Kidz [2Doc Fanfic]

INTRO.

*Una tarde nublada en Stroke-on-Trent, Reyno unido.

Ese día en especifico, en un barrio de Staffordshire, se encontraba un pequeño niño, moreno, de cabello obscuro y espeso, sentado en los escalones de una casa aparentemente descuidada, frente a la puerta, chupándose el dedo, sus pequeños ojos de infante reflejaban miedo y preocupación, su madre lo había dejado allí, prometiendo regresar, para nunca volverla a ver.

Frente a esa entrada se encontraba un vehículo negro, recién estacionado, al cual el infante miraba con atención aproximarse.

- ¿Mami?, vocalizo torpemente en voz baja para si mismo poniéndose de pie al mismo tiempo.

De ese auto emergió un hombre de mediana edad, de extraña piel verde, conocido en el pueblo por su actitud violenta y egocéntrica y por ser considerado una persona peligrosa y un estafador de renombre, tenia un espeso y largo cabello color negro, una nariz larga redondeada y un aspecto general demacrado, vestía un sombrero de copa de listón rojo y un traje negro, olía a alcohol y tenia unas enormes ojeras, su nombre era Sebastián Niccals

El hombre entonces se dirigió hasta la entrada de su casa, caminando torpemente, su hijo Hannibal lo miraba desde la ventana, el hombre le dirigió una mirada fría, el niño le respondió señalando hacia la puerta, el hombre lo hizo y vio al infante de pie a unos metros de el.

Se quedo petrificado en su lugar, miro a ambos lados, vio una nota debajo de donde el pequeño Murdoc se encontraba sentado, la recogió rápidamente sin mirar siquiera a los ojos al confundido infante.

Después de algunos segundos arrugo el papel frente a su rostro furioso y lo lanzo.

- Maldita perra-. refunfuño.

Entonces miro al pequeño, con indiferencia, este lo miraba atento, inexpresivo, entonces Sebastian se hinco frente a el.

- ¿Entonces tu eres Murdoc, eh?, esperaba algo mejor parecido para un hijo mio ¿sabes?.

El infante no entendía lo que le decían, no respondió, solo se tallo un ojo con su mano y dirigió su mirada hacia el suelo, el Hombre entonces se puso de pie como pudo y tomo al pequeño de la manga para arrastrarlo dentro de la casa.