Tenía una horrible resaca y una completa ignorancia de que hora era, pero aún así Magnus sabía que debía levantarse fuera la hora que fuera porque había quedado de verse con su adorable y encantador novio, Alexander Lightwood.
Si hace tan solo un año alguien le habría dicho al moreno que estaría alguna vez en una seria relación con un universitario 4 años menor que él probablemente se habría reído y simplemente contestado "Estamos hablando de mi?"
Pero aquí estaba, completamente enamorado y feliz de como había ido su vida este año.
Hacía un frío de mil demonios aún cuando tenía calefacción central, pensaba en regularla mientras caminaba a la ducha y como 40 minutos después salió de su alcoba tan solo vistiendo una bata de toalla color dorado cuando el curioso olor a café le hizo arquear una ceja.
-¿Que diablos?
Cuando paso por el living se quedo sorprendido de encontrar a su novio cómodamente en el sofá con una manta en las piernas, perdido en algún libro que tomo de su biblioteca.
Alec levanto la vista y sonrió, dejo el libro para "hablar" mientras Magnus se sentaba a su lado.
Buenos días, no quise despertarte cuando llegue porque supuse que llegaste muy tarde.
-Mi amor ¿desde cuando estas aquí? no me mal interpretes, me encanta que estés aquí solo... estoy algo confundido.
¿No lo recuerdas?
-¿Hice algo vergonzoso? ¿Nos vimos anoche y no lo recuerdo?
El ojizul sonrió divertido y nego con la cabeza.
Nada de eso, anoche me mandaste un audio desde el club nocturno en el que estabas con tus amigos y te oías borracho.
-Ohhh ya, ¿No te dije ninguna barbaridad, o si?
El menor negó nuevamente completamente rojo esta vez
-Algo te dije porque estas rojo -el moreno rió y arrastro a su adorable novio a sus brazos.
Solo... me dijiste muchas veces que me amabas y que te hubiera gustado que fuera contigo y que....
que...
Que te gustaría que nos casáramos.
-Bueno, no fue nada que no pensara -rió nuevamente- aunque creo que lo de casarnos sería muy pronto -Alec asintió escondiendo el rostro en el cuello de Magnus- pero si me encantaría vivir contigo cuando termines la universidad.
¿En serio?
-Por supuesto ¿A ti no te gustaría?, por cierto aún no me explicas como es que estas aquí, aunque estoy encantado por la sorpresa.
Si me gustaría y sobre lo otro, como te oías borracho yo te dije que vendría porque no creía que fueras a levantarte antes del mediodía. Tú dijiste que dejarías una llave al encargado para mi y aquí estoy.
-Ohhhh, en ese caso ¿desayunaste ya?
Si, es la una y media, desayune antes de venir.
-Diablos que es tarde -hizo una mueca y Alec sonrió divertido de la situación
Te prepare café y compre donas
-Que amor eres -lo tomo de rostro y lo beso intenso pero cortamente provocando un suspiro insatisfecho en el menor -Me vestiré y vuelvo, espérame un momento.
El de oscuro cabello asintió y el moreno se fue a su alcoba nuevamente para volver 20 minutos después, vistiendo unos jeans rojos, una camisa blanca y un suéter azul con lineas rojizas y verdosas. Su cabello con mechas rojas y un simple delineado negro en los ojos.
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Hermoso silencio
RomancePorque para enamorarse no son necesarias las palabras... a veces una mirada, un roce o un gesto son mas que suficientes.