14°

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Francisco cayó sorprendido al suelo, acariciaba su labio y notó como un líquido carmesí brotaba de ello...

Manuel jadeaba aún estando en posición de haber golpeado recientemente a alguien, Micaela en cambio se tapaba la boca anonadada por la tensión violenta e impertinente que ocurrió hace segundos.

— ¡¿Manuel, qué carajos hiciste?! —Micaela se ponía frente a Francisco como si tratara de cubrirlo, él ahora observaba con desprecio y cólera al chileno por el cual desea devolverle el golpe...¡y con más intensidad!

— ¡Ahora lo defiendes! ¡Claro! —Manuel rodó sus ojos cruzando sus brazos— ¡No pienso permitir que otro hombre te toque!

— ¡Acaso te tengo que hacer recordar que tú y yo terminamos!

Hubo un silencio de segundos, las personas que iban a ingresar a la sala de cine se quedaron viendo la escena que pasaban entre los chicos.

— L-Lo que viste...te juro que no es lo que vo' pensai' —Manuel desvió la mirada desanimado

— ¡Oh! , ¿tú me crees pendeja no? Conchetumare —Contestaba— ¡Te vi bien meloso frente a Catalina, huevón!

— ¡No es lo que crees, ella me estaba ayudando a...!

— ¡Manu!

El argentino de pronto llegó jadeando al lugar por el gran cansancio como si hubiera corrido una maratón.

— ¡Oh loco! —Decía— ¡Soltá el hacha! —Martín señaló al chileno

Manuel, Francisco y Micaela en respuesta lo miraban confundidos.

— Tincho, ¿qué chucha haci' acá?

— ¡A impedir tu locura! —Martín trató de reincorporarse en la pared— ¡No dejaré que mi mejor amigo vaya a la cárcel por homicidio!

— Pues déjame decirte que llegaste tarde —Francisco se levantaba limpiándose los labios

— ¡Pero aún seguís vivo, boludo! —El argentino agregó y después se dirigió a Manuel— ¡Ahora Manu, dónde escondés el hacha!

Manuel no contestaba, mas bien simuló no saber nada.

— ¿Cárcel? ¿Hacha? —Micaela intervenía desconcertada— ¿Martín de qué carajos hablas?

— ¡Él lo sabe!

Martín respiraba ondo para mitigar poco a poco su agotamiento.

— ¡Ahí está, es el niño que me agredió!

De pronto el hombre que Manuel había empujado apareció con un grupo de guardias de seguridad y eso más que asustar enojó al chileno.

— ¡Que tengo veinticinco, por la putamare!

Manuel indignado se dedicó a huir de la ley escapando por la puerta de salida de emergencia.

Los demás chicos veían sorprendidos la escena, en especial Micaela quien se preocupó por el porvenir del chileno si es que lo atrapaban.

— ¡Hay que encontrarlo antes que ellos! —Sugirió la peruana preocupada

— ¿Después de los problemas que causó, quieres ir a buscarlo? —Francisco cruzó sus brazos de mala gana frunciendo el ceño, no estaba de acuerdo con Micaela.

— Ay entiéndelo, boludo —Martín le daba palmadas en la espalda al ecuatoriano sintiendo lástima— Ella no te ama...

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Ahre solo un capítulo más... :') o dos alv siempre tengo problemas con los finales ;-;

Asdhdsbssjsjsjs ¿A dónde creen se fue Manu? <3

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