Hace una hora y media me despedí de mi madre en el aeropuerto, en este momento voy con Nathan, Arianna y mi padre en el carro de éste último. Dentro de 1 hora llegaremos. Qué estrés, es demasiado tiempo. Debería dormir para que el tiempo pase más rápido.
-Elizabeth ya llegamos -dijo Arianna mientras soltaba un bostezo y estiraba su cuerpo, creo que no fui la única que decidió dormir. Y a mí no me costó nada quedarme dormida, eso fue rápido-.
Bajamos del auto, tomamos nuestras maletas y nos dirigimos hacia la reja de la casa, como de costumbre, estaba abierta. Pasamos por ese caminito rodeado de pasto, ya que de eso están compuestos los laterales de la casa y llegamos finalmente a colocar nuestros pies sobre el concreto de la casa. Estaba tal cual como la recordaba, hace meses que no venía. "¡Sr. Carlos!" Dijo uno de los trabajadores de la finca mientras que agitaba su mano, símbolo de que estaba saludando a mi padre. 3 más hicieron lo mismo.
Mi primo conoce perfectamente esta casa, ya que vive cerca de aquí así que se llevó a Arianna para mostrarle el lugar. No pierdes una oportunidad ¿cierto Nathan?
Tomé las maletas y dejé la de mi primo en la habitación de los hombres y la mía y la de Arianna en mi cuarto alias el de las mujeres.
-estornudé- Bendito polvo.
Cuando estaba terminando de desempacar mi maleta entró mi mejor amiga a la habitación, ruborizada como un tomate y riendo como una tonta.
-¿Qué se traen ustedes dos? -le pregunté mientras que sonreía y alzaba una ceja- No paras de reir como una estúpida y parece que tus mejillas van a explotar.
Con qué moral dices eso, seguro te veías igual en presencia de Christofher.
-Es tan... -comenzó diciendo ella, luego soltó un suspiro mientras que miraba hacia el techo y movía las pestañas rápidamente- Me mostró toda la casa ¡MIENTRAS QUE TENÍAMOS LAS MANOS ENLAZADAS! -dijo casi gritando y colocando la voz más chillona de lo normal- De lo nerviosa que estaba, no noté una piedra y al tropezar con ésta caí al suelo y como íbamos de la mano cayó conmigo. Nos acostamos en la grama y me miró directamente a los ojos -dijo ésto mientras que lo simulaba, mirandome a mí- Tocó mi mejilla con su mano -colocó su mano en el aire, aparentando tocar una mejilla imaginaria- Y dijo "que hermosa eres" ¡¡te juro que me derretía!! -yo rodé los ojos- y luego BAM -dió un saltito- me besó y oh.. ¡¡Dios bendiga esos labios!! Eli, ¡ÉSTAS VAN A SER LAS MEJORES VACACIONES DE MI VIDA! -dijo para finalizar su relato y acto seguido tumbarse en la cama boca arriba y soltar un suspiro, no pude evitar reírme, ella siempre fue así de "novelista".
-Que bueno Ari, pero no opino lo mismo para mí... -dije e hice una mueca. Ella se levantó de la cama dando un salto-.
-¡Eso es cierto! Que digo, hay que conseguirte un novio. De lo contrario terminarás loca y viviendo con 9 gatos. Hay que ir al pueblo, y conozco un chico que me lo quiere mostrar. Su nombre comienza por Na y termina por than.
Sonrió mostrando todos sus blancos dientes, me contagió porque terminé haciendo lo mismo.
-Está bien, pero iremos mañana. Ya son las 7 y no creo que mi padre salga a llevarnos al pueblo. Vamos a terminar de desempacar y veamos unas películas ¿te parece bien?
-Está bien -dijo para luego girarse, tomar su maleta y colocarla sobre la cama.
La noche transcurrió rápidamente, entre cocinar panquecas con mi padre, Nathan y Arianna y luego ver una película (Arianna escogió En Llamas. Vez 156538 que la veíamos) ya eran las 11, y estábamos todos cansados del viaje. No pude evitar reírme cuando Nathan hizo el típico movimiento de "bostezar para pasar el brazo por detrás del cuerpo de la chica y luego abrazarla".