La Hermana de Jeff Y Liu |Ben Drowned| |Editando|

Capitulo 1.

El cinturón donde guardaba mis armas blancas estaba dejándome sin aire y mis pies dolían como un infierno, mire a mi costado y observe con determinación a mi hermano mayor. Su caminata con mala postura y su aura llena de mal humor y caras largas era lo que más lo identificaba, tenia sangre seca en las mangas de su camisa y su mano izquierda siempre estaba posada en su cinturón donde al igual que yo tenia varios cuchillos listos para ser usados. 

A mi otro lado se encontraba el culpable de que nos encontráramos los tres andando por un bosque a las cuatro y media de la mañana, el que nos había impulsado a mi y a Liu a todo este rollo. Jeffrey estaba unos pasos más adelantado que nosotros, nos guiaba por el bosque que según el, se conocía como la palma de su mano. Puras mentiras 

La caminata de los tres paro justo en el momento que sentimos una vibra muy extraña, el viento se empezó a volver un poco violento y de el árbol que teníamos enfrente se podían escuchar algunos ruidos extraños. Saque mis cuchillos en cuanto me di cuenta que mis hermanos lo hicieron y los tres nos pusimos espalda con espalda para que no nos pillaran desprevenidos por ninguna parte  

―Saben la señal, no la caguen ―Jeff susurro a lo que Liu y yo solo asentimos sabiendo que igual no nos vería ―Emma, si no puedes con lo que venga hazlo saber y te ayudaremos, no sea una puta terca―Asentí recordando el escenario de hace unas semanas en donde casi me logra agarrar la policías por pensar que podía luchar contra 5 de ellos yo sola  

Una extraña sensación empezó a aparecer por todo nuestro cuerpo, cada segundo se iba haciendo cada vez más grande. No estaba segura de si los chicos podían sentirla, pero no hizo falta preguntar porque pude confirmarlo cuando vi caer a Liu vomitando a nuestro lado. También estaba bastante mareada y unos puntos negros empezaron a aparecer a medida que intentaba luchar por mantenerme de pie, quise voltear a mi derecha para advertirle a Jeff. Pero mi cabeza golpeo la tierra fuertemente antes de pudiera hacer algún movimiento 

No sentía mi cuerpo, era como si estuviera sometida a una especie de parálisis en donde tu mente esta despierta pero tu cuerpo esta totalmente dormido, podía sin embargo escuchar algunos débiles murmullos pero no podía distinguir si eran los payasos de mis hermanos jugandome una broma en donde me drogaban para probar lo que les vendía su viejo amigo Nick, el contrabandista. Nunca paso, pero estaba dentro de las posibilidades.  

Podía sentir como la puerta de la habitación en donde estaba se abría cada tanto lapso de tiempo, tenia como tres o cuatro horas en el mismo plan. Solo quería despertarme de una vez y poder asesinar a alguien para quitar la tension de mi cuerpo al no saber que demonios estaba pasando 

Con todo el esfuerzo de el mundo logre mover un poco la mano, vaya, por lo menos era la mano. ¡Solo me faltaba todo el maldito cuerpo! 
Con frustración y rabia comencé a tratar de mover las piernas y los brazos al mismo tiempo, necesitaba levantarme de una vez y saber que había pasado en el bosque y porque me había desmayado. 

Cuando pude abrir los ojos los cerré rápidamente intentando acostumbrando a la luz blanca lo más rápido posible, fije mi vista en la habitación. Era parecido al consultorio que había en la escuela cuando te dolía la barriga e ibas con la amargada doctora a que te diera una pastilla que no te aliviaba una mierda, básicamente bastante igual, diría yo. Quite lo más rápido que pude la aguja con suero que estaba en mi brazo y cuando estaba a punto de levantarme me di cuenta de que no llevaba la misma ropa, mi sueter verde claro para cubrir todas las arma que llevaba ni tampoco mi skinny jean negro simple. Toque el frió piso descalza y procurando que la gran bata de hospital azul me cubriera la necesario para no pasar vergüenza, abrí la puerta queriendo salir corriendo a buscar a mis dos hermanos. 

Una vez fuera no supe hacia donde ir, no era un hospital, claro estaba. Incluso tenia un aspecto bastante parecido a un sótano, había manchas de humedad en el piso y hasta pude distinguir algunas de sangre también. Entre a la habitación que estaba en diagonal a la mía, solté un suspiro de alivio al ver a Liu sentado en la camilla mirando confundido todo a su alrededor, probablemente se había despertado recién al igual que yo. 

  ―Tenemos que salir de aquí―Solté apenas pude, el hizo un sonido con su garganta dándome a entender que estaba de acuerdo―Escucha, no se que pasó en ese bosque, pero déjame decirte que no es ni normal y estoy completamente segura de que tampoco es bueno para nosotros

  ―Quien sea que haya sido, sabe de nosotros. ―Miro la maquina de su lado mientras tocaba la aguja que aun estaba en su brazo―No podemos tener testigos que sepan de nuestra existencia en esta basura de ciudad, para ellos estamos pudriéndonos en el infierno ―Soltó una carcajada y me miro divertido―Ingenuos de mierda. 

  ―¿Donde esta Jeff, de todos modos?―Liu fijo su mirada de nuevo en mi 

―Pensé que estaba contigo―Negué extrañada y observe que se bajo rápido de la camilla quitándose la aguja y tirándola por alguna parte de la habitación―Tenemos que encontrarlo e irnos  

Salimos de la habitación y revisamos las habitaciones sobrantes, pero Jeff no se encontraba en ninguna de estas, así que nos toco ser muy cuidadosos y subir sin hacer nada de ruido por las escaleras metálicas rogando que la puerta que estaba al final de estas estuviera abierta

Y lo estaba, para nuestra suerte. 

Una vez que los dos estuvimos fuera, le dimos un vistazo a el lugar. Sin duda era como una tipo de mansión. Extremadamente grande, a nuestra izquierda había un pasillo con lo que parecían ser habitaciones y por el aspecto de cada puerta estaban sin duda ocupadas, a la derecha se encontraban las escaleras que te dirigían hacia planta baja. Quise reírme al ver la señas que me dio Liu para ir por las escaleras, en vez de parecer señas es como si lo hubieran golpeado y estuviera gritando del dolor, por lo menos así me lo imagino yo.

Íbamos con sigilo bajando las escaleras rogando que nadie estuviera en casa pues Liu y yo estábamos desnudos, y no teníamos nada para defendernos 

Hasta que escuche una carcajada que reconocí al instante y mire hacia el frente 

¿Que hacia mi hermano hablando con.. Primero, ¿Que demonios era eso? 

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|EDITADO|

¡Heeey!, volvemos con otra historiaaa ^^

Espero que le haya gustado!