Capítulo 13: De regreso

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Narra Adrien:

Me contuve de abrir aquella caja en esa noche, aprovechando que el día siguiente era Sábado y lo tenía libre, lo abrí para poder disfrutar el regalo todo el día.

Me sorprendí al ver ese brillo familiar, característico de una caja de miraculous.

De pronto escuché una voz familiar, familiar cómo la cereza sobre un helado de vainilla.

XP: Hola chico, ¿me extrañaste?

Adrien: ¡Plagg!

Lo abrazé con todas mis fuerzas, me alegré demasiado, regresó alguien con quien me podía desenrredar, hablar con alguien que me entendía, o eso creo.

Entre abrazo y abrazo, me percaté de un sobre que había dentro de la caja, lo tomé, lo abrí y me emocioné.

[...]

Carta:

Chat Noir,

Perdón por haber hecho que Ladybug te haya quitado el anillo.

Me equivoqué al pensar que tu nuevo poder, hubiera sido por unirte a Hawk Moth.

Espero que puedas perdonar, aparte te devuelvo tu anillo.

Haz valer la pena está decisión, y espero que esto no sea otra equivocación.

Atentamente,
El guardián de los prodigios.

[...]

¿Unirme con Hawk Moth? Eso ni pensarlo, no me imagino estar junto él, peleando contra mi Lady.

Y hablando de mi Lady, aún no puedo creerlo, ¿cómo pude estar tan ciego? Ella se sentaba atrás de mí, espero que esto no afecte nuestros enfrentamientos contra los akumas.

Plagg: Bueno chico, que esperas, yo se que tu quieres.

Prosegui a decir aquellas palabras mágicas que tanta felicidad me habían traido.

Al terminar la transformación, del cascabel salieron 2 akumas de tonalidad verde claro.

Chat: Esto se siente bien.

Salí de mi cuarto y me dediqué a dar unas cuantas vueltas alrededor de la ciudad, los 2 akumas me seguían. Me volví a sentir libre.

Después de varios minutos paré y fui a la casa de Marinette, a ver cómo estaba.

Me asomé por la ventana, estaba con su amiga Alya, pero no parecían muy amigas.

Se estaban peleando, jalaban de lado a lado un banderín, parecía que era un evento importante para ambas.

Me quedé viendolas pelearse, quería, digo, tenía que intervenir, pero no sabía cómo.

Marinette: No Alya aún no está listo.

Alya: ¡Marinette se nos va a hacer tarde!

Marinette: Pero faltan 15 minutos para el comienzo del evento.

Alya: ¡Por eso!

Marinette: No, ¡todavía falta!

Después de unos cuantos jalones ambas tiraron del banderín en direcciones opuestas haciendo que este se rimpiera.

Alya: ¡Ya viste lo que hiciste!

Marinette: ¿¡Lo que yo hice!? !Tu fuiste la necia que lo jaló!

Alya: ¡Yo te dije que se nos hacía tarde!

Marinette: ¡Pretextos!

Alya: ¡Tortuga!

Marinette: ¡Necia!

Alya se quedo sin cómo contestar y dijo lo primero que se le ocurrió.

Alya: ¡Y tu eres un pavo!

[...]

HM: Dos amigas que se pelean por algo tan insignificante, el cebo perfecto para mi akuma. Ve con ellas y demonísalas.

[...]

Ambas quedaron tan peligrosamente enojada que un akuma pronto cruzó alado de Chat, sin pensarlo activó su cataclismo, con el codo rompió la ventana, agarro el akuma y lo transformó en su propio aliado, después chocó contra ellas dos.

 Alya y Marinette: ¡Ouch!

Chat: Perdón...

Marinette: ¿Qué haces aquí?

Chat: Sólo paseando...

Alya: Supongo que viste nuestra pequeña discusión.

Chat: Sí, y que bueno.

Marinette: ¿Por?

Chat: Estuvieron a punto de ser akumatizadas.

Alya: Ya ves Marinette por tu culpa.

Marinette: ¿Mi culpa?

Chat: Ya silencio, mejor olviden eso y tranquilisense. Es sólo un banderín.

Alya: Tienes razón, pero el banderín es importante para Marinette.

Chat: ¿Por?

Alya: Es porque Adrien hoy da su recital de piano.

Chat: Su recital de piano... ¡El recital!

Alya: ¿Tú vas a ir?

Chat: Sí, digo no, digo... no sé. Pero me tengo que ir.

Chat sale por la ventana, después se aleja de ella un poco y se vuelve a asomar.

Chat: Adiós princesa...

Alya: ¿Princesa?

Marinette: Larga historia.


Akumas CataclismicosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora