Compartimos la pasión por la lectura, a pesar de que yo soy mucho más atolondrado y disperso al leer, pero fue así como me fui hundiendo en su literatura, sobre pasión, amor y erotismo. Era inevitable pensar en ella e imaginándome que nosotros eramos los protagonistas. Fue así como me fui dando cuenta que si lo estábamos siendo, sólo que de nuestra propia historia.
En base a esto, reflexionaba, que claro ella leía y leía estas historias pero nunca había vivido ni la tercera parte de estas, y no porque no quisiera sino porque se sometió - voluntariamente - a una vida más "sumisa" y conmigo estaba viviendo y añorando quizás una historia de sus libros.- Pero no pequeña, esta es la vida real y aparte del dolor no creo que terminaremos felices como los libros que lees, siento que esto tarde o temprano nos explotará en la cara y no sabremos que hacer cuando suceda...