Prólogo

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La escuela no podía ser más aburrida en opinión de Thor Odinson, las mismas clases, los mismos profesores, en lo único que se esforzaban era en meter nuevos temas cada vez más difíciles, por que cuando por fin parecía estar captando algo, o le agregaban cincuenta cosas más o cambiaban abruptamente de tema.

—Despierta hombre, te están preguntando a ti.— susurro Hogun, pegándole un suave codazo.

Rápidamente el rubio parpadeo y miró el pizarrón que estaba lleno de letras, rayas y números.

—¿Como despejamos ‘x’ con la nueva fórmula, señor Odinson?

Ver aquel pizarrón era más confuso que ver los apuntes de su amigo.

—No lo se profe.— la clase murmuro algo, miro de reojo a Sif, la cual meneo con la cabeza.

—Acabando la clase me espera aquí, por favor.— dijo el profe Utgard.

Thor suspiro irritado.

—Si profesor.— volvió a sentarse y Hogun lo miro.

—¿No has estado poniendo atención?

—¡Claro que he puesto atención!— susurro Thor, ofendido por dicha acusación.— lo qué pasa es que parpadeo y todo cambia.

—Es crucial que no parpadees.— dijo Sif un asiento frente a él.

—¿¡Y como se supone que haga eso?!— pregunto, tal vez un poco más alto de lo que debí, ya que el profesor se volvió sobre sus talones, acostumbrado.

—Odinson, si tienes alguna duda, dímela.

—No es nada.

—Espero que sea así, por que si alguien vuelve a hablar durante la explicación, va a da una gustosa visita a la oficina de la directora Ymir.

Todos los pequeños murmullos cesaron cuando se pronunció el nombre de la directora, una mujer que si bien era hermosa, también era aterradora.

Saco su teléfono celular cuando sintió un golpe en la nuca. Se volvió procurando de no hacer ruido y ver a Fandral y a Volstagg, que le lanzaban pequeñas bolitas de papel.

Los dorados ojos de su amigo viajaron rápidamente a una hoja de papel en la cual escribió, dobló y lanzó.

Thor la atrapo en vuelo.

«Te van a echar una bronca enorme.»

Thor escribió en respuesta y lanzó.

«Ya se.»

Volstagg leyó sobre el hombro de Fandral. Ambos rieron en voz baja.

«Sabes que si vas mal en una materia, no podrás entrar al equipo.» lanzó y recibió.

«Seamos honestos, el equipo me necesita más de lo que yo a ellos, me dejarán entrar» lanzó.

«Con el otro entrenador tal vez, pero con el señor Tyr no creo que sea así.» era la letra de Volstagg.

«¿Para que quiero entrar al equipo de rugby? Arruinarán mi bello rostro.» lanzó.

«Tiene un punto.»

—Thor, no es por que simplemente parpadeas si no te desconcentraras tanto...— empezó a sermonear Hogun.

—¿Es que quien quiere ponerle atención a eso?— dijo el rubio en voz baja, señalando al profesor Utgard, un hombre grande de unos sesenta años, pelo blanco y como trece kilos de más .— si fuera un poco más atractivo... y una hermosa mujer, tal vez pondría más atención.

—No siempre puedes esperar a que alguien atractivo venga a darte clases.

—La fe es lo ultimo que se pierde, ¿no?

—Eres un caso perdido.— dijo finalmente el asiático rodando los ojos.

Thor lo sabía, pero que más da; casi siempre le pedían a Sif o a chicas de otras clases que le dieran tutorías. Más sin embargo no era que se estuviese saboteando, realmente no entendía muchas cosas que ese loco decía; tal vez era su manera de explicar. Sif explicaba muy bien.

Rasgó la esquina de una de sus hojas del libro, la hizo bolita y la lanzó a la nuca de Sif, esta se volvió molesta. Su cabello negro enmarcaba su rostro de piel porcelana junto con sus ojos obsidiana.

—¿Que quieres, Thor?

—Nos vemos en tutoría.— dijo guiñándole. En respuesta Sif rodó los ojos y sonrió.

—Ya veremos.

Y como si se hubiera invocado a la campana que indicaba el inicio del receso, cosa que animó a los amigos de Thor, los cuales se pusieron de pie, el rubio también.

—Señor Odinson, quédese.— repitió el profesor Utgard.

Thor rodó los ojos y bajo con pereza escalón por es escalón hasta llegar al escritorio del profesor.

—Quédate aquí, volveré rápido.— dijo y antes de que Thor pudiera decir algo, fue dejado solo.

Espero, totalmente iba a ir a otro salón por su nueva tutora, se preguntó si iba a ser esa linda chica llamada Jane Foster. O incluso si era Darcy Lewis, que también parecía lista.

El profesor Utgard volvió, y detrás de él venía una figura pequeña con una sudadera verde y unos jeans negros. Empezó a analizar la figura desde las piernas, que realmente no se veían como la gran cosa, el torso estaba oculto debajo de esa gran sudadera, y ver el rostro de la “chica” no era realmente una chica; si, tenía rasgos finos, piel inclusive más pálida que la de Sif, cabello negro al nivel de los hombros que se le ondulaba dándole un look como de princesa. Tenía una cara delicada, nariz esculpidas y labios finos y... ¿pintados de rosa? No, ese era su tono normal. Pero era un hombre, princeso.

—Bueno Thor, él es Loki Laufeyson, tú nuevo tutor.

Hola a Todas Kuri aqui esta historia es de mi amiga SeleneGray esperó que les guste 💋

Un Poquito de Amor (Thorki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora