Mis manos empezaron a temblar, un sentimiento de angustia invadía mi ser.
Así que decidí llamarte.
Primer intento, segundo intento, tercer intento...
Por qué no quieres hablar conmigo?
¿Acaso olvidaste lo que algun día fui para ti?
Mis manos empezaron a temblar, un sentimiento de angustia invadía mi ser.
Así que decidí llamarte.
Primer intento, segundo intento, tercer intento...
Por qué no quieres hablar conmigo?
¿Acaso olvidaste lo que algun día fui para ti?