Capítulo 7

1.7K 253 26
                                    

Kong POV

Cuando la cálida luz del sol golpeó mi cara, mis párpados se abrieron para captar el amanecer. Creo que puedo afirmar inequívocamente que era lo mejor que había dormido en mi vida.

Tal vez se debía a que los analgésicos que me habían noqueado. O tal vez tenia algo que ver con el hecho de que, por primera vez en toda mi vida, me había acostado en una cama tan suave que me sentía como si estuviera flotando en una nube toda la noche. Y si estaba siendo completamente honesto, la fragancia almizclada de P'Arthit tampoco me hacia daño. Y aunque mi pierna prácticamente me estaba matando, me desperté con la sonrisa más amplia en meses.

La mejor parte, era que tan pronto como me desperté, me recibió el delicioso aroma del desayuno, un nuevo cepillo de dientes y un nuevo conjunto de ropa esperando solamente por mi. Supongo que tener amenazas de muerte vale la pena de vez en cuando.

Sé que casi había perdido la cabeza la noche anterior cuando comencé a entender lo que estaba sucediendo, pero hoy en día la mañana se veía mucho mejor. Incluso logré captar media sonrisa en el rostro de P'Arthit cuando entré en el comedor antes de que él negara con la cabeza y la reemplazara con una mirada amenazadora.

¿Es solo conmigo o él siempre pretende ser tan gruñón cuando en realidad es un amor?

Tal vez sea parte de los requisitos para el trabajo, de cualquier manera, no pudo ocultar su verdadera naturaleza por mucho tiempo cuando, aun siendo brusco, estaba amontonando una montaña de comida en mi plato y se preocupaba por mí constantemente sobre si quería café o jugo. ¿Habia incluso una opción? Por supuesto que sería jugo. No he probado esa cosa desde hace más de una década.

Haciendo un esfuerzo extra para no hacer ruidos orgásmicos mientras tomaba un poco del dulce jugo de naranja. Intenté concentrarme en lo que decía P'Arthit.

—¿Puedes faltar a clases hasta que tu pierna se cure? Estarás mucho más seguro si te quedas adentro por un tiempo.

—Sí, creo que debería estar bien. ¿Pero estás seguro de que está bien si me quedo aquí?

—¿A dónde más planeabas ir?

—Yo... uh... probablemente podría preguntarle a mi amigo para quedarme en su casa ...

—¿Y ponerlo en peligro también?

—No no...

—Entonces ya está arreglado. Te quedarás aquí hasta que lo tengamos todo resuelto. Esperemos que sea antes de que puedas volver a la universidad. No te preocupes, me asegurare de que tengas seguridad vigilándote todo el tiempo.

—¿Que pasa contigo?

—¿Conmigo? Quiero decir, esta es mi casa, así que obviamente me quedaré aquí.

—No, lo que quise decir fue que me estabas siguiendo, ¿verdad? Así que ahora que no tienes que hacer eso... ¿vas a ser mi... seguridad?

—¡No! No. Yo... umm... Tengo que ir al trabajo. Pero enviaré a alguien. Alguien en quien confío.

Asentí en reconocimiento, sintiendo una punzada de decepción por su vehemencia* al no querer quedarse. Supongo que estaba en una posición bastante alta. Probablemente debía tener cosas mucho mejores que hacer que jugar a la niñera de una persona tan vieja como yo. Debería agradecerle en lugar de ser un mocoso exigente cuando en realidad me estaba permitiendo quedarme bajo su techo.

—Kongpob...?

—Si P'?

—¿Pudiste recordar algo más de esa noche? ¿Algo que te hayas perdido? ¿Viste por casualidad a alguien en la calle cerca de Martín? ¿Tienes alguna idea de quién querría atacarte?

El policía y su sospechoso // The cop and his suspect [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora