En esta no

2. Tal vez en otra vida

Noviembre de 2006.
Venecia, Italia.

Terminé de acomodar los expedientes de los pacientes que hoy he recibido. El sol iba cayendo, debía regresar a casa y darle el último vistazo al informe que presentaría mañana en el Congreso Internacional de Medimagia.

Desde muy pequeño me apasione por la medimagia y cuando la guerra estalló vi mi sueño muy lejano. La vida me dio la oportunidad de estudiar lo que tanto quise de niño. Me especialice en el campo de la neurología, con el objetivo de encontrar una cura para las personas que han sido hechizadas con un obliviate.

Luego de tanto trabajo, estudios y desvelos, lo he conseguido. La poción ya fue registrada a mi nombre y un lote está empaquetado y listo para distribuirse en los principales hospitales del mundo mágico.

Sólo espero que la poción sea de ayuda para los padres de ella... Desde la cena en conmemoración por la Batalla de Hogwarts, no he tenido un momento de paz. Las noches me las paso recordándola... Soy un completo imbécil, al anhelar verla de nuevo...

▶▶▶

El despertador sonó, sin embargo, yo ya estaba despierto. Sin demora alguna, me levanté para tomar una ducha y desayunar. El Congreso dará inicio a las diez de la mañana y por la noche habrá una cena de bienvenida a los medimagos invitados, procedentes de Inglaterra, Estados Unidos y Alemania.

Una vez terminé el desayuno, me despedí de mi madre y me fui rumbo al Congreso. Todo transcurrió normalmente, recibí muchos elogios por mi poción.

La noche cayó y con ella la fiesta daría inicio. No tenía muchos ánimos de quedarme, los días de insomnios estaban haciendo mella en mí. Así que opté por saludar y luego irme a casa.

- Buenas noches y bienvenidos sean todos a Venecia...- inició mi jefa- estamos muy agradecidos por el apoyo brindado de parte de nuestros patrocinadores, para que este Congreso se diera a cabo, así mismo, queremos felicitar al sanador Draco Malfoy, por su aporté en la rama de neurología, esta poción será de gran ayuda para nuestra comunidad- los aplausos no se hicieron esperar, y varios compañeros me palmearon la espalda felicitándome.

Luego de eso, la música empezó a sonar y la comida fue servida. Era el momento de irme. Salí del auditorio, y me detuve en seco, cuando su voz se dejó escuchar...

- Hola Draco...- mi corazón se detuvo abruptamente y luego volvió a latir frenético.

¿Era un sueño? ¿Acaso mi mente me estaba jugando una mala pasada? No, era su voz... Di media vuelta, y la vi... Era ella con su cabello castaño, sujetó en una cola alta; con sus curvas resaltando en ese vestido color azul oscuro; sus labios pintados de carmín y sus ojos marrones me observaban fijamente.

"En esta no
nuestra historia nunca comenzó..."

- ¿Qué haces aquí? - pregunté luego de un largo silencio.

¿Acaso estaba aquí por mí? ¿Vino a luchar por nuestro amor?

- Vine aquí por vacaciones... - contestó apartando su mirada de la mía - con Ronald- esa fue la estocada final.

Me impuse mi máscara de indiferencia, empujé mis sentimientos al hoyo más profundo de mi ser. La rabia vibraba en cada parte de mi cuerpo pero no la dejé aflorar. Ella ya había elegido...

- Pues que disfrutes tus vacaciones- dije al fin- adiós, Granger...

- ¡Espera, por favor!- gritó - yo quiero disculparme, por todo...- levanté mi mano para que dejará de hablar.