Always Yours (Liam Payne)

El está de vuelta.

-¿Mell estás bien? –La cabeza me dolía intensamente, Niall me observaba preocupado, la noticia de que Liam estaba acá en Mullingar me había agarrado desprevenida, pero no podía dejar que eso me afectara de esta manera.

-Estoy bien. –Mentí.

-Mell –Suspiró. –Se que no es cierto, por eso no quería decirte que él estaba acá.

-Pues qué bien les salió mentir todo este tiempo. –Expresé secamente.

-Lo siento, debí saber que esto no era una buena idea, pero quiero decirte que al menos le debes dar la oportunidad de explicarse.

-No Niall, lo quiero, pero lo nuestro no es posible. –Quería ser fuerte, pero en el fondo de mí, sabía que lo quería y mucho.

-Mellanie, lo veo en tu mirada, tu lo quieres –No era capaz de negarle la verdad a Niall.

-Mell te traje los medicamentos –Interrumpió Aleja, la cual traía un vaso de agua junto con las medicinas.

-Gracias.

-¿Estás enojada? –Preguntó Aleja sentándose al lado mío.

-¿Cómo te sentirías si yo supiera algo que sabes que te va afectar y aun así me quedo callada? –Dirigí mi mirada a Niall, el cual me miraba suplicante.

-Pues me sentiría mal, sabes que no me gustan que me mientan, realmente lo siento, pero puedo decirte que Liam, sigue enamorado. –Sus palabras no ayudaban en estos momentos.

-PAREN DE DECIR ESO, no puedo volver con él, por más que quiera no puedo.

-Si puedes hermanita, tu enfermedad está controlada, en una semana te dirán si todas las terapias extras han funcionado, dale una oportunidad. –Quería que me dejaran sola, me estaban confundiendo.

-Chicos por favor déjenme sola.

-Mellanie, no podemos.

-Váyanse –El nudo en mi garganta se hizo mayor –Por favor –Supliqué.

-De acuerdo –Aleja suspiró. –Estaremos abajo, por si lo necesitas ¿Vale?

-Vale.

Este día había sido una mierda, primero lo de Daniela, luego caerme encima de ese chico, lo de la ex novia de Niall y ahora Liam, ya no podía, quería que todo volviera a la normalidad. Pero eso sería imposible.

Mi celular comenzó a sonar, no tenía ánimos de  contestar, pero estaba esperando la llamada de Abigail, que vendría para la comida del domingo en la casa Maura.

-Hola –Dije en el tercer tono.

-¿Mellanie? –Dijo una voz conocida.

-Si… ¿Quién eres? –Pregunté.

-Soy Harry, pequeña Brooks –Mi cara fue de asombro, su voz me era familiar, pero no esperaba que fuera Harry.

-Ricitos –Expresé divertida y di un saltito algo infantil.

-¿Cómo has estado? –Preguntó amablemente y divertido por mi tono.

-Bien Harry ¿Y tú?

-Te tengo una sorpresa para tu cumpleaños –Su voz era de entusiasmo.

-¿Qué dices? Falta 1 día.

-Lo sé, pero no aguanto más.

-¿Qué sorpresa es? –Niall tocó mi puerta en esos momentos. –Dame un segundo Styles.

-¿Qué pasa? –Pregunté.

-Necesito que bajes.

-¿Qué pasa? –Dije levantándome de mi cama.