Capitulo 15

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                      Confesiones.

Era un sábado 18 de Junio, ese día era muy hermoso y tranquilo.

En esos momentos yo estaba en catesismo dando clases con Armando, y de repente veo que Enrique llega a donde yo estaba y me dice...
-- Tenemos que hablar.
-- Yo le dije: No tengo nada que hablar contigo, así que retirarte.
-- Vamos Doris no me puedes hacer esto.

Y en ese momento se para Armando y le dice:
-- Ya escuchaste, retirate
Él le responde.
-- Tu no te metas.
-- Armando le dice: Yo me meto donde yo quiera y mas si es algo de Doris.

En ese momento me quede un poco confundida, pero solo le dije a Enrique que se fuera y lo hizo.

Después de una hora termino la clase y pues como no teníamos nada que hacer Armando y yo.

Pues le pedí que me acompañarce a casa y él amablemente me dijo que si.

Pero realmente le dije por que quería preguntarle algo que realmente tenía mucha curiosidad por saber.

Pues después de caminando y hablando, me digne a preguntarle.
-- ¿ Te puedo hacer una pregunta?
-- Si claro.
-- pero prometeme que dirás las verdad.
-- Lo prometo.
-- ¿Te gusto?
En ese momento se quedo un momento en silencio, respiró y me contestó.
-- La verdad me pareces muy bonita, me gusta como eres conmigo y con las demás personas, me gusta que seas alegre ante todo, así que se podría decir que si, si me gustas.

Dios en ese momento me quede paralizada por equellas plabras, pero de mi boca solo salio esta pregunta...

-- ¿Enserio?
-- Si: respondió Armando.

Pues como ya habiamos llegado a mi casa le dije.
-- Bueno pues esta es mi casa y pues creo que nos vemos hasta mañana.
-- Si claro, hasta mañana, Descansa.
-- Si tu también descansa.

Ese día no pude dormir, en mis pensamientos solo estaba su voz que decía una y otra y otra vez esas "La verdad me pareces muy bonita, me gusta como eres conmigo y con las demás personas, me gusta que seas alegre ante todo, así que se podría decir que si, si me gustas."
Esa noche solo me imaginaba que podría pasar después de todo, ¿yo también le podría decir que me gusta?, La verdad no lo sabia y eso es algo de lo que estoy segura que no me arrepentiría de decirlo.

Una semana después.

Pues era hora de decirle a Armando que él también me gustaba a mi y si lo hice.

Él estaba Hablando con Perry y un chico que se apodaba Gato.
Pero yo fui y le pregunte, ¿podemos hablar? Él me contestó muy amable diciendo.
-- Claro que si.

En ese momento le confesé que me gustaba demasiado y que me gustaba todo de él.
Y él solo se río y me abrazó.

Chicos estoy pensando en hacer otro libro pero este sera de el precente de Doris y Armando.
No se quieran, pero gustan comenten, yo si quiero.

"NADIE SABE LO QUE ES SUFRIR"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora