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Narra Steve 

-ella ella....

-si ella es como once

-entonces que hacía tirada en la carretera

-tal vez escapo

Quince empezó a moverse y a parpadear

Nos quedamos esperando a que despierte y cuando lo hizo

-hola soy Steve – dije lo más amable posible ya que ella parecía aterrada y la entiendo, aparecer de la nada en una casa que no conoces con gente que no conoces sería muy raro

-tranquila no te haremos nada malo –dijo Dustin

Ella solo miraba todo aterrada, su respiración era agitada, tenía los labios morados y sus ojos irritados, también tenía, sangre mal limpiada en su nariz

-cuál es tu nombre?

Ella solo ignoro mi pregunta

-qui..quienes s..son?

-oh yo soy Steve y él es mi amigo Dustin, y tú quién eres? Tienes nombre?

-que hago aquí? - dijo evitando mi pregunta como siempre

-te voy a decir todo lo que quieras, pero primero dime tu nombre

Ella solo me miro con desconfianza y me mostro su tatuaje

-quince, soy quince

-y de dónde vienes quince?

-no quieres saberlo

-claro que si, por algo te pregunte

-y yo te dije que no querías saberlo

-bueno chicos hice un te bien caliente para cuando...-dijo Robin entrando a la sala – ya despertó, bueno te hice un te

Quince solo se dedicó a mírala con desconfianza

-lo vas a agarrar? -pregunto Robin impaciente

-te? -me pregunto quince mirándome

-sí, es una bebida caliente, tómala te va a hacer bien

Quince la agarro con desconfianza, paso una mirada por todos que solo nos limitábamos a mirarla y le dio un gran trago a su te, cuando le dio el trago se ve que estaba muy caliente porque lo trago con dificultad

-esta caliente? -le pregunte, aunque la respuesta era obvia

-caliente – dijo asintiendo

-y entonces como te llamas? -pregunto Robin y quince solo la ignoro

-se llama quince –dijo Dustin

-como el numero?

-si, como el numero

Después de eso estuvimos hablando y quince solo se limitaba a escuchar

-bueno Steve nosotros nos vamos, te veo mañana -dijo Robin

-si te veo mañana, adiós

Quince estaba mirando fijamente a Robin que al parecer no le había caído muy bien

-bueno tu dormirás en mi cama

-en tu cama?

-sí, pero yo no dormiré contigo, dormiré en el sillón -ella solo me miraba extrañada- ven, es por aquí

Mientras íbamos a mi habitación ella se dedicaba a parar a mirar cada cosa que había

-esta es mi habitación –dije mientras ella observaba todo- y ahí dormirás tu

-es bonita –dijo

-sí, es bonita. ¿Bueno quieres algo de comer? -ella solo negó con la cabeza –okey, entonces a dormir

Ella se acomodó en la cama y empezó a taparse, cuando me acerque a apagar la luz siento una mano rodear mi muñeca

-no

-okey, no la apago –me empecé a alejar

-Steve

-sí?

-quédate