-como te sientes?- el nasho me miraba mientras hacia mi bolso.
-me siento bien, pero extraña- cerre mi cosmetiquero y lo tire dentro de la maleta.
-estas segura que quieres ir?
Lo miré, pero está vez lo pensé, en mi situación no iría por nada del mundo, los mareos y las náuseas me estaban cagando todo, el avión sería peor, el calor de Brasil no me ayudaría. Pero era mi gira, una dónde se costo, pero llegó, después de años de cagarnos entre todos. Y robarnos los lápices y las gomas.
-si, estoy segura- me enderece- necesito muchas galletas de agua pal viaje porque es lo único que hace que las náuseas culias se vayan.
-voy a comprarlas- dijo dandose la vuelta.
-no, espérame, déjame vestirme y vamos, me faltan otras cosas.
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-tira unas 10 nomas- le dije al nasho
-soda normal o soda selz?
-ay nose! Cuál es más rica?- mire entre ambas.
-la karina- dijo así tal cuál
-karina?- lo miré
-con la que estoy saliendo ahora, la anterior dijo que yo era muy coqueto con todas y se enojo, le dije que era parte del trato.- se encogió de hombros.
-parte del trato?-lo mire- no me digas que tienen contratos a lo grey wn porque me muero aquí mismo.
El nasho se largo reír a carcajadas.
-que wea- le dije
-parte del trato no contrato- me miro con una sonrisa- ellas saben que yo puedo estar con otras mientras estoy con ellas, eso es todo.
-nasho eri demasiado weon.
Agarre 10 galletas, 5 normales y 5 selz, las tire al carro, me fui a la sección de desodorantes, el mio debería estar por acá.
-cachate, después vamos a estar aquí mismo, pero comprando pañales.
Mire al nasho como wtf te pasa, pero tenia razón, al lado de los desodorantes estaban los pañales y accesorios para bebés, los mire y me dio una ternura hermosa, agarre un tete y se lo mostré al nacho quien estaba sonriendo como weon.
-estoy tan emocionado por la wawa por la chucha, mira esos utensilios de bebés- se acerco a verlos.
Estuve pensando un buen rato sobre esto, que no me di cuenta que el mike estaba mirándonos desde el principio del pasillo.
Mierda.
-nasho ya tenemos que irnos-dije nerviosa.
-pero mira esta ropita- me la puso encima de mi cara- le quedaria hermosa.
-vas a tener bebé nasho?- el mike pregunto asi nomas, altok.
Con el nasho compartimos una mirada con mucha complicidad.
-eh no, no estoy esperando wawa, solo estabamos viendo y emocionandonos con las cosas.
-que haces acá?- pregunté
-comprar- levanto una bolsa de pollo asado.
-buena- dije sin mayor interés, yo pensaba que me andaba siguiendo. Diablos.
-como estas de tu enfermedad al estómago?- me preguntó.
-eeeh bien, mejor- sonrei nerviosamente, esta enfermedad tiene apellido "clifford" y el no sabe.
-me alegro, nos vemos mañana?- me dio un beso en la mejilla, que estuvo cosquilleando por varios segundos.
-si.
-nos vemos nasho- hizo el signo paz y se fue por el mismo pasillo.
-weona casi te pillan-el nasho me miro.
-pero no paso- busque mi desodorante y lo puse en el carro.
-pero pudo haber pasado- empezó a caminar conmigo- debes decirle.
-nasho- paré mis pasos- de verdad me siento horrible al no decirle, pero aún nose que quiero, esto es too mash pa mi, déjame hacer las weas a mi manera- lo miré esperando una respuesta.
-bueno- suspiró- solo trata de no demorarte tanto weon.
Nos fuimos a pagar mis súper cosas.
-18.370- dijo la cajera.
-que?- dijo el nasho- cómo tanto en 10 galletas, 1 desodorante y toallitas higiénicas.
-ay nasho paga- le dije pa callao.
-pero maca, las toallitas estaban en oferta- me miro.
-esas no están dentro de la oferta- la cajera miro la pantalla.
-las toallitas nocturnas con alas si estaban en ofer...-se quedo callao, gracias señor al fin- Pa que mierda queri toallitas?- me miro confundido.
-porque me tiene que llegar en d...- la realidad me pegó- oh mierda.
Con el nasho nos miramos y nos pusimos a reír.
-lo siento las toallas no la llevamos- el nasho le sonrió a la niña.
-okey- apretó varias teclas- disculpa- me miro- podría ir a dejarlas en su lugar? No tenemos personal hoy.
-si claro- weona stupida, no lo dije, pero lo pensé.
Agarré mis toallitas y pase por la fila, me fui al pasillo y las deje en su lugar, volví donde el nasho y el weon le estaba anotando algo en un papel.
-igual llamame y avísame en caso de que las toallitas sigan en oferta- le entregó el papel- ahí mi hermana quizás las necesite.
-gracias- la weona le sonrió coquetamente.
-nasho tenemos que irnos- agarré las weas y las eche en el bolsito que traje- ahora.
El weon le dio un beso en la mejilla antes de irnos. Weon barsa, caliente culiao.
