Qué pena darse cuenta de que quizá ya nada volverá a ser como antes.
A lo mejor todo acabó, las risas, los besos, los abrazos, el cariño o hasta la confianza.Quizás estos sean los últimos mensajes de amor o solo mensajes, porque de a poco los corazones disminuyen, los "te amo" "te extraño" "¿estás bien?" "puedes contar conmigo para lo que sea", se desvanece, como la arena en tus dedos.
Quedará rastro de ella en tus manos, recordándote que estuvo ahí y que fue lo mejor, sin embargo, pronto lavaras tus manos para dejar ir todo grano y tal vez tener nueva arena llenando ese vacío que te dejó.