TUS ENGAÑOS ME CAMBIARON

XI

Me levanté temprano, me vestí con ropa formal, antes de salir de la habitación, miré por unos segundos a vanesa y le di un beso corto

Vanesa: otro más

Le dió otro un poco mas largo

Vanesa: otro

Me acerque de nuevo y le di un beso, sus brazos se enrollaron en mi cuello y profundizó más el beso, Vanesa se separó y puso su frente con la mía

Vanesa: te amo, marco

Marco: y yo a ti Vane

Vanesa: entonces, nos vemos más tarde

Salí de la habitación y me dirijo directo a la oficina de mi padre al entrar encuentro una montaña de papeles bien acomodados en el escritorio

Héctor: ese es el trabajo de hoy, es menos que ayer

Marco: si lo se, es mucho menos pero aún así es mucho

Héctor: supongo pero no sé preocupe, la mayoría son papeles sin importancia, he separado los más importantes que son muy pocos

Marco volteo aver la pequeña fila de papeles, eran como 50

Marco: bueno creo que es hora de empezar

Héctor abrió la puerta y salió

Héctor: ha hola princesa Vanesa, viene con marco

Vanesa: si

Héctor: bueno pase, sirve que se acostumbra a dirijir su futuro reino

Vanesa se puso roja como un tomate y se notaba su nerviosismo

Vanesa: no se a que te refieres Héctor

Héctor: jajaj, de acuerdo, suerte

Vanesa entro rápido a la oficina y se encontró con un marco rojo y riendo un poco

Marco: ya se están dando cuenta en el castillo

Vanesa: tal vez pero será por qué no disimulamos nada

Marco: como disimular lo mucho que te amo

Vanesa se puso roja y se sentó alado de marco, recargo su hombro y volteo si mirada a los ojos de marco

Vanesa: te amo marco

Marco: yo igual

Vanesa se paró y se puso enfrente de marco, se agachó hasta que sus rostros estubieran enfrente, acortó la distancia y lo beso, ella subió sus manos en su cuello y el la tomo de la cintura, poco a poco ella subió en el regazo de marco hasta quedar sentada en el, el beso se profundizaba cada vez más y los sonidos de los beso no faltaba y en una habitación tan silenciosa, eso solo provocaba que retumbaran en las paredes, se separaron por la falta del aire, sus corazones latian tan rápido y con tal fuerza que el aire parecía no ser suficiente, el aire en la habitación aumentaba en temperatura, Vanesa se mordio el labio inferior y miro a marco a alos ojos

Vanesa: se que llevamos muy poco tiempo pero quiero ser tu esposa, quiero que sigamos una familia, quiero estar así todos los días con Tigo, por qué te amo

Marco: dices frases muy bonitas, pero yo también tengo ese deseo, y haré lo que sea para cumplirlo

Vanesa y marco: por qué te amo

Terminaron los trabajos rápidos y ambos salieron de la oficina tomados de la mano y muy pegados, ella recargando su cabeza en su hombro y el recargaba la suya en la cabeza de ella