LA VERDAD

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Han pasado una semana no he podido encontrar la salida de este bosque sin fin, mis pies no soportan más, necesito un respiro. Me siento por unos momentos en una roca para así tomar el último trago de agua. Despues de un tiempo sentada decido continuar, cuando de repente mis piernas empezaban a temblar, provocando que me tropesara varias ocasiones. <<Este es mi final>> decía. Cuando mis esperanzas de encontrar el obsequio que mi querida amiga me había confiando, a unos metros se podía alcanzar a ver una cabaña.
Mi cuerpo ya no reaccionaba, estaba exhausta, sin ver adecuadamente piso en falso y caigo rodando hasta llegar abajo. Cuando reaccionó mi cuerpo se sentía pesado, todo me daba vueltas, me dolía la cabeza del tremendo golpe que me había ocasionado la caída, mi respiración se acababa y sin mas cierro los ojos.

Había una gran paz; esa luz que me hablaba era tan cálida que no quería irme hasta que comienzo a recordar mi niñez.
Caminaba junto con mi madre en el jardín del hospital. Cuando la venía a visitar me daba una gran sonrisa en su rostro, pero todo eso cambiaba cuando las enfermeras me pedían que saliera del lugar, y mi padre siempre me sujetaba de la mano con fuerza, luego, sin soltarme me miraba con una expresión de dolor que trataba de ocultarlo con una una sonrisa falsa. Aun pequeña , sabia bien que mi mamá no estaba bien y mi padre para no preocuparme me llenaba de alegrías aunque dentro de él sufría.
Un día mi padre no alcanzo a pasar por mi, y la directora me había pedido quedarme en las escuela hasta que mi padre volviera del hospital. No queria que mi padre se tomara la molestia de venir por mi y dejar sola a mi mami por los que me salí de la escuela.

Mi casa quedaba cerca ;el chófer nunca venía por mi ya que mis padres siempre querían recogerme como unos verdaderos padres. Tenia próximamente 5 años cuando ese catastrófico momento sucedió.

Al salir de la guardería por la parte trasera, unas personas lastimaban a un animal indefenso que al parecer habia tomado una rodaja de carne para alimentarse, cuando las personas ven que el pobre animal comenzaba a moverse muy bruscamente, lo dejan en paz y poco a poco dejo de respirar.

Cuando las personas desaparecieron, me acerqué con temor a aquella parte de el lugar, donde el pobre perro se encontraba tirado en el suelo. Lo toque para verificar si seguía vivo pero al ver que la sangre corría por la parte de abajo de su cuerpo me paralice, y me quede con el animal cantando una simple cancion de cuna, llorando con lagrimas de arrepentimiento al no poder hacer nada por aquella criatura.

Cayo la noche y seguía ahi, sentada sin hacer nada recordando esa horrible imagen. Un gran olor provenía de aquel animal por lo que sabia bien que ya era hora de irme.
Cuando llego a casa, varias patruyas se encontraban afuera me acerque muy confundida, al ver a mi padre preocupado me acerco a el.

- papa ¿te encontras bien?- estaba muy desconcertada.

Mi papá me abraza- ¿donde estabas?- comenzó alzar la voz- Me tenías muy preocupado, que pasaría si algo te sucede, ¿QUE RAYOS TE PASA?- despues comenzó a llorar- hija no me hagas esto por favor... Si algo te sucede no se lo que haré.

Luego de barazarme al mirarme directamente a mi rostro, recordé aquella escena por lo que no podía respirar adecuandamente, mientras lloraba pidiendo ayuda por el perro.

despues de ese día me diagnosticaron con una enfermedad o mas buen nada trastorno por lo que me costaba respirar al salir afuera, tal vez fue por el simple hecho de que el perro tenia alguna bacteria no le se.

Despues de una semana mi madre falleció; y mi padre decayó en desesperación y amargura por lo que nunca volvió a ser el mismo.
Al ver mi estado, decidió construir una casa afuera de la ciudad en la que estuviera apartado de todo, en la que nunca me faltaría nada.

Cuando la mudanza ayudaba a gusradar todas mis cosas para desalojar de alli, en un abrir y un cerrar de ojos veo al mismo perro observandome.
No me dio miedo ya que la expresión que daba era buena. Pensé en ir y acariciarlo pero mi padre me pidió que entrara al auto antes de que mi enfermedad comenzara a perjudicarme.

Me sentí de alguna manera aliviada y feliz. Pero me al llegar a la nueva casa me sentí sola, deseando que algún día alguien me dejan salir afuera y conocer lo que el mundo me tiene preparado.

Comencé a jugar y platicar con una chica llamada Daniela que al poco tiempo se convirtió en mi amiga y hasta el final me entere que era un fantasma.

Mi vida dio un giro inesperado y feliz pero quisiera empezar de nuevo y olvidar todo esto.

De repente despierto en una habitación <<no morí>> agradecía no morir pero... Espera... <<¿quien soy yo?>><<¿donde estoy?>>

Entra un chico- estas con vida - se sorprendió- ¡CHICOS AH DESPERTADO!- se me acerco- ¿esta bien?, te diste una tremenda caída, pero mis hermanos y yo te hemos salvado- me iba a tomar la presión.

Lo aparto- ¿quienes son?, ¿donde estoy?, ¿que hago aqui?- me puse en una esquina de la recámara y tome un peine que lo ocupe como arma.

-tranquila- dijo el chico mientras que llegaban lo demás- no te haremos nada todo esta bien, solo queremos ayudarte, ¿sabes donde vives?, ¿sabes quien eres?- trataba de hacercarce a mi.

- no... - mi cabeza empezó a pulsar- no, no, no,¡NO!- me desmayo

- parece que tiene amnesia- le comento uno de sus hermanos

- entonces ¿que haremos con ella?- preguntaba otro chico

- no lo se- respondió el chico que trato de hablar con migo- pero de una cosa estoy segura, ella no puede irse hasta que pueda recordar al menos algo de ella- termino la conversación.

BUSCANDO MI FUTURO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora