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Capítulo 2

Mi otra mejor amiga, Ryu Yun Ki, se acercó y me miró. Llevaba zapatos de fútbol y una camiseta como yo, pero aún estaba limpia. No había sudor ni suciedad, no era una sorpresa, solo jugaba al fútbol Universitario juvenil para pasar el rato con nosotras, en cambio, yo jugaba por diversión mientras que SooRa jugaba, bueno... nunca estuve muy segura con SooRa .

—Casi la tenías —dijo Yun Ki, suspiré.

—Ya lo sé, siempre es un casi lo logras cuando se trata de SooRa jugando fútbol- Yun Ki me tendió la mano y me levantó.

—Quiero decir, la tenías, y luego la dejaste volver y tenerla. ¿Qué fue eso?- Como si yo fuera a decirle que había dejado un chico me distraiga. ¡Ja! Eso era un movimiento de SooRa, no algo que yo haría, en realidad, era totalmente vergonzoso. Así que me encogí de hombros. —Me sentí mal por ella. No quise demostrarlo con MinHo mirando- Yun Ki resopló.

—Sí, claro. Tú no tienes piedad en el campo de fútbol.

—Lo dices como si fuera algo malo. —Mi muslo estaba quemándome, así que me subí los pantalones cortos e inspeccione el golpe que comenzaba en la cadera y seguía hasta la mitad de mi muslo. Ya era de color rojo brillante. Sonreí, amando la medalla de honor que me daba. A pesar de lo que Lee Minho podía pensar, había mucho más de mí que tan sólo cómo me veía. ¡Yo era una guerrera!— Ahí va mi plan de usar una minifalda mañana—bromeé. Minho y Jisung gritaban y silbaban, así que baje mis pantalones para cubrir mis piernas, mis mejillas estaban repentinamente calientes. ¡Los chicos eran tan molestos!. Yun Ki levantó las cejas. Habían sido cuidadosamente depiladas para aumentar sus brillantes ojos cafés, debido un cambio de imagen el fin de semana pasado cortesía de SooRa, que había acabado con todo nuestra imagen de deportistas, con reflejos y nuevos cortes de cabello. No podrías decir eso sobre mí, salvo por el hecho de que algunas de las capas no se quedaban en mi cola de caballo muy bien. Bueno, se podía ver los reflejos castaños sobre el marrón más oscuro de mi color de pelo natural, pero eso era todo.

—Nunca has tenido una falda en toda tu vida —dijo Yun Ki- De ningún tipo- Me sonrió. Yo definitivamente no era una chica de falda. Especialmente este año, ya que gente como MinHo habían comenzado a molestarme. No hay nada como conseguir una figura en el verano para cambiar la forma en que los chicos actúan a tu alrededor, supongo. De seres humanos normales a plagas fuertes y molestas en general.

—Buen golpe—SooRa caminó enfadada hacia nosotras, disparando una sonrisa coqueta en dirección de las líneas laterales— Es totalmente anticuado tomar ventaja cuando MinHo me distrajo. Si no te hubiera golpeado al final, te haría besarme los pies. —Una referencia a cuando éramos pequeñas y estúpidas, y acostumbrabamos a besarnos los pies la una a la otra cuando nos peleábamos, o después de que alguna hiciera algo malo a la otra.

—No habría besado tus pies —le respondí—. Es tu culpa por no prestar atención.- SooRa llevaba una camiseta, pantalones cortos de spandex y llevaba maquillaje a prueba de agua. Era alta, delgada, y tenía cabello rizado... todo lo que Yun Ki no tenía, con su corta y rechoncha figura. Pero Yun Ki era pelinegra y su piel era de un blanco que lucía como porcelana, y yo sabía que SooRa mataría por poseer el derecho de Yun Ki de lucir siempre tan delicada. Ambas estaban totalmente lindas y metidas en los chicos. Quiero decir, a SooRa se le había caído su cuaderno la semana pasada y había visto que había escrito el nombre de Lee Minho por toda la cubierta interior, no era que ella lo admitiría en voz alta. Y Yun Ki estaba allí con ella mirando a los chicos juntas. Ambas pasaban diez minutos haciendo su maquillaje antes de la práctica, con la esperanza de conseguir que estúpidos como MinHo gritaran por ellas, como sea. La entrenadora Kang sopló su silbato.

—Tengo un anuncio que hacer.- Noté a MinHo y a Jisung de pie a lo lejos. El primer nombrado me decía algo sobre mí y apuntaba a sus caderas, donde me había quemado con el pasto. Sentí a SooRa mirándome, así que me crucé de brazos y me volví hacia la entrenadora Kang, lejos de Minho.—Cada temporada a finales de octubre, elijo a dos chicas de fútbol universitario juvenil para trasladarlas al equipo universitario por el resto de la temporada. Durante dos semanas a partir de este viernes, vamos a tener pruebas de aptitud con el equipo universitario. Las mejores cinco muchachas en universitario juvenil serán invitadas a esa práctica, y dos se trasladarán.-¡De ninguna manera! ¡No lo podía creer! Universitarias. ¿Cuán maravilloso sería eso? Mi corazón empezó a correr. Me acerqué un poco más para no perderme ninguno de los detalles.—Entonces, quiero anunciar a las cinco jugadoras preseleccionadas, para que me puedan decir si están interesadas en ser consideradas.- Miré de reojo a SooRa. Ella era mejor que yo, pero no trabajaba tan duro. ¿Tendría eso en cuenta la entrenadora? Cinco puestos no eran muchos, cuando había más de cuarenta chicas en el equipo.

SooRa estaba mirando a MinHo y a Jisung, sin prestar ninguna atención a la entrenadora. Una pequeña parte de mí esperaba que la entrenadora se diera cuenta. Es decir, yo no quería que la entrenadora lo notara, porque SooRa era mi amiga y merecía estar en el equipo universitario, pero ella no quería un lugar en el equipo, no como yo quería. Así que tenía la esperanza de que la entrenadora le llamara la atención.

—Las jugadoras que estoy considerando son Kwan Iseul.

—Ella es el mejor jugador de nuestro equipo —susurró Yun Ki. La hice callar con la mano, conteniendo la respiración.— Song Ji Hee— Oh, no había pensado en ella. Es genial en defensa —dijo Yun Ki.

—¡Ssh!

— Chang Ha Yun- SooRa se inclinó.

— Yun Ki, creo que Jisung te está mirando.- Yun Ki golpeó a SooRa en el brazo.

—¡Imposible! ¿En serio? — ella se sonrojó e inmediatamente le dio la espalda a los chicos

—Yang Mi míralos y dime si ella está mintiendo.

—¡Cállate! —Me alejé de ellas, esforzándome por escuchar mientras las otras chicas en el equipo comenzaron a susurrar.

—Choi SooRa- Mordí mi labio ante el repentino aumento de celos mientras escucho a Yun Ki chillando tras de mí, bien, estaba tan feliz por SooRa.—Y Shin Yang Mi.-¡Sí!, Yun Ki lanzó sus brazos a mí alrededor.

—¡Yang Mi! ¡Impresionante! ¡Ustedes son demasiado geniales!- La entrenadora dijo algo acerca de que la práctica había terminado por hoy, pero no la escuché. Mi corazón estaba latiendo muy fuerte y Yun Ki estaba gritando en mi oído. Nos tenía a ambas, a mí y a SooRa en un abrazo y tomó menos de un minuto para que las tres termináramos en una pila en la hierba.