VI

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Tomó otro sorbo del vaso de cafe que estaba bebiendo. Amaba el sabor amargo del líquido. Eetaba pensando en Mikecrack que le había devuelto la vida y ahora, sin saberlo, se la volvería a quitar.

Por qué sí, era momento de admitirlo, por lo menos ante él mismo, se había enamorado de Mike, y se había casado por el pánico que eso le habia producido.

Era difícil, demasiado difícil, había tenido solo una relación seria -con Ela- y darse cuenta de que en realidad no la amaba, porque se había enamorado de su mejor amigo. Por eso, preso del pánico, había adelantado la fecha de la boda, claro que eso nadie mas que Ela y él lo sabían, ya que no habían dado ninguna fecha cuando el decidió adelantarla.

Voy a dejar de ser un Compa.

Esas palabras resonaban en su mente, había querido tomar al Mike y encerrarlo hasta que le explicara porque mierda se iba a ir y dejaría de ser un Compa. No era tonto, sabía que el menor mintió cuando dijo que se marcharía por su madre. La forma en la que se había expresado se lo había dicho, había estado demasiado serio, y por lo que había notado, la mayoría de veces que Mike decía la verdad era un bola de masa nerviosa. Aparte de que también había observado lo suficiente para saber cuando mentía y cuando no.

Ahora no sabía que hacer, quería que Mike se quedara, pero no encontraba la manera de hacer que se arrepintiera de irse. Aunque si se iba, por lo menos tenia la seguridad de que lo vería algunos días gracias a los benditos videos. Era poco, pero prefería poco a nada.

—Trollino. — Mike toco la puerta de su habitación. —¿Puedo pasar?.

—Adelante. — contestó, camino hasta su cama y se sentó en la orilla.

Mike entro y cerró la puerta detrás de él, se recostó en ella. Trolli notó que Mike estaba viendo al suelo. No sabía como empezar, le había dicho que fuera a su habitación en un impulso, ya que no tenía una razón específica. Ahora tendría que improvisar.

»Bien, Mike. El motivo por el cual te dije que vinieras, es porque quiero que hablemos sobre tu decisión. — llamó la atención de Mike. — ¿Estás seguro que quieres dejar la casa de los compas?. — En el fondo de su alma deseaba que Mike cambiara de opinión.

Mike titubeó antes de responder.

—Si...— su voz había sido segura. — Estoy seguro.

—Sabes que puedes cambiar de opinión, ¿verdad? Mike.

—Es mi decisión...— contestó Mike, él no lo dejo terminar.

—Y por eso mismo tienes la oportunidad de cambiarla. — Mike lo miro a los ojos, sabía que podía cambiar su decisión, sin embargo no lo haría.

Sin embargo no supo que contestar.

—No puedo cambiarla. — fue todo lo que dijo, Trollino lo miro extrañado.

—¿Por qué no puedes?. — Mike desvío la mirada.

—Por qué me enamore. — contestó, Trollini trato de asimilar lo que Mikecrack le había dicho, sabía que al perro le interesaba alguien, él mismo se lo había dicho, sin embargo había tenido la esperanza de que no fuera algo importante. Jamas se imaginó que Mike se había enamorado.

Su pecho se contrajo, en menos de cinco segundos tenía a Mike acorralado contra la puerta.

—¿De quién?. — preguntó, su voz había sonado rota, y Mikecrack se estremeció al notarlo.

—Eso...eso no importa. — contestó Mike. — Lo único que importa es que es un amor no correspondido.

—Esta aquí , ¿verdad? Por eso te iras. — el tibio aliento de Trollino choco en los labios de Mike.

—Así es. Pero ya tiene una pareja. — Mike lucho por no besar los labios de Trolli, lo tenía tan cerca.

Los labios de Trollino rozaron los suyos.

—¿Quién es?. — Trolli insistió, rozando mas sus labios con los de Mike. El último cerro los ojos. Obligando a su mente a funcionar.

—No...le diré. — Trollino perdió la poca cordura que le quedaba y lo besó.

Los suaves labios de Mike chocaron contra los suyos, y se sintió en la gloria cuando Mikecrack abrió la boca, invitándolo a meter la lengua en aquella tibia cavidad. Cuando hizo, gimió de puro gusto. La lengua de Mike era increíblemente suave, y jugando contra la suya se sentía maravillosa.

En ese momento lo entendió todo.

Mikecrack se había enamorado de él, y se sintió estúpido cuando se dio cuenta de que Mike le había estado mostrando señales desde la boda, o incluso desde antes. Él era el motivo por el cual se iría.

Se separo lentamente, y Mike apreso su labio inferior entre sus dientes. Él gimió.

Pegó su frente a la de Mike la respiración de ambos era agitada, sus ojos estaban fijos en los de él otro.

—¿Soy yo?. — Trollino preguntó. Mikkecrack cerró los ojos, se sentía inseguro y con esperanza. Eran demasiadas emociones juntas.

Tragó saliva antes de asentir.

—Sí, eres tú, siempre has sido tú...— Trollino también cerro los ojos, también sentía demasiadas emociones adjuntadas. — Y...entiendo si nos sientes los mismo que yo, solo dímelo...y yo que marcharé. Solo dilo.

—Eres un idiota. — Trollino dijo, y Mike sonrió cuando Trollino lo volvió a besar.

Suavemente Trolli fue dejando un camino de besos sobre su mandíbula, hasta llegar a su cuello. Mike gimió largamente cuando Trollino dejo una mordida en su cuello.

Las manos de Trolli se metieron bajo su playera, y acariciaron levemente sus pezones. Mientras Mike se quitaba la playera, y en medio de besos torpes, ambos caminaron hacía la cama. Trollino recostó suavemente a Mikecrack -quien ya se había quitado la playera- y luego se coloco sobre él. Mike lo atrajo hacía su boca.

—Hazme el amor...— Mike susurro cuando Trollino se separo de su boca. — No importa si no me amas de verdad, hazme el amor como sí lo hicieras...Por favor. — Mike suplicó. Trollino entre cerro los ojos.

—Te lo haré...— los ojos de Trolli miraron a los de Mikecrack. — Pero no te lo haré como si te amara, te lo haré porque te amo, Mike.

Trollino volvió a besar a Mike, se deshizo de la ropa de ambos. Quedando solo Mike en bóxers.

Mikecrack cerro los ojos cuando Trollino iba a deshacerse de sus bóxers, le daba pena. Había tenido relaciones sexuales con otras chicas, pero jamas había tenido nada con un chico/hombre. Él único hombre que existía en su corazón era Trollino, por eso mismo era que no de había atrevido a tener nada con otro hombre.

Sus manos fueron directo a su rostro cuando Trollino lo desnudo por completo.

»Mírame, por favor mírame Mascotita, no tienes porque avergonzarte de nada. Eres perfecto. —Trollino retiro las manos de Mike de el rostro de él. Los ojos de Mike conectaron con los de Trollino.

Mike sonrió.

—Tú también los eres. — agregó.

—Quiero que me mires, mírame en todo momento, cuando te toque y bese. Quiero que me mires porque tú eres los mas hermoso que me ha pasado y que me pasará en la vida, te amo.

—Yo también te amo.

Trollino saco un bote de lubricante del primer cajón de la mesita de noche, baño sus dedos, y colocó un poco sobre su miembro, deslizando hábilmente sus dedos sobre el. Lo dejo a un lado, separó suavemente las piernas de Mike, y se coloco entre ellas.

Mikecrack acató su orden, y lo miro a los ojos, Trollino busco la entrada de Mike mirándolo fijamente a los ojos. Cuando la encontró, introdujo un dedo suavemente dentro de él, Mike hizo una mueca, sentía una incomodidad y leve dolor. Trollino comenzó a mover suavemente el dedo dentro de él. Estaba demasiado apretado, sabía que le iba a costar bastante que sus músculos se relajaran. Cuando creyó que era suficiente, introdujo un segundo, Trolli vio como su mascotita hacia una mueca de dolor. Dejo que Mike se volviera a relajar antes de moverlos, cuando se relajo, él los movió despacio, aprovechó para besar el hueso de la cadera derecha de Mike. Subió lentamente hasta su ombligo, metió la lengua en el, cuando sus dedos se movieron en forma de tijeras.

—Mhmn...— Mike gimió, y Trollino sonrió al ver que la expresión de dolor en el rostro del menor iba disminuyendo, pasando a una de placer. Lamió el contorno del ombligo, y introdujo el tercero, Mike poco a poco estaba dejando de ser apretado, pero, Trollino aun dudaba de que él, fuera a caber ahí.

Movió más sus dedos, y sonrió satisfecho cuando encontró ese punto que lo iba a hacer gritar hasta quedarse sin voz. Lo tocó, y Mike se arqueó contra él.

»Trolli...por favor, te necesito. — Mike suplicó, él no se iba a hacer del rogar. Así que saco sus dedos, y Mike se quejó. Paso su hábil lengua por todo el abdomen de Mike, lamió un poco cada pezón, y paso su lengua por todo el cuello del menor.

Cuando sus bocas chocaron, sintió sensaciones que jamás había sentido con nadie, de eso estaba seguro.

Se separó y miro a Mike a los ojos.

—Relájate...— susurro sobre los labios de Mikecrack. Él asintió, él alineó su miembro en la entrada de Mike.

Se deslizó suavemente dentro de Mikecrack y besó la frente del ultimo cuando apretó los labios por el dolor. Una lágrima rodó por la mejilla de Mike, no dudo en limpiarla con un beso. Las piernas de Mike se enredaron en su cadera, se sintió completo cuando estuvo dentro de su mascotita totalmente. Eran como completar una parte de él, casi igual que un puzzle, con la única diferencia es que él jamas podría ser feliz completamente se Mikecrack le faltaba.

Lo sabía, estaba jodidamente enamorado de el y tenía miedo. Miedo de que en cualquier momento Mike se enamorara de otra persona y lo dejara llevándose una parte de su alma. Porque Trollino sabía bien que si Mike se llegaba a ir, era su alma la que se iba a llevar con él.

Sin embargo, decidió que, por primera vez en su vida iba a arriesgarse sin tener un plan de escape. Porque para el amor no lo había. Y estaba seguro que lo que había entre Mike y él, era amor el que había. Amor del mas puro y hermoso. Era amor del que se enterraba en lo mas profundo de el alma y la piel. Del que se cultivaba con detalles y florecía con caricias.

Tomó a Mike de las caderas cuando sintió que ya era momento para moverse. Mike enterró en rostro entre su cuello, y gimió suavemente sobre su cuello, sabía que no podía ser demasiado escandaloso. No sabía en que momento a alguien le daba por andar caminando por los pasillos. Era bastante improbable a decir verdad. Pero de el grupo se podía esperar de todo. Sobretodo cuando -según Trollino-, Timba pretendía a Mike.

Dio un par de estocadas, aumentando la velocidad. Mientras movía una de sus manos de las caderas de Mike, a los pezones del menor. Había notado que era bastante sensible, y le encantaba escuchar como gemía sobre su cuello.

—Trolli...— sus embestidas aumentaron, y sintió como el cuerpo de Mikecrack se tensaba por el próximo orgasmo. Él también estaba cerca. — Me voy a correr.

—Un poco mas, Mascotita. Solo un poco mas. Yo también estoy cerca. — Mike asintió sobre su cuello.

Sonrió satisfecho cuando toco varias veces el punto dulce Mike, provocando que el menor gimiera una y otra vez.

Dio la ultima embestida, y se corrió dentro de Mike, mientras que él manchaba los abdómenes de ambos.

—Te amo. — Mike dijo mientras temblaba por los espasmos y la bruma de el orgasmo.

—Yo también te amo. — dijo sintiéndose mas que completo.

Se sentía realizado.

Besó a Mikecrack antes de limpiarlo con una sábana, y luego se acostó a la par de él.

En serio esperaba hacer las cosas bien,.

 En serio esperaba hacer las cosas bien,

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|Esto no puede ser posible| MikellinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora