Entre betas [Jicheol]

Alfa en rutina

El domingo por la noche, SeungCheol ya no aguantaba más la emoción de poder trabajar con su nuevo no omega, lo llamó tarde por la noche, esperando que Jihoon no estuviese dormido y mucho menos enfadado, pero resultó que estaba nervioso por su nuevo trabajo y tampoco podía dormir.

—Dime una cosa— Jihoon cambió de pronto el tema.

—¿Qué quieres que te diga?

—Cuando me llevaste a casa de tus padres, ¿de verdad fue porque pensaban que yo soy tu omega?

—No, en realidad. Esa mañana fui a ver a mi padre, no pude dejar de pensar en que seguías si conseguir trabajo, así que hice un trato con él: yo aceptaba trabajar para él si te contrataba. Se negó al principio, pero con algo de chantaje conseguí que al menos te contrataran como mi secretario. La cena sólo fue para confirmar si querías el puesto o no.

—Tiene sentido— suspiró. —Espera, ¿por eso me dijiste que lo considerara como una entrevista de trabajo?

—Qué astuto eres Jihoonie.

—Te voy a matar SeungCheol, pasé un momento vergonzoso.

—No fue para tanto, al menos no hiciste lo del auto en la casa.

—Ni me lo recuerdes.

Debieron haber dormido esa noche, lo necesitaban para tener energías la mañana siguiente, pero estaban tan nervioso, que no consiguieron dormir lo suficiente. Al alfa le emocionaba saber que tendría a Jihoon como su secretario, y obviamente no dejaría que el menor estuviese lejos de él. Llegó temprano a la oficina, saludando a todo mundo de manera entusiasmada mientras hablaban de él en murmullos; todos ya sabían que el único hijo del señor Choi tomaría su puesto como vicepresidente ese día.

A pesar de que una chica le había entregado unos papeles, que serían los primero trabajos que debía realizar, salía constantemente de su oficina para ver si Jihoon había llegado y estaba sentado en su puesto, pero ya eran las diez de la mañana y el omega no se presentaba, comenzaba a pensar que decidió no tomar el empleo por haberle engañado.

Estaba tecleando unas cosas en su computadora, cuando una llamada al teléfono de la oficina llegó —¿sí?— contestó.

—El señor Kang quiere que pase a su oficina, quiere conocer al "hijo prodigio".

—¿Jihoon?

—¿Sí, jefe?

SeungCheol se emocionó —quiero que vengas un momento.

El menor suspiró —claro.— En pocos segundos, Jihoon tocó la puerta de la oficina de SeungCheol, recibió el permiso para entrar e ingresó al lugar —¿qué se le ofrece?

—Tu lindo trasero— sonrió reclinándose en la silla.

Jihoon cerró la puerta rápidamente —¿quieres callarte? Alguien podría escuchar.

—¿Qué importa? Mi madre ya está diciendo que eres mi omega.

—¡Oh dios, no puede ser!— dio la vuelta pegando su frente a la puerta.

—¿Por qué llegaste tarde?

—Estaba firmando mi contrato y me dieron una pequeña inducción— se volteó para mirar al alfa —¿algo más que necesites? Ya me dieron trabajo... Y ni se te ocurra decir que mi trasero.