Quiero empezar esto con una historia.
Había una pequeña niña, una niña que amaba leer, escuchar música, escribir, entre otras cosas. Esa pequeña gozaba de la vida, o eso creía. Ella vivió entre muchos fantasmas.
Sus primeros dos fantasmas parecían amables, la consentian, la mimaban, como quieran decirle, pero esa era su acción. Estos dos fantasmas complacian a la niña, la hacían feliz, una hermosa y extraña sensación para algunos...simple perdición para otros. Los brillantes ojos de la niña eran deleitados cada vez que recibía un nuevo juguete, un delicioso dulce o una costosa prenda. Estaba cegada, cegada por la avaricia,por la necesidad incomprensible, incomprensible como su ceguez.Vivió asi hasta que esos dos fantasmas la abandonaron para atender a un niño menor, ella no entendía que este lo necesitaba, por lo que se molestó. Se molestó tanto que intento causarle mal al pequeño consiguiendo el odio de los fantasmas. Mientras más crecía más malvados eran, le causaban tanto mal que esos fantasmas que alguna vez fueron la felicidad y el consentimiento se convirtieron en dolor y abandono. Habían llegado para quedarse.
Años después llegó un nuevo fantasma, un fantasma de alma blanca, juguetón y divertido. Lograba sacarle risas y sonrisas a la niña, algo que sus anteriores fantasmas le habían quitado. Este nuevo fantasma le brindaba amistad, un hermoso corazón que quería jugar. La pequeña e inocente niña jugó con su nuevo amigo durante años.
Sus planes de amistad fueron arruinados cuando el fantasma de alma blanca sació su necesidad de jugar, su necesidad de divertirse con alguien. Cuando este logró esto, su sonrisa se volvió sarcástico, su mirada burlona y le dijo a la pequeña niña - Gracias por saciar todo, ya no te necesito- al decir esto la miro de forma burlona y se retiro. La sensación de amistad y graciosa que este fantasma le había brindado alguna vez, fue cambiada por traición y desconfianza. Y, como sus últimos fantasmas, vino para quedarse.La desconfiada niña recibió a un fantasma más. Este era tímido y cariñosos. Era fiel, lo que esa rota pequeña necesitaba. Este fantasmita curo cada cicatriz abierta que sus anteriores y permanentes tormentos le habían, descaradamente, dejado. Luego de un tiempo un fantasma totalmente negro se había adentrado es sus vidas. La niña, con el tiempo, observaba como el blanco fantasma se volvia gris y se alejaba de su lado por estar con el fantasma negro.
El fantasma negro, conforme el blanco se hacía mas oscuro este se volvia más claro. Eso se mantuvo así hasta que ambos llegaron a tener el mismo color, un gris oscuro opacado. Cuando esto se termino, el anterior fantasma negro se fue con uno negro y dejo al anterior puro gris. La niña, se acercó y , aún, lo mantiene a su lado como un amigo. Este de ser un sentimiento seguro y fiel se volvió la inseguridad y el temor de traición.
Llegó, hasta ahora, sus ultimos fantasmas. Estos no eran blancos, ni negros, ni grises, eran de color perla transparente. Eran tres que llegaban con el corazón roto, una vida rota, una desgracia tras otra. La niña, por fin, se sintió útil. Ella negaba su dolor, negaba el haber sufrido. Bajo esas circunstancias, intentó hacer feliz a estos rotos fantasmas. Les sacaba sonrisas y estruendosas risas. Amaba hacer eso, ella deseaba la felicidad de ese trio antes que la suya. Cada vez que ellos se sentían mal ella los escuchaba y resistía la carga. Esos creian tener depresión, tener esa horrible ¿Condición? ¿Sensación?...
La niña se podría por dentro, se sentía ¿Debil?. Ya ni ella lo sabía. Sentía que su cuerpo caragaba mucho dolor, muchas ganas de saltar de un lugar alto y caer, ganas de tomar un arma con la cual hacer varios daños en el cuermo, muchas ganas de cerrar los ojos y no volver a abrirlos...Ella se mantenía cuerda de una manera muy dolorosa, horrible para el corazón humano... este era: » Eres una caprichosa exagerada, solo por unos pequeños flechazos caeras. Patética. Tus problemas no son nada comparados con los de los demás, maldita desgracia. « No decía nada porque, según ella, tenía razón, no importaba.
Ella aún vive bajo su máscara. Creyendo sus propias mentiras, guardando su dolor para ella misma. Lo peor es que, esa niña....Soy yo :).
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GRACIAS POR LEER :)
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Disculparme por mostrarte una mentira cada día que te complace?
De TodoEsta va a ser una historia »diferente« ya que, esta algo basada en mi existencia y en mis problemas. Esto lo escribo simplemente para lograr hacer feliz a los demás y que no caigan en algo que es llamado depresión. Mucha gente cree que por sentirse...