—¡Ya te dije que eso no te incumbe!— dijo el pelirrojo azotando la puerta de su cuarto. Mientras que en la planta baja su progenitora dejaba salir unas cuantas lágrimas.
¿Qué le pasó a su bebé?
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Nathaniel se encontraba en el taller de arte, junto a Marc, el cual con un sonrojó en sus mejillas posaba viendo hacia la ventana.
Se encontraba sentado, viendo dirección hacia una ventana cruzado de piernas. Dónde la luz iluminaba su cara con sutileza.
Simplemente hermoso.
Nathaniel por su parte se encargaba de plasmar dicha escena en su cuaderno.Sentado a pocos pasos del moreno.
Un silencio cómodo inundaba el ambiente siendo ellos los únicos en el taller.
Perfecto.
Pensó el de cabellos rojos para terminar de firmar aquel dibujo.
—Marc, ya puedes moverte — le anunció mirándolo directamente , viendo como el azabache suspiraba, para luego estirarse un poco.
—¡hump!— se quejó alzando los brazos al aire ,en busca de que sus huesos tronaran, pero no lo consiguió.
Una risilla salió de sus labios.
—lo siento, por, tenerte tanto tiempo en esa posición—
— no te preocupes, está bien—
Se miraron unos cuantos minutos admirandose entre ellos.
Él de cabellos rojizos debía admitir su atracción hacia el hombre que tenía frente a él, solo que su cobardía y recuerdos se lo impedían. A veces tenía ganas de tirar todo por la borda y salir del país, pero luego se convencía de que todo seria diferente.
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°~°Recuerdos°~°
FanfictionTal vez sea otra historia cliché o tal vez no. Nathaniel como cualquier adolescente se a enamorado de diversas personas a lo largo de su vida , o sólo de chicas, según sus amigos, más sin embargo Marc a cambiado su rumbo haciéndolo querer conocer má...
