Capitulo 3

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Una vez que todos nos presentamos, Slenderman nos dejo irnos a poner ropa al fin. No negaba que estar desnuda era lo mejor, pero me incomodaba estar desnuda frente a tanta gente, ahora que lo pienso el enano rubio aprovecho que sus ojos son inexistentes porque estoy casi segura de que no dejaba de verme los pechos. Friki pervertido. 

Cuando me pasaron lo que traía puesto antes de llegar a este lugar me metí al baño rápidamente, aunque cuando cerré a puerta y me voltee me di cuenta de que no era un baño. Quisiera decir que es una habitación cualquiera, pero las paredes estaba cubierta por dibujos, habían cantidades de cuadros impresionantes. En el centro de el lugar estaba puesta una mesa con un lienzo y diferentes pinturas a los alrededores, mis ojos brillaron admirando al autor de las pinturas, eran simplemente hermosas 

―Ni lo pienses―Casi pego un grito de la impresión, un chico de cabello oscuro con un saco azul salio de la oscuridad de la habitación. Tenia una mascara pero miraba fijamente mi mano que estaba a punto de tocar la pintura, me fije más y me di cuenta de que traía un cuchillo en la mano―Dime quien eres y que haces aquí antes de que te rebane el cuello―Solté una carcajada y camine con aires egocéntricos hacia la ventana fijándome un poco en el bosque 

―Emma Woods, te doy un consejo amigo―Voltee y lo mire con una sonrisa―Jamás te metas con un Wood 

  ―Jamás te metas con mis pinturas 

―Estamos a mano entonces, ¿Tienes nombre? 

―Bloody Painter, un placer ― Extendió su mano, guardando su cuchillo en un bolsillo de la chaqueta. Acepte, dándole un pequeño apretón y luego de algunas palabras más y preguntarle donde quedaba el baño, salí de su habitación 

Bendito sea el baño y bendito sea mi ropa cómoda, solté un suspiro luego de estar completamente vestida y decidí conocer un poco la casa, más bien colarme por la habitaciones para quitarme lo aburrida que estaba. 

Y definitivamente ninguna era tan especial como la de el niño ciego, supe que era de el porque cuando entre el ambiente friki me entro por la fosas nasales como un rayo, decidí quedarme un rato a probar los videojuegos regados por una pequeña mesa que llamaron mi atención un poco, así que sin importarme mucho si al ciego le molestaba, tire mi trasero en el gran puff verde que combinaba con la habitación y me instale a jugar FIFA 

Media hora más tarde me aburrí y decidí probar otra de las miles consolas que tenia el duende, casi lloro de la nostalgia cuando vi el nintendo 64 a un lado y sin pensarlo dos veces conecte la consola a la plasma que tenia. 

No saque el juego que tenia porque me deba pereza volver a levantar mi trasero, demasiado esfuerzo físico había echo al conectar ese cable fastidioso a la TV , no me pensaba mover de ese sitio hasta la cena. 

Reconocí rápidamente el juego como Majoras Mask y de la nada recordé a Ben y su extraño disfraz que se me hacia familiar. Aparte de friki, ciego y enano, le gustaba vestirse de personajes de videojuegos. Nivel de friki; 100% superado. 

Entre en su partida para ver que tan obsesionado estaba con este juego y solo le faltaba un nivel, me impresionas enanito, aunque siendo sincera esperaba más de ti. Quise jugar tranquilamente pero el juego presentaba alguna fallas y el maldito personaje se suicidaba, suspire con frustración porque no me dejaba pasar el nivel y la música que se reproducía realmente no ayudaba para nada. 

Jadeo cuando la pantalla se puso en negro y en letras rojas apareció la oración "You shouldn't have done that..."

Y quiso asustarse cuando unas manos empezaron a salir lentamente de el televisor, pero rodó los ojos y echo la cabeza hacia atrás con cansancio 

 ―Si crees que me la voy a creer así de fácil pues no, la película de ''el aro'' ya esta pasada de moda. Suerte a la próxima

  ―Acepto duende pero, ¿El aro?. ¿Estas hablando enserio?―Salio completamente de el televisor y pude observar que su aspecto era más tenebroso que el que tenia cuando estábamos en la cocina. De sus cuencas brotaban gotas espesas de sangre la cual cubría también la mayoría de su ropa, parecía que estaba mojado por su cabello y en sus pies y manos llevaba unas cuerdas bastante deterioradas 

―Oh miren, es el niño cosplay ―Le lance una sonrisa burlona y me acomode de nuevo en el asiento   

  ―Lo que sea, ¿Que demonios haces en mi cuarto?, ¿Acaso te enseñaron lo que era el respeto? ―Se cruzo de brazos y levanto un poco la barbilla, ¿Estaba intentando intimidarme?. Una hormiga me puede parecer más intimidante que esa cosa  

  ―Estoy pasando el rato, ¿Acaso no lo ves?― Rodé los ojos y solté una carcajada de lo estúpida que soné― Lo siento, no tienes ojos. Claro que no ves.  

  ―Suficiente, fuera de mi habitación.

―No es la gran cosa, nos vemos niño cosplay― Me levante de el cómodo puff  y camine hasta la puerta, cerrándola de un portazo. Decidí ir a robar comida de la lacena, sentarte a hacer nada podía dar bastante hambre

Mientras pasaba por las escaleras recordé la vieja canción que solía cantar todo el tiempo en el orfanato, Three days grace en ese tiempo era una de mis bandas favoritas, pero cuando huí de ese lugar deje todas mis cosas y una de ellas era mi preciado Ipod donde escuchaba toda mi preciada basura. 

  Break away from everybody break, Away from everything if you can't ..  

  ―Can't stand the way this place is take yourself to higher places ―Di un salto cuando alguien decidió continuar la letra de la canción por mi, mire extrañada a mi derecha y me encontré con el chico de goggles el cual rápidamente identifique como Toby―Vaya, la nueva tiene buen gusto musical. Pensé que seria el único que amaba esa banda en esta casa ―Hice un sonido con mi garganta afirmando y sonriendo mis ojos se quedaron clavados en los 6 waffles que este tenia en su plato con bastante maple. Toby que estaba parado al lado de el refrigerador se dio cuenta y pregunto ―¿Que miras? 

   ―¿Quedan de esos? ―Señale el plato mientras trotaba a el refrigerador y lo abría   

   ―No, no quedan más ―Su voz sonó acelerada, lo mire de reojo mientras sacaba la caja de la nevera, lo fulmine con la mirada cuando me di cuenta de que la caja estaba como nueva. Probablemente la habían comprado hace nada 

―Pero.. ― Quise reclamarle por haberme mentido pero antes de que pudiera decir una palabra más el tomo la caja de mis manos y con la misma la lanzo a la ventana, esta se encontraba cerrada así que cuando la caja se impacto con ella logro romperla, y que la caja cayera por la ventana ― ¡Que demo..   ―

   ―No quedan más dije ―Me miro sonriente mientras se sentaba en la mesa y comenzaba a comer sus waffles, quede perpleja y solté un gruñido por su egoísmo

Al final tuve que prepararme un estúpido emparedado bajo la mirada burlona de Toby y la gran vista de sus apetitosos waffles. Maldito.

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|EDITADO|

-Tocina

La Hermana de Jeff Y Liu |Ben Drowned| |Editando|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora