Sueños.

La historia y el cambio.

Un día, cuándo Carla estaba charlando con Lorenzo, su hermano, llega su hijo Estefano, con 3 amigos más, pidiendo que si ella y su tío, Lorenzo, podrían contarles la historia a sus amigos, ya que el no se la sabía.
Lorenzo y Carla inmediatamente comprendieron a que historia se refería, Estefano por más de tener 17 años y escuchar a esa historia, que era con la cual nunca se aburría, desde que tenía conciencia, invisible sabiendo cada mínimo detalle, le gustaba y prefería escucharla de su madre y su tío que eligió esq excusa para que el y sus amigos se maravillaran escuchandola.
La historia a la cuál Estefano de refería era una que su abuela les había contado a Lorenzo y Carla, diciéndoles que no se permitieran olvidarla ya que era parte de un hecho que le cambió la vida, ya que ella era parte de esa historia, y se la cambiaría a muchos
Los seis se sentaron al lado de la estufa con mate en mano, los jóvenes en el piso formando un semi círculo mirando a los adultos, y los adultos en sillones. Una vez listos, Carla y Lorenzo comenzaron a relatar, turneandose para decir una parte cada uno, cómo hacían con los hijos de Lorenzo.
-Un día en los 60', cómo cualquier otro, habían 5 jóvenes como ustedes, justos en la plaza de el pueblo en el que vivían. Juntos como todas las mañanas antes de la escuela, con el mate en mano y comentando entre ellos cómo podían arreglar aunque sea, un poco, el mundo que se desmoronaba.
Ellos vestían de una manera en la que en esa época era visto como incorrecto y vulgar. Las dos chicas estaban vestidas con minifaldas y remeras cortas, y los chicos con sus Bermudas, ojos y remeras con mensajes que ellos mismos habían escrito en donde se leían cosas de paz.
Comenzaron a hablar sobre la guerra, sobre las marchas de orgullo a la que ellos asistían cada que tenían oportunidad, sobre como podían enseñarle al mundo cómo se tenía que buscar la paz, usar respeto, tener empatía y poseer un gran amor por el mundo y todo lo que lo habita, ya que también estaban cansados de que el humano siempre quisiera tener más, enbves de ser más.
Querían un mundo mejor, en donde cada uno pudiera vivir libremente, sin prejuicios, sin opresión, sin tener que reprimir sus sueños.
Odiaban todo lo que el humano les brindaba, ya que siendo egoístas no les importaba el daño que hacían.
Odiaban que aún hubiera esclavitud.
Odiaban que las sociedad los excluyera por ser "diferentes".
Odiaban y tenían lo que el humano era capaz de hacer en busca de poder.
Pero ese mismo día, luego de incontables reuniones entre ellos, sus quejas fueron escuchadas.
Fueron escuchadas por la gente del pueblo. Al comienzo sintieron temor de que nuevamente la gente los accediera diciendo, cómo siempre hacían, "sólo son sueños, jóvenes ilusos y irrespetuosos". Se llevaron una gran sorpresa al ver que en los grupos también venían sus padres, y les pedían por favor que continuarán, que sólo querían escucha y se sentaban a medida de que llegaban a su alrededor. Pasados 20 minutos la gente se levantó y en 5 minutos quedaron nuevamente solos, la gente se había marchado en silencio.
Pasados otro 20 minutos, toda la gente del pueblo venían vestidos del modo "incorrecto". Los ancianos encabezaban el grupo con sus equipos de mate en mano y sopaipillas. Luego venían los adultos con sus hijos. Los adultos se mostraban alegres por ver cómo sus hijos venían con las caras pintadas de unos colores muy característicos: Rojo, naranja, amarillo, verde, azul y violeta, comprendiendo que ese era un gran oaso para comenzar a tener libertad.
En ese momento, cuando toda la comunidad del pueblo se sentó a su alrededor con enormes sonrisas, ellos lloraron, lloraron de felicidad, lloraron por ver que el pueblo estaba cambiando, estaban vestidos de modo "incorrecto" y nobles importaba, estaban teniendo respeto, y no habían prejuicios, en ese momento, comprendieron que la fortuna gira del lado de los valientes, que ellos que habían sido un pequeño grupo de sobrevivientes, guerreros y soñadores, comprobaron que los sueños se cumplen, que todos merecen poder soñar y que todos algún día seremos ganadores.