Hola, cómo ya me imagino, ustedes están aquí porque intentan saber una historia de amor o bueno...mejor dicho una historia de rebeldía y de romance juvenil y eso, eso es lo que les voy a ir compartiendo a lo largo de este libro.
Una disculpa, no me presenté con ustedes; me llamo Romina, tengo 17 años y soy una chica como cualquier otra, estatura promedio, calificaciones ni dejando que desear pero tampoco siendo una eminencia. Para empezar con el primer beso primero debemos de ubicarnos en el año 2018, que hermoso año ¿no creen? En este año fue cuando entré a una preparatoria en México, digo que entré porque estaba en otra y, digamos que tenía una fama que no quisiera hacer tan pública porque podría llegar a arruinarles la historia pero bueno, regresando al tema, en mi nueva preparatoria habían chicos guapísimos y una niñas que, nada más de verlas impresionaban, no es por ser modesta pero yo no me considero una chava guapísima ni nada por el estilo, sé que tengo mis atributos pero nada más, lo normal para una chica de mi edad.
El primer día de clases pasó con normalidad, nada que antes no haya visto, la presentación de todos, los nombres y unas cuantas cosas algo aburridas como para ser contadas en este momento que, claro que se las voy a decir pero todo a su tiempo y todo con la persona que es debido. Las semanas pasaron, bueno para ser exactos pasaron tres semanas y unos cuantos días y, para variase ya había hecho amigos, una niña llamada Tessa, algo tímida al inicio pero solo es una fachada, un muro que al ser derribado lo único que puedes encontrar al pasarlo es risa y rebeldía y ella, ella amigos se convirtió desde el inicio en mi amiga y confidente fiel.
Una niña algo mustia para ser sinceros, su nombre es Vanessa, una chica guapa pero a simple vista tranquila, se suponía que era niña buena y, créanme que ese papel era muy bien interpretado en el horario de escuela pero una vez poniendo un pie afuera de la misma se transformaba, era una chica que le gustaba el peligro y no le tenía miedo ni a los vicios más comunes como a las tentaciones más hostiles.Pero bueno, lo interesante de este día, de este momento es que, como ya estábamos cerca de la fecha de Halloween que, aunque no es una tradición natal de mi país la celebramos con mucho fervor, fuimos invitadas a una fiesta de disfraces, iba a tener lugar en la casa de una niña de sexto semestre, yo algo emocionada y a la vez nerviosa, tengo que admitirlo, se lo conté de inmediato a Tessa, ella enseguida me dijo -Claro que vamos, no nos la podemos perder- yo claramente asentí con la cabeza sin saber lo que iba a pasar esa noche, esa esperada y poco predecible noche.
Llegando la fecha me fui a casa de Tessa, ella me ayudó a arreglarme y viceversa porque ambas, aunque nos gusta mucho la celebración no sabes mucho de cómo usar sangre falsa y ese tipo de cosas. Llegando al lugar, entramos y el ambiente tenía una iluminación neón y estaba decorada tanto con telarañas como con toda clase de artículos intentando dar algo de miedo pero, aquí entre nos, lo único que causaban era la intriga de entrar y ver más, la casa era enorme, pero a pesar de su inmenso tamaño estaba abarrotada con casi toda la preparatoria; ya adentro nos pusimos en ambiente, primero un trago y en cuanto se acabó fuimos por otro, así toda la noche hasta ya entrada la una o casi las dos de la mañana, déjenme decirles que, para ser esas altas horas de la madrugada aún estaba a reventar la casa. Nosotras estábamos bailando entre la multitud, conocimos a muchas personas que, sus nombres y sus historias en este momento son irrelevantes, solo hay una que es la protagonista, la única que vale la pena ser contada, es la de Dante, un chavo atlético, agraciado pero algo hueco, no es por hacer menos el mundo que tenía en la cabeza pero, hay que ser sinceros, en lo único que pensaba era o en tener relaciones o en deportes, en cuanto lo vi me llamó la atención, poco a poco me fui acercando a él hasta que solo estuvimos a unos pasos de distancia.
Cuando estuve lo suficientemente cerca de él volteé y lo vi a los ojos, al principio fue raro pero emocionante, el me sonrió y yo, intentando disimular que me moría de ganas de hablarle nada más agaché la mirada y me sonrojé, aunque no creo qué hay notado eso por la luz, se acercó a mí y yo, sin poderlo creer, alcé la cara y, sin engañarlos faltó poco para que pasara lo que no debe de pasar a menos que quieran terminar arruinadas tanto en redes sociales como con su círculo de amigos, me dijo -¿quieres hablar?- yo no me negué y, agarrados de la mano nos salimos al patio de enfrente, nos quedamos sentados en el pasto, algo ebrios pero lo suficientemente conscientes como para saber lo que estaba pasando; después de un rato de conversar sobre las cosas más random, sin pensarlo y sin saber cómo pudo haber pasado nos besamos, no cualquier beso, el fue el primero en crear una historia, la historia en la que dos perfectos desconocidos sin siquiera conocer sus gustos ñ, sus miedos y menos sus aspiraciones se besaron, fue un beso apasionado, hubo una mordida o dos de labio, en cuanto me di cuenta de lo que había pasado terminé el beso y abrí los ojos y, para mi mala suerte había mucha gente tanto atrás de mi como de Dante, algo apenada pero satisfecha y emocionada por lo que había pasado me alejé de él y de la situación que, aunque embarazosa, no me importaba que lo hubieran visto.
Al otro día Tessa sin tan siquiera dejarme entrar al pasillo de los salones me agarró del brazo y a rastras me llevó a los baños en donde me hizo darme cuenta de lo que en realidad había pasado, Tessa me dijo -¿sabes con quien te has besado? Hmmm al parecer no, te has besado con el segundo chico más guapo y codiciado de toda la preparatoria; que envidia me das-.
Salimos del baño después de agregar unos cuantos detalles a la historia y, allí estaba él, parado enfrente, me volví a sonrojar e incluso más intenso que anoche, esta vez si lo notó pero no le di ni siquiera tiempo para que se acercara y me dijera la más mínima palabra, me fui a refugiar al salón de clases y, la siguiente parte es en donde culmina la primera historia, la historia de Dante y yo, nuestro romance de una sola noche, un romance de unos tragos, un romance más...

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Un beso, una historia
RomanceEstá es la historia de una chica llamada Romina, ella nos va a ir narrando sus historias amorosas desde una perspectiva adolescente en donde cada vez que ella sale de fiesta con sus amigas va agregando un beso más, una historia más.