ocho.

10.5K 965 132
                                    

Globos y más globos eran puestos en la gran mansión del alfa de Seúl.
Los pequeños del hogar estaban de fiesta pues se cumplía un año desde su llegada.

Un lindo castañito se miraba al espejo con nerviosismo, pues quería tratar de verse lo más lindo posible para sus invitados.

-¿será que esto es demasiado?.- se preguntaba a sí mismo.

Llevaba puesto un pantalón de vestir negro, una camisa blanca y encima de esta un saco azul rey con estampados dorados muy monos.

-¿Cariño, estas listo para...?

El pequeño Taehyung miró curioso a su espalda para saber la razón del porque su prometido no había terminado de hablar, encontrándose con la penetrante mirada del azabache escaneando su cuerpo detalladamente.

-¿pasa algo, Jungkookie?.- pregunto el castañito con notable preocupación de no haber escogido un buen atuendo.- ¿me veo mal? puedo cambiarme y...

Los pasos apresurados del azabache resonaron por la madera del suelo, pues había avanzado a pasos rápidos hasta el menor mientras lo tomaba posesivamente de la cintura y hundía su cara en la curvatura del cuello de Taehyung.

-¿cómo puedes decir algo así? Dios, estás precioso.- halago él azabache.

Taehyung sonrió inconsciente y subió sus manitos para abrazar al mayor.

-¿De verdad lo crees? creo que es un poco exagerado.- admitió el castañito en voz baja.

-Eres el lindo omega que trajo al mundo a nuestros dos hermosos cachorros, claro que deberías estar brillando justo como ellos, cariño.- le resto importancia el mayor.

-Yah~ estas avergonzandome.- chillo el menor con el rostro bañado en un intenso rosado.

-Es porque eres un bebé muy tierno.- se excusó el mayor mientras acariciaba delicadamente las mejillas del más bajito.

-¿Dónde están los bebés?.- pregunto Taehyung con los ojitos cerrados mientras disfrutaba de los tiernos toquecitos de su alfa.

-Jimin los estaba cambiando, creo que debió de terminar ya.- respondió Jungkook mientras dejaba un besito en la nariz de su omega.

-Jumm, creo que deberíamos de llevarlos ya abajo.

El azabache asintió dejando otro beso en los abultados y rosados labios del menor para después tomar con delicadeza su manito y llevarlo hasta la habitación de los pequeños.
Taehyung chilló y corrió a darle mimos a sus dos pequeños, pues se miraban tan lindos.

-Te dije que el blanco era un color perfecto para ellos Kookie.- dijo el castañito satisfecho, pues él había pedido que sus lindos bebés vistieran de blanco para su cumpleaños.

-Son tan lindos.- chilló emocionado ahora el omega de cabellos rubios mientras acariciaba su vientre con cariño.

Después de unos pocos minutos mimando a los dos pequeños de la casa, todos bajaron con los cachorros.
Jungkook llevaba en brazos al pequeño omega y Taehyung llevaba en los suyos a la linda alfa.

La pareja sonrió satisfecha cuando miraron su tan precioso patio lleno de globos de todos los colores. Mesitas de snacks, juegos para sus bebés y el pequeño Kai junto a sus amigos del jardín de infantes.

La pareja bajo a los dos pequeños al césped y ambos pequeños chillaron emocionados pues nunca habían visto algo así.
La pequeña alfa gateo rápidamente como cuando huía de su papá Taehyung y hacia travesuras con su tío Jimin.
El pequeño solo miraba todo desde su lugar con ojitos brillosos, pues al parecer tenía un poco de miedo.

Y O S O Y T U...¡E S P O S O! ›KookV‹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora