R

386 53 9
                                    

...

–toma—le dije entregando aquel sobre.

–gracias Andy, te daré la respuesta antes de acabar el día—me dijo Pinky sonriente.

–vale...

–¿Estás bien?

–¿Yo? Por supuesto... Debo de irme, te veré al rato.—le dije dándome la vuelta mientras agitaba mi mano.

–¿y el próximo taller?—exclamó preocupada—.¿No entrarás?

–hoy no entraré Pink... Pero estaré por aquí si necesitas algo.

Y salí del salón. Yo mismo no sabía a como responder su pregunta.

No sé si me siento bien, últimamente me eh sentido sin motivo y muy aburrido...» pensé.

Cada que estaba con Pinky, solo hablaba de: Rogelio esto, Rogelio aquello, Rogelio, Rogelio. Creo que  lo apodaba "Rolo"
Ni siquiera tenía sentido.

Al final decidí ignóralo, en ese momento tenía otras cosas en mente. Mike.

Cuando fue a dejar a Trollino al aeropuerto, no nos habló durante el fin de semana. Raptor y yo acordamos en estar con él todo el día y así había sido.

Raptor lo había ido a recoger y yo los alcanzaría a ver en la cafetería. Por eso me apure en lo de Pinky e ir con mi amigo.

Cabe aclarar que Raptor fue quien me convenció. A estas alturas ¿me hubieran podido juzgar por creer que a Raptor le gustaba Mike?

Recuerdo que al llegar a la cafetería, ví que Mike estaba hablando con Raptor con un rostro desanimado. Sus ojos se veían cansados y estaba bostezando mucho. Su nariz estaba algo roja y en la mesa tenían un montón de pañuelos y una bolsa llena de estos usados.

Respiré hondo y me acerque a ellos con una leve sonrisa.

–hola Mike, ¿Cómo te sientes?

–no pude dormir ayer—su voz se oía algo ronca—. Así que salí a caminar pero a mi mente se le ocurrió la maravillosa idea de salir con solo una sudadera—tosió y uso un pañuelo para su nariz—. Así que creo que pesqué un resfriado.

–lo llevaré al médico después de la escuela—me dijo Raptor.

–cielos Mike, si así te pusiste en solo dos días, no sé qué te pasará en una semana.

–estaré bien, si lo que te preocupa es lo que pasó con Trollino ni te angusties. Estoy perfecto con todo esto—y nos sonrió.

Me sentí mal por él en ese momento. Mi amigo la estaba pasando mal y yo lo había notado cuando él ya estaba haciendo una locura.

–de todas maneras lo mío no importa, ¿Qué hay de ti? ¿Cómo has manejado lo de Pinky?

–pues es incómodo estar buscando a "Rolo" pero supongo que me estoy acostumbrado.

–¿Mañana se lo dirás?—me preguntó Raptor.

–sip, todo está planeado, ni siquiera me puedo creer que me iré... Pero se que tendré más oportunidades de cumplir nuestro sueño allá.

–mientras no te encuentres con el arrogante de mi abuelo, todo estará bien—dijo Mike, por su voz, deduje que ya estaba constipado.

—reí—. Todo lo que hago por ustedes.

–por los tres, joven Sparta—bien romántico el Raptor.

–eres bien tierno.

–¿Tierno yo? ¿Te haz mirado frente a un espejo?

El mensajero [Sparta 356]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora