou abrió los ojos, era una mañana nublada pero era el mejor despertar que podía tener, ya que tenía a su amado Tooru a su lado con sus brazos rodeando su cintura, la cama estaba calentita y fuera de ella hacía frío, por eso y por no despertar al hermoso ángel de cabellos azules que dormía pacíficamente a su lado no quiso vestirse ni abandonar la calidez de su cuerpo.
Corrió algunos mechones del rostro del muchacho de finas y suaves hebras azules y ojos del mismo color… era tan tierno, Yuujirou no se había percatado de esta destacable ternura que poseía su amigo,… pero… así dormido de esta manera, era evidente, cualquier persona se lo habría confundido con un ángel caído del cielo por accidente…
Acarició el contorno de su rostro con su mano, luego de unos minutos despertó
-Mmn, buen día Yuujirou – dijo abriendo ese hermoso par de ojos azules Tooru
-Buen día Tooru –
-Hoy tenemos que planear todo para mañana en la noche, recuerdas ¿no?
-Cierto, mañana es la ceremonia de premiación –
-Ya quiero ver que habrá hecho Natashou sempai para la ocasión! –
-Nunca entiendo porque te pones tan contento cuando hay una ocasión especial y hay que ver los vestidos que nos forzarán a usar – preguntó con notoria curiosidad Tooru
-Porque es trabajo y es mejor tomárselo de buena gana porque si no se convierte en una tortura – dijo evitando la mirada del peliazul
-No te creo,… cuando mientes nunca me miras a los ojos y justo ahora estás evadiéndome
-No tengo nada que ocultar –
-Entonces dilo de nuevo mirándome a los ojos – lo retó Tooru
-Trabajo es trabajo – dijo Yuujirou observando los bellos y brillantes ojos del peliazul
-Sigo sin creerte, te conozco Yuujirou –
-Está bien, tú ganas, esto… entre… nosotros ¿sí?… -dijo Yuujirou sonrojado - es que siempre que hay una ocasión especial usamos vestidos especiales ¿no? –
-Si… -
-Y cuando usamos vestidos especi… -
-Tacones –
-Si ya lo sabes ¿para qué me lo haces decir? –
-Porque no estaba cien por ciento seguro, pero era lo más probable… eres tan tierno Yuuko-chan – dijo Tooru acercando sus labios a los del pelinaranja
-CHICOS! Es tardísimo, que están esperando para ir a probarse los vestidos, luego tienen que asistir a la reunión del Consejo Estudiantil y TIENEN que llegar puntuales! – decía Akira muy alterado quien no toco antes de entrar y como si fuera poco abrió la puerta de par en par
-Tres cosas: En primer lugar, buen día Akira, segundo, acabas de interrumpir nuestro primer hermoso y tierno beso del día de hoy, tercero, recuérdame la parte en que pediste permiso para entrar y cuarto, no nos dijiste nada de una reunión –