Jennie vuelve por un motivo.
Ese motivo es alguien y ese alguien es una misión. Una misión que sin previstos lo eligió por motivos muy personales. Una misión que además de ser un trabajo es algo más que eso. Una misión que es muy importante, pero es...
Eran las 5:00 de la tarde cuando llegue a casa de Jamie para poder encontrarla ahí, eran las 5:05 cuando me percate que se encontraba estudiando y eran las 5:35 cuando volví a mi casa a descansar. Eran las 7 cuando me levanté de mi descanso y sabía que mi hermana aun no salía de UNI entonces decidí conducir y conocer lugares nuevos como siempre hago cuando tengo mis tiempos libres, pero de por si no puedo conocer nada nuevo ya que conocía hasta el mismísimo escondite de este estado. Siendo las 9:15 de la noche cuando volví otra vez a la casa de los "recuerdos", porque es eso lo que era para mí. Todavía no se encontraba mi jodida hermana en casa, preocupada y en alerta le envié un mensaje avisándole mi llegada a la cuidad, no contestó a mi mensaje con otro, sino que le pareció más emocionante llamarme feliz por razón de que había vuelto y degustada para decirme que no llegaría aun porque se quedó haciendo clases extras con algunos compañeros y su profesora.
Algo normal en lo que a mí me respecta, entre en aquella casa con las llaves de repuesto que guardan debajo de una roca metida entre los pulcros y bien cortados arbustos. Podía ser una sinvergüenza entrando en la casa sin autorización de alguien, pero no lo era tanto como para indagar cada parte del lugar. Esta ya no era mi casa para tener tal confianza.
Subí las escaleras una por una para ir directo a la habitación de Jaime para volver a dormir, de solo pensar de cómo era el trasiego de mi vida me daban ganas de dormir para siempre, pero lo máximo que podía dormir eran cinco horas.
En fin, en todo lo que resta me levante a 2:15 a.m de la madrugada. No me sorprendería de porque duermo tanto, después de toda mi vida era muy activa, y no en el ámbito sexual. Y eso sí que daba pena para una mujer como yo.
Abrí los ojos con pesadez y solo me quedé acostada aun sin salir de la cómoda y caliente cama. Me estire en todas las posiciones que podía como si fuera una profesional en yoga buscando a la vez despejarme del recién despertar mientras que analizaba en qué momento me había dormido. Después de varios segundos mirando un punto fijo en el techo de reojo visualice mi móvil encima de la mesilla de luz al costado derecho de la cama y soltando un quejido me estire a alcanzar mi iPhone.
Quería ver que tenia de nuevo; Notificaciones de Spotify, Twitter y Facebook no tenía por motivos muy personales.
54 Whatsapp de uno que otros de un grupo, otro de mi hermana pidiendo que la esperara y avisando que apenas terminaba lo que hacía y volvía con la justificación de que estaba estudiando para una evaluación que era en dos días y los temas eran muchos y extensos, y enviaría un mensaje al salir, luego era otro de Leonard que miré, pero no conteste, luego será.
También notificaciones de Instagram, cabe decir que era una de mis Apps preferidas no había momento que no me sacase fotos y no la subiera; indague un poco viendo y contestando comentarios que dejaban en mis fotos y mientras que lo hacía en ese momento me acorde que iba a subir una foto que me saque cuando me fui los cincos días a Washington D.C y por falta de Internet no la publique. Salía bastante bien, pero con la diferencia que por tales sombras en el lugar y porque la edité colocando un filtro oscuro que hicieron salir oscuros mis ojos cuando en realidad estos eran bastante claros, pero fuera de eso salí bastante bien.
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