Veneno. |YM|

Tres.

Recomendación: Escuchar las canciones asignadas.

Inspirado en:

The Weeknd- Down Low

(...)

Tras terminar de haberse comido con la mirada JiMin decide por tomar una de las manos pálidas de YoonGi y llevarlo a la pista. –Precioso, no sabes la ganas que tengo por bailar contigo, pero no sé bailar en lo absoluto.—

JiMin sonrió coqueto simplemente desde que dicho joven de piel pálida y sexi caminar le había llamado la atención desde que pisó ese lugar donde reina el pecado. –Entonces le enseñaré a hacerlo, no hay que preocuparse por eso ahora.— JiMin tomó las manos del mayor y las ubicó en su casa estrecha cintura.

En ese momento es cuando YoonGi siente hormiguear sus manos al sentir su cintura la cual ya había tenido cierto pensamiento de cómo se sentía antes y que por cierto es mucho mejor de lo que se imaginaba. –Oh pequeño, no sabes con quien te estás metiendo.— sonrió con picardía mientras seguía concentrándose en los movimientos que le proporcionaba el menor.

–Creo que valdrá la pena meterme con usted, ¿No lo cree?.— de un momento a otro JiMin se giró quedando pegado al pecho del mayor e hizo que el mismo enredara aún más las manos en su cintura, esto lo estaba disfrutando o mejor dicho ambos lo estaban disfrutando.

–Dime tu nombre pequeño.— a JiMin le pareció buena idea el no decirle su verdadero nombre, total solo será por esta noche y tal vez nunca se vuelvan a ver.

–Lowit, Park Lowit.— quizá una pequeña pista si es que le llegará a buscar pues JiMin a pesar de tener una relación "seria" con alguien está en una discoteca a punto de coger con el mismo. –¿Y el suyo?, quisiera saber el nombre que voy a decir mientras usted me hace suyo.— JiMin se estaba excitando y como no si tenía al mayor respirando en su cuello mientras empujaba delicadamente sus caderas para aumentar un poco más la fricción.

–YoonGi, Min YoonGi. Encárgate de recordarlo hermosura.— YoonGi afianzo más su agarre y lo beso siendo correspondido de la misma manera; tan necesitado y con la mismas ganas que se traían.

JiMin sonrió socarrón después de haberse separado por la necesidad de respirar. —Mmm, señor Min, ¿cree que recordaré esa noche?— y lo decía por el echo de estar ligeramente borracho y con un poco sólo un poco de marihuana en su organismo, el de fumar Marihuana solo lo hacía cuando tenía un encuentro sexual con alguien a excepción de su pareja. ¿Qué creían que JiMin es un santo? Pues no, JiMin es un chico el cual lleva casado "felizmente" diez años con su mejor amigo de la adolescencia Jeon JungKook el típico chico millonario el cual lo consciente mucho, materialmente, sentimentalmente y sexualmente. Aunque lo último no tanto ya que exactamente por lo último ahora está en brazos de YoonGi a punto de entrar a la casa del mismo.

—Muñeco, espérame arriba. Yo voy en dos minutos.— JiMin asintió sin molestia alguna, apretó el botón del ascensor que había dentro de la casa y presionó el botón el cual decía; habitación. Vaya que quedo sorprendido con la casa. —Este hombre tiene más dinero que JungKook. Ah que importa total lo único que quiero es un poco de sexo y luego irme de aquí.— al llegar las puertas del ascensor se abrieron dejando ver la amplia habitación, se podría decir que parecía un departamento entero y solo la habitación ya que JiMin al husmear un poco más encontró el baño que consistía en una gran bañera, una ducha aparte, una piscina de aguas termales y varios espejos. Todo muy moderno y bonito. JiMin con la boca abierta salió del baño y vio a YoonGi con dos copas de vino y la botella en sus manos.

—¿Empezamos?— Dios JiMin juraría que se le salió un jadeo al ver a tremendo hombre frente a él, tan fornido, la camiseta negra que portaba dejaba ver perfectamente sus pectorales y sus grandes brazos.

El mayor sonrió al ver como "Lowit" se lo comía con la mirada. Dejo las copas junto con la botella de vino en la mesita de noche, y se empezó a acercar lentamente hasta el menor, lo tomó de las caderas acercándolo más a si mismo. —¿Enserio estás decidido a estar conmigo en esta noche?— le sonrió coqueto mientras acariciaba su cintura con sensualidad.

JiMin suspiró mientras no quitaba la mirada de los ojos de YoonGi, sonrió y pasó sus manos por el cuello del mayor para besarlo castamente. —Pues...— acarició ligeramente su cuello. —Si no hubiera querido estar contigo. No me hubiera acercado a tu mesa.— YoonGi perdido por las caricias que le proporcionaba el menor, lo tomó de los muslos haciendo que este enredara sus piernas en sus caderas, camino hasta su cama y lo dejo ahí mismo.

(...)

La verdad no sé si seguir escribiendo esta historia, la seguiré actualizando, poco a poco. Gracias por leer (si es que lo hacen). ❤️

Annia🌷