Las cartas y el chico de cabello plata.

2.9K 312 109
                                    

Atención:
Este capítulo es la misma referencia al libro de Harry potter,capítulo 1. A partir del segundo capítulo la historia ya no será la misma. La historia tomara una versión totalmente diferente.

El señor Kugsley abrió, como siempre su periódico y Woo-san golpeó la mesa con el bastón que llevaba al colegio y a todas partes.

Todos oyeron el ruido en el buzón y las cartas que caían dentro.

Había tres cartas en el buzón, una postal de la hermana del señor Kugsley; un sobre color marrón, y una carta para Hinata. Hinata la recogió y la miró fijamente, con el corazón vibrando a mil por hora. Nadie, nunca, en toda su vida, le había escrito a él. No tenía amigos ni otros parientes. Tampoco salía de casa así que era casi imposible que alguien se interesara por su persona. Sin embargo, entre sus manos estaba esa carta, una carta dirigida a él.

Señor Hinata Shoyo.

Alacena Debajo de la Escalera.

Privet Drive, 4 .

El sobre era grueso, pesado y realmente no estaba seguro del tipo de material del que estaba hecho, la dirección estaba escrita con tinta esmeralda. Volteó un par de veces la carta buscando el nombre del emisor pero no encontró nada. Con las manos temblorosas, Hinata le dio la vuelta al sobre una vez más y vio un sello púrpura con un escudo de armas.

Un león, un águila, un tejón y una serpiente, que rodeaban una gran letra H.

—¡Hinata, trae la correspondencia ahora! —exclamó el señor desde la cocina—. ¿Qué estás haciendo? Es de mala educación revisar la correspondencia ajena.—. Hinata volvió a la cocina a paso lento, contemplando su carta, se sentía feliz de saber que alguien había pensado en él y que posiblemente había alguien allá afuera que sabía de su existencia. Entregó a su tío Kugsley la postal y lo que parecía ser una factura. —¡Que fastidio, mas facturas por pagar!— Exclamó dándole una rápida ojeada al sobre marrón.

Hinata tomó asiento en uno de los sillones importándole poco la mirada de disgusto que le dirigió su primo, y lentamente comenzó a abrir el sobre. No tenía muchos ánimos de soportar los reproches de Woo-san por usar el sillón tan solo un par de minutos, así que lo ignoró por completo. Pero el niño con el rostro completamente rojo de furia al ser ignorado, levantó la cabeza fijando su mirada en el sobre amarillo que Shoyo tenía en sus manos.

--¡Hinata se ha robado una carta!—

Hinata entonces tenía la carta fuera del sobre, lista para ser desdoblada cuando el señor Kugsley se la arrebató de las manos.

—¡Oi! ¡P-pero es mía!—

—¿Tuya?— Río levantando la carta con burla.—¿Es acaso esta carta, tuya muchacho? ¿Quién podría escribirte a ti?—

Hinata no era alto, así que sus intentos de atraparla o siquiera arrebatarla serían en vano consiguiendo así un terrible castigo si lo intentara. Esa carta tenía su nombre escrito, nombre y apellido. ¡Estaba más que seguro que aquella carta era y estaba dirigida a su persona!.

El señor Kugsley entonces desdobló la carta y comenzó a leerla con una cara de placer, disfrutaba sentirse superior. Su rostro de pronto comenzó a cambiar por una expresión de angustia, sorpresa e incluso horror.

—¡M-m-mujer! ¡Mujer, ven rápido!— Exclamó completamente pálido, haciendo que su esposa saliera del comedor apresurada.

—¿Qué ocurre?—

La señora Kugsley entonces comenzó a leer sintiendo que su presión se iba hasta el suelo, sus piernas temblaron y su garganta parecía cerrarse cada vez más con cada una de las palabras que leía de aquella carta escrita a mano.

Hogwarts. HaikyuuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora