Ahora Seras Kitten Noir

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—¡Natalya!— su voz temblaba y su vista se nublaba, no podía creer lo que estaba presenciando, se negaba a aceptar la realidad.

—Mi adorada diamante, no estés triste por esto,—dijo— no quiero verte llorar mi pequeña niña ¿podrías cumplirlo?-pidió para después soltar un quejido.

—Natalya, no me dejes por favor.—sollozo—Eres la única que ha visto por mi, eres mi mejor amiga y una madre para mi... Tu me criaste desde pequeña...—su voz se quebró, no podía seguir hablando. Pero debía —¡No me dejes, te lo suplico! no me dejes sola, no me abandones.-rogó.

—Mi pequeña ____, tu jamas estarás sola, yo siempre estaré para ti.

—Dime que puedo hacer para remediar esto, te lo suplico.—pidió con insistencia, debía haber una forma de salvarla.

—Mi dulce niña—acaricio mis mejillas permitiéndome sentir su temperatura helada, eso solo provoco que mis lagrimas se agruparan en mis cuencas.Coloque mi mano sobre la suya apreciando sus caricias que tanta falta me hacían—quiero pedirte un último deseo.

—Dime.

Ella llevo una mano a su bolsillo izquierdo de su chaleco saco un anillo plateado con un diamante zafiro en forma de flor, este por su parte estaba rodeado de pequeños diamantes blancos, aquel anillo solo lo había visto una vez en mi vida, lo tome entre mis manos apreciando su belleza excepcional.

—Quiero que tu uses este anillo siempre,jamas te lo quites y mucho menos entregues a nadie.—tocio haciendo que una lagrima resbalase de mis mejillas—no llores mi pequeña valientes, también te pido que busques un libro de pasta roja que se encuentra en los estantes de tu habitación.—el tiempo la estabatraicionando— se feliz mi pequeña.—susurro con cariño con una sonrisa debil.

Su mano estaba helada y sus ojos se encontraban cerrados, el temor se apodero de todo mi cuerpo.

—Natalya.— dije con voz temblorosa pero ella no respondió. Allí entendí todo, ella había muerto, me había dejado.

Vi a Darck Diamond, se encontraba peleando contra los héroes de parís Ladybug,Chat Noir y Rena Rouge.

Mi atención estaba en Natalya y sus Últimas palabras. Cumpliría con lo que me pidió, con sus últimas peticiones.

-¡Miraculous ladybug!-

Escuche a lo lejos, todo volvió a la normalidad pero,Natalya seguía sin moverse. Su temperatura era baja y ni hablar de su tono de piel.

Escuche sirenas de camionetas acercarse, voces y a mis nuevos amigos llamarme pero mi cuerpo no se movía, mis ojos no se apartaban de ella. Mi única familia,mi mejor amiga,mi hermana....La que fue como una madre para mi estaba en el suelo sin vida alguna.

No aguante mas, mis lagrimas salieron, prisioneras antes de mis ojos. Una cabellera rubia entro a mi campo de visión pero no escuchaba ni veía nada.

Recordé todo lo que había pasado esta mañana,el como había soñado por fin en ir a la escuela y como pensé que seria mi primer día. 

Solté un jadeo al recordar todo aquello que imagine antes de la tragedia, como anhelaba contarle acerca de mi primer día, contarle de lo que había hecho en la escuela. Ya no podría hacerlo jamás, sentí como tocaban mi hombro pero no me importo, lloraba a mares y jadeaba por aire, quiero despertar de esta horrible pesadilla.

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Me había desmayado.

Eso me dijo Chloe al entrar a mi habitación. Mi padre se encontraba ocupado con cosas del trabajo mientras yo estaba en mi habitación con Chloe y Gaspar mi guardaespaldas.

A Quién Amas [Muraculous Ladybug Y Tu][Tu Propio Harem]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora