capitulo 2

8 2 2
                                    

Era un día como cualquier otro, la joven Bridget se había levantado tarde, como siempre. Mientras se alistaba lo más rápidamente posible, su hermana la miraba preocupada. No  por el hecho que llegaría tarde al colegio, sino porque, durante la madrugada, la chica se había quejado de un dolor en sus piernas.

Su hermana, al ser la mayor, no podía dejar de pensar en eso y en el largo tiempo que no estuvieron. Ese periodo cuando Bridget no podía mover sus piernas. ¿Y si ella estaba volviendo a recaer? La joven de ojos azules se dió cuenta de la preocupación de su hermana. Tomó su mochila y se acercó a su hermana.

-Amisadai no tienes de que preocuparte. Lo de anoche fue solo un poco de dolor. Talvez solo fue que estaba cansada. ¿Si?-dijo Bridget sonriéndole.
-Esta bien Brid. No me preocuparé tanto. Pero si vuelves a sentirte mal, le dirás a nuestros padres. ¿Esta bien?-contesto Amisadai con una sonrisa, pero a su vez condicionándole.
-Esta bien. Por ahora tengo que llegar rápido a la escuela. Adiós Ami.

Después de esa charla, Bridget salió de su habitación corriendo. Como era tarde y al ir tan rápido, olvidó tomar el desayuno que su madre le había preparado. Sólo se limitó a correr lo más rápido que podía.

Al llegar a la escuela corrió hasta al aula, con esperanza de no encontrar a su maestra dentro. Por suerte, la profesora se había demorado también y solo entro, tomo unas hojas de actividades y salió del aula con dirección a la coordinación para fotocopiarlas, no teniendo tiempo siquiera de pasar asistencia. Rápido se sentó al lado de su mejor amiga y está la miró preocupada. Ella era la única con excepción de los profesores y la directora, que conocía su estado, conociendo lo enferma que de verdad estuvo por mucho tiempo hasta hace poco.
- Oye bridget. Has llegado demasiado tarde, incluso rompiste tu propio récord. ¿Te encuentras bien?- pregunto la chica rubia apenas susurrando. Después de todo no quería que nadie supiera lo que le pasaba. Lo que no tenía en cuenta es que cierto chico tenía conocimiento de lo sucedido.
-Perdon, me quede dormida. Disculpa si te preocupé - dijo la pelinegra sonriéndole a su amiga la cual devolvió la sonrisa quedando un poco más tranquila.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 24, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

siempre juntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora