I'm the bad guy /v h o p e/

4

Taehyung parecía estar pegado al piso, o simplemente no quería levantarse. Los tipos malos se habían ido, estaban sólo él y Hoseok.

Hoseok no sabía si debía irse, ya que de alguna manera se había involucrado en esto. ¿Tenía que ayudarlo a levantarse o empezar a alejarse sin decir una palabra? ¿Quién no iba a decir que Taehyung le soltaría un puñetazo? A fin de cuentas se había metido en los problemas de alguien más, incluso lo había comprometido a algo que... Ah, debió haber tomado el transporte.

Taehyung respiraba pesadamente, con la cara pegada al pavimento. Hoseok tragó saliva antes de poder decir algo.

— Hey —su voz había salido un poco quebrada, nada segura. No había sido un "hey" animado, un "hey" amigable, habían sido palabras asustadas, con miedo de salir.

Taehyung levantó la cara, al igual que su cuerpo, sin mirar a Hoseok, sin hacerle caso. Se puso de pie más rápido de lo que Hoseok esperaba. Le salía bastante sangre de la nariz, tenía el rostro destrozado. Hoseok pensó que esas heridas necesitaban ser atendidas.

El momento en que Taehyung dio un paso, estuvo a punto de caer por el dolor en su costado.

— Alguien tiene que atender tus heridas —Dijo sin dudarlo, pero Taehyung no parecía muy interesado.

— Estoy bien —No podía ir al hospital, le preguntarían como se había hecho esas heridas, empezarían a sospechar de él. Tarde o temprano descubrirían sus trato sucios y no necesitaba estar más meses en prisión preventiva, porque esta vez podía ser encontrado culpable.

Hoseok no sabía que hacer, no podía dejarlo ir así, estaba hecho mierda. Pero tampoco quería meterse en sus planes, no conocía a Taehyung, y si estaba en problemas con estos tipos es porque él podía ser igual, o peor.

— Insisto, no puedes dejar las cosas así, vas a tener una infección, o... Vas a dejar algo sin atención y en un futu-

— Estoy bien —dijo. Miró a Hoseok a los ojos y pensó el golpearlo. ¿Quién le iba a garantizar que Hoseok no iba a decir algo?

No, no podía hacerlo. Hoseok le había salvado la vida, prácticamente. Aunque lo había metido en un problema más grande que estar muerto, no sabía si tenía que decir gracias o si tenía que soltarle patadas hasta dejarlo inconsciente. Su balanza de necesidades y deseos estaba bastante descolocada.

— Has hecho suficiente —soltó. No era su intención hacerlo sentir mal, pero quería al menos dejar una secuela en él por haberlo hecho prometer el doble.

Hoseok se vio un poco afectado. Sus ojos de cachorro salieron a flote, mientras parecía confundido. Se rehusaba a mirar a Taehyung a los ojos.

— Sólo quería... Es decir, pensé que estaba ayudando.

El rostro de Taehyung no estaba ni tocado por la actitud tan mansa de Hoseok. No sentía pena, sus ojos estaban más afilados que el filo de un cuchillo. Apretó los puños, estaba más preocupado por saber como es que conseguiría el doble de dinero, que por sus heridas.

— Maldita sea... —Taehyung susurró antes de tomarse el cabello entre las manos. Había caído en cuenta de que debía el doble de dinero. Apenas podía comer, ¿Cómo carajos podría conseguir el dinero?

Hoseok se apartó unos pasos de él, sólo por precaución.

Taehyung levantó su cara hacia al cielo y tomó una respiración profunda. Hoseok había escuchado tantas historias sobre Taehyung que tenerlo frente a frente era suficientemente irreal. Era como tener al protagonista de una película de terror frente a ti.

— ¿Qué tanto escuchaste?

Hoseok levantó sus cejas.

— Lo suficiente pa-para no entender nada. En serio, estaba más ocupado en no llorar.

Taehyung apretó la mandíbula.

— Realmente... Realmente pensé que ibas a morir y que yo iba a presenciarlo todo. No sé como es que pude intervenir.

Taehyung miró a Hoseok de abajo hacia arriba, después miró a los lados y de nuevo a Hoseok. Ciertamente este chico no parecía del lugar, se veía como esos nerds que si iban a la escuela a estudiar, de esos que vivían con sus padres y tenían una vida mejor de la que Taehyung podría soñar nunca.

— No debiste de haber intervenido.

Este chico tiene ganas de morir.

Muy tarde, ya lo había hecho.

— ¿Lo siento?

Taehyung no podía tomarse en serio a Hoseok.

— Lárgate de aquí —dijo— No viste esto.

— ¿Qué hay de tus heridas...?

— Vete.

Hoseok no quería hacerle repetir otra vez. Lo había escuchado claramente.

— Bien.

Taehyung no dejó de fingir que el dolor era nulo. Su rostro no mostraba una pizca de ese dolor que por dentro lo tenía molido. Tal vez su postura decían que estaba bien, pero lo que deseaba era tirarse y no despertar, necesitaba dormir al menos seis días. Afortunadamente Hoseok no tardó demasiado en darse la vuelta, justo en ese momento Taehyung deshizo su expresión de fortaleza, frunciendo sus cejas en un retorcido dolor que le entumecía las mejillas.

Hoseok se alejó sin mirar hacía atrás.

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piedpiper